11 Marzo 2010 - Nueve estudiantes fueron amenazados con ser expulsados de la Universidad Central de Venezuela, UCV, luego de que el Consejo Universitario de esa casa de estudios les abrió expedientes disciplinarios por manifestar el pasado 12 de noviembre su posición en contra de la instalación de portones que controlan el acceso a esa casa de estudios.
Uno de los amenazados, Yesiel Reyes, se declaró en huelga de hambre por considerar que la apertura de expedientes es un acto de persecución política, que viola todos los derechos civiles y constitucionales.
Dijo que el Consejo Universitario pretende constituirse en juez y parte al instruir, investigar y sentenciar a estudiantes bolivarianos por manifestar.
Agregó que cesará su ayuno cuando las autoridades universitarias dejen de perseguir a los estudiantes revolucionarios. Además pidió que se garantice el derecho a la defensa a todos los universitarios amenazados.
Los estudiantes señalaron que se les acusa de dañar el patrimonio de la universidad. No obstante, aclararon que el día de la protesta sólo se dedicaron a desmontar andamios y retirar materiales con los cuales se pensaba construir los portones. “El material y el andamiaje fue devuelto completamente sanos”, aclararon.
Andrea Pacheco, de la Escuela de Estudios Políticos y otra de las amenazadas, explicó que los portones que pretenden edificar las autoridades no forman parte de la estructura original del campus. “Estamos en desacuerdo con las puertas, porque no creemos que garantice la seguridad, además, lo vemos como la continuación de una política de exclusión y privatización”, resaltó.
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