La merma en la participación de los venezolanos arrancó hace un buen tiempo. Para lograr que salieran 5 mil ucevistas a marchar por allá en la década de los 80, había que echarle piernas a repartir no menos de 30 mil volantes, llenar la Ciudad Universitaria de pancartas y afiches, visitar ene cantidad cursos y rogar que algún medio de comunicación “hiciera el favor” de publicar la convocatoria. Tarea nada fácil para un puñado de estudiantes sin mayores recursos económicos.
Algo está pasando que los venezolanos supuestamente partidarios de la oposición ya no participan en las actividades convocadas por la Coordinadora Democrática. Con el 97% de los medios de comunicación a su servicio es un tanto extraño que de un tiempo para acá, o para ser más exactos desde un cierto sabotaje para acá, la merma en la participación de los ciudadanos identificados con la oposición se observe indetenible.
Para muestra el último titular que pude leer sobre el número de participantes de la oposición en una manifestación: “Cien mil personas irán a la marcha” (El Universal, 21/01/04). Y el primer párrafo decía: Cien mil personas aspira movilizar la Coordinadora Democrática para la concentración que este 23 de enero se realizará en la avenida Victoria (Presidente Medina) para exigir al CNE respeto por las rúbricas del Reafirmazo.
Bueno, no es que movilizar a 100 personas sea concha de ajo, pero no me digan que no contrasta con los 2 millones de personas que dizque solían movilizar al coro de la mujer con voz chillona: “lleva tu pito, tu bandera, tu bronceador” que nos atormentó durante 60 y pico de días al “son” de los partes de guerra de los “Tres chiflados” criollos.
¿Qué les pasó? ¿Qué eso que ahora “aspiran” convocar cien mil? ¿Una merma de un millón novecientos mil partidarios en un año? ¿No será que ya no encuentran cómo engañar? ¿No será que la realidad vale más que mil imágenes trucadas?
No me digan que estas cien mil personas no contrastan con las tres millones seiscientas mil firmas que supuestamente recogió la oposición para el revocatorio presidencial. No me digan que no contrasta con las desaforadas declaraciones de los dirigentes de la Coordinadora quienes ya no hayan qué decir, con qué frases impresionar, que no hayan con qué ni a quien destruir a través de los medios de comunicación, para ver si logran “activar” de nuevo a sus partidarios.
Últimamente hasta creen en espíritus que vuelven a “poseer” a rectores, envían correos electrónicos con “predicciones” de brujos antichavistas y se aferran a la mudanza de la diosa como si María Lionza pudiera hacerles el milagrito. Como ven toda una “esotérica” arremetida. ¡Crucen los dedos!
Porque de que vuelan, vuelan.
*Periodista
