Lo sucedido el pasado 02 de Diciembre con motivo del Referendo aprobatorio de la Reforma Constitucional confirma el viejo dicho de “que perdiendo a veces también se gana” y podemos ver lo siguiente:
1. Chávez se muestra en este momento, ante el país y el mundo, sin lugar a ninguna duda, como el político latinoamericano más democrático de la era contemporánea, al reconocer en forma indubitable e inmediata el triunfo de la opción contendora, echando por tierra la matriz de opinión de que es un tirano, autócrata o dictador. Igualmente se confirma el talante legalista y libertario del pueblo chavista que acepta sin violencia, “guarimbas” y protestas la decisión de las mayorías.
2. El gobierno y el pueblo lograron detener cualquier agenda violenta de la oposición, destacando su apego a la institucionalidad y a la paz, a pesar de los dolarizados planes y toda la propaganda mediática de desinformación, tergiversaciones, mentiras y terror desplegada a estos fines.
3. La oposición ha reconocido públicamente la Constitución del año 1999, aquella que ellos mismos rechazaron en su referendo Aprobatorio y que desconocieron desca-radamente durante las breves horas del mandato de Carmona. Serían muy “caras duras” si después de esto todavía insisten en ignorar los cambios que este instrumento contiene y sobre todo aquellos que aún no se han realizado y que ahora es oportuno instrumentarlos. Hoy 8 millones declaran abiertamente su adhesión a esta Constitución.
4. La oposición también tiene necesariamente que reconocer al árbitro y por lo tanto, aceptar todas sus actuaciones, en especial las pasadas elecciones en donde ellos han salido perdidosos y por sobre todo, reconocer igualmente al CNE y su actuación en los próximos comicios que se avecinan.
5. La diferencia comparativa en las filas opositoras el cual alcanzó aproximadamente a solo 160.000 votos con relación las pasadas elecciones presidenciales de Diciembre 2005, indica lo siguiente:
1. La oposición apenas alcanzó superarse en un TRES POR CIENTO (3%) a pesar de la intensa y multimillonaria campaña desplegada y por la actuación de los estudiantes que sirvió para ocultar la gastada fachada de la vieja dirigencia opositora. Ya se observa que salen de nuevo a la palestra estos cuestionados líderes. Esperamos que no desplacen a la nueva, fresca e insurgente presencia de los jóvenes, tal como lo hicieron con los petroleros, los militares de Altamira, Carmona, Carlos Ortega y todos aquellos que una vez servidos a sus fines abandonan sin contemplación.
2. La abstención dio al traste con el proyecto de reforma constitucional, pero observamos que los abstencionistas, tampoco fueron a apoyar a la oposición. Independientemente de las lecturas, que obligatoriamente habrá que realizar de esta circunstancia, el pueblo tampoco se dejó arrastrar por la alternativa ofertada por la oposición.
6. La oposición solo logró ratificar el máximo de su capacidad de arrastre y convocatoria, es decir: “Echó el resto” y deberá repensar seriamente su estrategia si quiere remontar esa cifra, ya que no ha logrado (Salvo casos puntuales de entristecidos traidores) que el pueblo realmente los acepte.
En fin, todas las ganancias obtenidas dentro de esta derrota, hacen pensar que el liderazgo de Chávez está intacto y que a pesar de todo se han logrado avances importantes, a los cuales no hace referencia la dirigencia opositora, pero que todos los venezolanos debemos valorar en su justo sentido histórico.
idsilvap@gmail.com
