16 de octubre de 2010.-Evidencia que indica que el colapso del World Trade Center fue una demolición controlada, ha sido impulsada de nuevo bajo la atención nacional luego del anuncio de la Universidad de Copenhagen de que polvo obtenido de los escombros de las torres gemelas contiene evidencia de material altamente explosivo.
El material energético que fue encontrado en el polvo del WTC por un equipo internacional de científicos dirigido por Niels Harrit de la Universidad de Copenhagen, en Dinamarca, consiste en “óxido de hierro de nano-ingeniería y partículas de aluminio” que “presentan las mismas características que los materiales energéticos avanzados desarrollados en laboratorios nacionales de EEUU en los años que precedieron al 11/9”.
“No hay razón para que los chips rojos estén en este polvo”, señala un artículo de Arquitectos e Ingenieros por la Verdad del 11/9 referente a las muestras, y no pudo haber sido formado naturalmente por el impacto de los aviones ni por el colapso de las torres, a no ser que un alto explosivo pirotécnico haya sido utilizado para implosionar los edificios.
“Esto sigue el descubrimiento, por el Servicio Geológico de EEUU y otros, de altas concentraciones de microesferas inusuales ricas en hierro previamente fundidas en el polvo del WTC. Estas microesferas solo pueden haber sido formadas durante la destrucción del WTC a temperaturas mucho más altas que se puedan explicar por la gasolina del avión y los incendios de las oficinas. Esos incendios, nos dicen los ingenieros empleados por el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST), fueron la supuesta causa de la destrucción del WTC. El descubrimiento de este avanzado material energético, en la forma de chips rojos/grises distribuidos en todo el polvo, explican las microesferas ricas en hierro y confirma la insuficiencia de la versión oficial de lo que pasó ese trágico día”.
La implosión de las torres como también la del edificio 7 del WTC, también ha recibido nueva atención como resultado de la forzada publicación del NIST de cientos de horas de filmación de su investigación del colapso de los edificios.
Todas las piezas de filmación que hemos estudiado hasta ahora desde que el Centro de Estudios Internacionales del 11/9 fue forzado a presentar una demanda en contra del NIST para obtener el material, contienen testimonios de demolición controlada por parte de testigos, desde bomberos quienes se encontraban en el lobby del WTC, hasta reporteros de noticias y personas filmando la Zona Cero desde edificios altos cercanos.