Caracas, 28 Ago. ABN.- Con la instalación de nuevas bases militares en territorio colombiano, Estados Unidos busca generar un clima de desconfianza entre los presidentes de Suramérica que promueven la unidad y la integración, para así enfrentarlos públicamente.
Así lo expresó el presidente de la República de Bolivia, Evo Morales, durante la reunión extraordinaria del Consejo de Jefes y Jefas de Estado y de Gobierno de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), para debatir la instalación de bases militares estadounidenses en Colombia, desde la ciudad de Bariloche en Argentina.
“No queremos ser instrumentos de la división de Suramérica ni crear desconfianza entre nuestros pueblos. Debemos anteponer el gran interés de los presidentes y el apoyo de los pueblos para trabajar por la unidad de nuestra región”, aseveró.
En ese sentido, recordó que el imperio estadounidense nunca ha querido la unidad de Suramérica y nunca la querrá.
“Debemos recordar que históricamente han sido permanentes las intervenciones políticas y militares de Estados Unidos en nuestra región, especialmente cuando hay gobiernos que luchan por su soberanía, y se han visto reflejadas por invasiones y golpes de Estado”, indicó.
Denunció que siempre aplican doctrinas anticomunistas para perseguir a dirigentes sindicales y campesinos que luchan por su liberación y su reivindicación; doctrinas antisubversivas contra movimientos sociales que plantean profundos cambios sociales profundos; y doctrinas antidrogas dirigidas a inculpar a todos los que no se someten a sus directrices.
Morales enfatizó que la historia que vivió América del Sur durante la época colonial se repite, porque en el fondo se trata de las acciones de un imperio contra el pueblo suramericano por el control de sus recursos naturales
“Estados Unidos utiliza la lucha antidroga para invadir nuestro territorio, pero cuando soberanamente decidimos comprar equipos y tecnología antidroga en otro país, simplemente Washington se opone para luego decir que no queremos cooperar, por el hecho de no someternos a su política imperialista”, argumentó Morales.
En ese sentido, añadió que EEUU no tiene derecho a cooperar en la lucha antinarcótica en ningún país de América Latina, porque el origen de toda la droga nace en Norteamérica.
“La cooperación debe existir entre nosotros mismos, entre países responsables donde se disminuya la presencia de este flagelo, sin la presencia militar de EEUU en nuestro territorio”, subrayó.
Finalmente resaltó que si, en términos de cooperación, América Latina decidiera enviar tropas militares a territorio norteamericano para controlar la circulación y producción de drogas, sencillamente el Gobierno estadounidenses no lo permitiría.
