UNO: ¿Qué pasaría si el comandante se fuera de la presidencia a destiempo? La pregunta hecha por una camarada del PSUV me descalabró por dentro. Me hundió en un mar de reflexiones, le envié un mensaje por mi celular “Te la respondo por aporrea”. No se necesita mucha imaginación para figurarnos lo que pasaría en el supuesto negado de que nuestro comandante mandara solo hasta el 2013 y volviera al poder la histérica, sicótica, reaccionaria, derechista y fascista oposición venezolana.
DOS: Imagínense ustedes quienes me leen y tomen en cuenta lo siguiente. Si los candidatos de la derecha oposicionista y golpista obtuvieron en triunfo en las elecciones del 2N en 5 estados y 55 Alcaldías de los Municipios (La revolución ganó en 17 estados y el 80% de las alcaldías de los municipios) y con ello, se han envalentonados y han mostrado las uñas con sus agresiones y persecuciones al pueblo, a las misiones de salud y educación. Afortunadamente el pueblo organizado defendió sus conquistas y no permitió la toma de los CDI en esos estados donde ganaron. Imaginemos por un momento a Ratonsky, a Rosalito, al viejo Salas Romer, al “abuelo” Antonio Ledezma y para que la pesadilla sea mayor, al malandro de “cabeza de motor” en la presidencia. Pensemos un momento en lo que harán adecos y copeyanos en la primera semana de haber tomado el poder. Nada más de pensarlo me entra un escalofrió de muerte y una visión de caos y violencia.
TRES: Hundirían el país en una guerra civil al perseguir y desaparecer a miles de compatriotas revolucionarios y chavistas. Volverían los asesinatos, la represión y las desapariciones físicas. Eliminarían el derecho a la educación y la salud y convertirían sus espacios en prisiones. No cabrían tantos prisioneros en los estadios de futbol y beisbol. Le diríamos adiós a cada una de las misiones. Bolívar volvería a su pedestal de mármol y bronce y sus ofrendas florales. Ribas, Sucre y Simón Rodríguez serían unos proscriptos. Zamora volvería a la oscuridad y al más ominoso de los olvidos. Se privatizaría la salud. Adiós a los CDI, CRI, consultorios de barrio Adentro y los médicos cubanos. Los pobres no tendrían salud. Volvería la corrupción en el Seguro Social. A nuestros ancianos les devaluarían sus pensiones. Se privatizarían todas las universidades y la Universidad Bolivariana la desaparecerían de la faz de nuestro territorio. No habría viviendas decentes para los pobre y excluidos. El desarrollo endógeno y las comunas socialistas se esfumarían. PDVSA volvería a las manos de los súper gerentes meritocráticos que utilizarían sus recursos para una elite y no para el pueblo, y por supuesto se le garantizaría al imperio petróleo barato o casi regalado para que se desquiten todas las arrecheras que les ha hecho sentir Chávez. No habrá más metros. Se eliminaría los ferrocarrilesl para que las transnacionales de vehículos de transporte (camiones de la GM, Ford, etc.) puedan venderlos por cantidades industriales. El alto costo de la vida y la inseguridad alimentaria volverían con la eliminación de los mercalitos, mercales y Pdvales. Volvería la usura, el acaparamiento y la especulación de los alimentos. Retrasarían o eliminarían las obras de infraestructura para cogerse los reales y así recuperar el tiempo perdido. Chao segundo puente sobre el lago de Maracaibo y el tercer puente sobre el Orinoco. Privatizarían de nuevo la CANTV, SIDOR y todas aquellas empresas básicas que deseen los gringos. Las escuelas y liceos dejarían de ser bolivarianas y volverían a ser gallineros. Adiós a los Simoncitos. Se acabarían todas las becas, en especial las becas Gran Mariscal de Ayacucho y sólo se las darían a los hijos de la clase más pudiente. Los pendejos que se conforme con la bequita alimentaria. Eliminarían las Casa de alimentación. Los chamos y chamas serían más pitiyanquis que nunca en manos de los medios privados que harían los que les de la gana, y los cipayos y lacayos se apretujarían como sardinas en lata viendo de nuevo A Radio Caracas Televisión, canal 2. Devolverían las tierras a los terratenientes, los ganaderos se apropiarían de las vacas y el contrabando de ganado haría su agosto. La extracción de alimentos se multiplicaría por mil. Volvería RECADI y se esfumarían las reservas. Correa y Evo estarían sólo.
CUATRO: Eliminarían PETROCARIBE, EL ALBA, PETROSUR,BANCO DEL SUR. Venezuela perdería su soberanía y dejaría de ser un país libre para convertirse en una nación esclava de los EEUU. Tendríamos a Uribe y sus narcos y paras dentro de nuestro territorio. Cuba se volvería a quedar sola luchando contra el imperio. Se acabaría la solidaridad latinoamericana y los gobiernos implementarían sólo una política comercial basada en el negocio y la ganancia. Aumentaría la pobreza y la miseria en latinoamericana. La godarria en el poder diría: “Si te veo solidaridad no me acuerdo”. No dudemos ni por un segundo, los pobres perderán el rostro y dejaran de ser gente, volverán a ser los eternos olvidados y convidados de piedra. La derecha se daría un banquete con el poder y los políticos corruptos estarían de fiesta. Este escrito sólo es una hipótesis una especulación. Ojo avisor, ojo en vigilia. Por la patria de Simón Bolívar, por el país de nuestro libertadores, por nuestros padres, por nuestros hijos, por Cristo, por todos los revolucionarios del mundo, por nuestro sueño de tener un país mejor, por los pobres de esta tierra. Con la enmienda, ¡Uh! ¡Ah! Chávez no se va. Los enemigos de la revolución bolivariana y socialistas. Esos son los que NO VOLVERAN.
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