Estamos en el mundo al revés. Los sociólogos, según, están dotados con las herramientas analíticas y metodológicas para asumir la sociedad, profundizar en el estudio de los cambios que en ella ocurran para, en prospectiva, señalar el rumbo que la misma podría tomar, siempre en pro de un constructo transformador. Hablar de la cultura implica apelar a amplias visiones que permitan la incorporación del todo y no de algunos sectores o partes.
En la perspectiva eurocéntrica, el origen de la civilización y la cultura está en un punto geográfico, de allí irradiaron a otras latitudes. Para sus ideólogos, en esta materia no hay discusión. La visión holística, abarcadora y totalizante, asume la cultura como el compendio de aportes de todos los pueblos del mundo: una multiplicidad de culturas ha dejado su impronta hasta llegar a este milenio.
Vieja discusión. Prismas contrastantes y sin acuerdos. Siempre se habló de una cultura de elites que se sobrepuso a la cultura popular. En un fallido intento, trató de absorberla para exponerla en una vitrina. Hay densos estudios en nuestro continente que hablan de los procesos de transculturación impuestos en nuestras sociedades y de la aculturación que propiciaron. Entre ellos, la obra de García Canclini y de Luis Britto García. Las respuestas emergentes de la contracultura también han marcado estos procesos.
¿Década perdida? Cultos pensadores, intelectuales asumidos como tales, respirando por las heridas, acaban de señalar que en estos años del Gobierno Bolivariano se ha arrasado con las instituciones culturales de la democracia. "Esta revolución no cuenta con un movimiento de transgresión estética". Estos cultos pensadores, hablan de una especie de plaga a la que hay que arrasar con un insecticida que impida que muten.
Su prisma, elitesco, grupal, les impide ver los logros de la revolución bolivariana. En sus añorados espacios el pueblo no entraba, no figuraba, no tenía presencia. Hoy, compuertas abiertas, vemos un crisol de voces, de luces, rostros amalgamados, en el arte, en la creación, en la música. No hay miradas altivas. Hay alegría, sonrisas, logros compartidos ¿"Insecticida" contra el chavismo? Como el alacrán, cuídense de su propio aguijón.
Periodista / Prof. universitaria