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Archivo, ABN. |
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Estas fueron las palabras del director de alto rendimiento del Instituto Nacional de Deportes (IND), Víctor Vargas, para quien los resultados obtenidos durante la VIII edición de los Juegos Deportivos Suramericanos (Odesur) aumentarán la inspiración de los atletas criollos en futuras competencias del ciclo olímpico.
«Se logró el segundo puesto con 98 premios de oro y queda mucho por aplaudir», aseguró. Venezuela no sólo superó la proyección de medallas pesadas (76), sino que además mejoró su producción histórica de metales áureos, pues la mejor fue en los Odesur de Brasil 2002, cuando se acreditó 95 primeros lugares.
«Nosotros apuntamos a las Olimpiadas de Londres 2012 y a las de 2016. Para eso hemos tratado de fortalecer el trabajo de detección de nuevos talentos, porque aspiramos que luego de este ciclo olímpico podamos explotar con más fuerza», apuntó Vargas.
Nunca bajaron la guardia. La pelea se extendió durante 10 intensos días de competencia en las ciudades argentinas de Buenos Aires y Mar del Plata, donde los criollos se plantaron una fuerte lucha con las delegaciones de Colombia y Brasil.
Finalmente, gracias a la actuación de los bolicheros Arturo Hernández y Karen Marcano, quienes se alzaron con el oro en las finales de maestros del último día del boliche, Venezuela se llevó el segundo lugar.
Argentina ganó sus séptimos Odesur con 107 medallas de oro, Venezuela finalizó con 98, Brasil fue tercero con 97 y Colombia tuvo que conformarse con el cuarto lugar pese a finalizar con el mismo número de premios que Brasil; sin embargo, los canariños dominaron por diferencia en medallas de plata ;105 por 72 de los neogranadinos.
Hubo un poco de cada cosa para los atletas criollos: Buenos resultados al inicio de competencia, disputas técnicas por resultados, un sueño de tres días al frente del medallero y el sufrido cuarto puesto de los Juegos.
Sin embargo, las actuaciones de disciplinas como natación y atletismo, que llegaron con jóvenes promesas, dejó un dulce sabor de futuras victorias para el deporte venezolano.
«En algunos deportes no tenemos un relevo inmediato y habrá que esperar unos cuatro años para que asuman esa responsabilidad, aunque esta delegación tiene promedio de 21,5 años», explicó el directivo.
La selección de atletismo, que llegó para sumar sólo dos de oro, se llevó cinco y, además, impuso tres nuevas marcas para la competencia: dos en campo y una pista.
En la natación, donde se disputaron 40 medallas, sólo en una sola final no se implantó nueva marca, pues los nadadores suramericanos rompieron 39 récords de competencia y Venezuela aportó cinco de ellos e igual número de doradas.
Además, de las 21 selecciones vinotinto que acudieron a la tercera cita del ciclo olímpico, sólo tres de ellas no cumplieron con los pronósticos.
El primer caso fue el judo. Sin embargo, éste fue un deporte donde las decisiones arbitrales jugaron en contra de la representación venezolana, que hasta necesitó del auxilio de la directiva olímpica nacional para obtener la medalla de oro en el kata femenino.
Flor Velásquez y Yeraldit Fernández recibieron el metal dorado, luego que la delegación venezolana reclamó la indebida participación de un árbitro argentino en dicha prueba, donde las gauchas cargaron con el bronce.
Por su parte, el equipo nacional de bochas que aspiraba a cuatro títulos sólo obtuvo uno, mientras que los pesistas totalizaron nueve de las 12 deseadas desde el principio de los Odesur.
Fuera de los resultados, lo más significativo es que Venezuela pudo mejorar y colocarse por encima de Colombia, rival al cual tendrá que tomar en cuenta para futuras competencias, debido a que es notable el desarrollo deportivo de sus atletas.
La próxima cita para los atletas venezolanos será en julio de 2007, en Brasil, donde se escenificarán los Juegos Panamericanos.