Me dirijo a usted, como miembro y vocero del jurado que este año otorgó el Premio Nacional de Periodismo, para manifestarle mi inconformidad y mi rechazo por decirlo eufemísticamente, por la manera como fueron manejados algunos criterios para otorgarlo. Lo hago como venezolana, como periodista, como usuaria de los medios alternativos y como zuliana, por cuanto a este estado se le dieron varios premios, de manera que cuando menos, he leído o escuchado a una gran parte de ellos.
Cuando este viernes leí la noticia de los premiados, sentí una mezcla de asombro y de indignación, por no haber visto ningún nombre perteneciente al mundo de los medios alternativos… y haber visto otros.
Hace más de un mes había puesto a circular en la red, en medios oficiales y no oficiales, apoyada por otros ciberactivistas, una carta donde pedía un reconocimiento para Aporrea, por considerar que hace una labor comunicacional en el país y en exterior, por demás necesaria, reivindicando el concepto original de comunicación como un acto de compartir y del oficio de informar, como un servicio público. Este Portal ha logrado darle a la noticia, nuevamente, credibilidad en un porcentaje importante de la población, que vimos con impotencia, como gran parte de los medios tradicionales se convirtieron en actores de la oposición y vendieron el suceso al mejor postor.
Parte de esa carta decía que debía dársele “el Premio nacional de Periodismo, en la mención de Medios Digitales. Si no existe, pues debe crearse como un homenaje a este esfuerzo de periodismo alternativo y popular” y agregaba unas reflexiones escritas por uno de los directores de ese medio, Gonzalo Gómez, a propósito de sus dos años de vida "Llegamos por segunda vez al 14 de mayo, en esta oportunidad la fecha coincide con la cifra de 14 millones de visitas contabilizadas y millares de lecturas todos los días, a escala nacional e internacional” Ya quisieran tener estas estadísticas muchos medios tradicionales.
Pero si la información me causó asombro, la respuesta que usted dio ante una pregunta sobre la inexistencia de tal reconocimiento, me dejó en el sitio, según reseña Elypol en Aporrea (Protesta ante el Premio Nacional de Periodismo de los Medios alternativos y comunitarios) De acuerdo a esa nota, usted contestó, que no existían criterios para esa premiación y me supongo, que además por no estar en el reglamento. Obviamente el jurado comparte esta opinión, por cuanto nadie dijo lo contrario. Si eso no fue así, me gustaría que lo aclarara, aunque por los resultados…
Pregunto entonces, cómo fue que en el 2002 le entregaron el premio a Radio Perola? Con qué reglamento y con qué criterio?
Disiento de los que afirman que esto medios no deberían aspirar a estos premios, disiento porque es injusto, porque es desconocerlos, quitarles visibilidad, intentar ignórarlos y reforzar la imagen de medios marginales.
La labor que cumplen estos medios, en especial Aporrea, no es marginal al espectro comunicacional venezolano, es esencial, sino que lo digan el número de visitas que recibe la página, pero sobre todo su conversión en referencia nacional e internacional de lo que ocurre en este país, de lo que ocurre en este proceso. Y usted lo sabe, porque seguramente ha visitado la página más de una vez.
Traigo a colación un brillante artículo escrito por su amigo Hernández Montoya, en el 2002, denominado "Nuevos medios contra viejos golpes", título que es todo un reconocimiento al quehacer de estos medios alternativos. Allí, el autor escribe que “Asimismo ocurrió con la recuperación del poder por parte de Chávez. También mediática, pues se selló con el regreso al aire del canal estatal en manos leales a Chávez. Pero fue mucho más, porque ahí sí hubo desplazamientos no mediáticos; eso sí: mediante la participación de medios no tradicionales que los golpistas siguen sin entender”
(subrayado nuestro)
Esto es un hecho constatable; los medios alternativos han permitido romper el silencio mediático de abril de 2002 y fechas sucesivas. Gracias a ellos, hoy en día, gran parte de mundo se entera de esta otra realidad venezolana que los medios tradicionales se empeñan en callar y ocultar, como un mecanismo de guerra para ocultar e ignorar un quehacer que no se aviene con sus intereses.
¿Cómo entonces afirmar que no existían criterios para su evaluación y posterior premiación, de qué criterios hablan? Entiendo que son maneras distintas de hacer la comunicación, pero en términos de resultados, soy de las que creo que muchos de estos medios, que hacen más periodismo que los llamados tradicionales, que aquí la noticia se revaloriza, que se intenta ser veraz, que se entiende este quehacer como un servicio público y no solo una mercancía y lo más paradójico, muchos sin ser periodistas. ¿Será esa la razón de tanta sinrazón?
Entonces, ¿por qué los discriminan de esa manera?, ¿por qué les quieren quitar visibilidad?, ¿qué concepción los anima?, ¿que los llevó a tomar esa decisión, al parecer por unanimidad? ¿Cómo, si son buenos para que le den cobertura a una rueda de prensa, no son buenos para ser considerados como integrantes de esa comunidad y por lo tanto sujeto de reconocimiento?
Que quede claro, no afirmo que por ser un medio alternativo, no deban cumplir un mínimo de calidad, ni mucho menor que por estar con este proceso, deban ser premiados per se. En este universo, como en el otro, hay gente talentosa y trabajadora y otros que no lo son. Quienes llenamos, buena parte de nuestra necesidad de información y comunicación con estos medios, conocemos lo variopinto de las diversas propuestas.
Esa respuesta suya, unido a la inexistencia de algún reconocimiento a esta comunidad, contradice, en buena parte, discursos y políticas distintas que sobre los medios alternativos, personeros del gobierno han manifestado: desde el Presidente de la República, pasando por el Ministro de información, Jesse Chacón. Sino, cómo explicar el apoyo que desde CONATEL y otras instancias gubernamentales se les da?
Finalmente, quiero preguntarle ¿qué es para ustedes el Periodismo Digital? Porque si premiaron a Leo Magno, por una elemental página Web, aduciendo “su contribución al desarrollo del periodismo digital” cómo explicar que ignoraran, tan olímpicamente, el esfuerzo del Portal Aporrea y otros similares? Si eso no es Periodismo Digital, cómo llamar lo que ellos hacen? Qué nombre darle a ese esfuerzo interactivo, dialógico, de actualización permanente y de esfuerzo sostenido, que ha permitido incrementar el lector de medios digitales, dándole vigor al periodismo en esta nueva plataforma?
Ojalá y en las venideras ediciones, estos “detalles” puedan ser subsanados, por el bien del periodismo venezolano y por el propio prestigio del Premio Nacional de Periodismo.
Atentamente
Morelis Gonzalo Vega
CNP: 6658
Maracaibo- Edo. Zulia
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