A través de un comunicado de la Asamblea Nacional, la Diputada Presidente Cilia Flores, rechazó la vergonzosa resolución emitida por el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara del Senado estadounidense y una parcialidad del Parlamento Europeo sobre la soberana decisión de la República Bolivariana de Venezuela de no renovar la concesión a la televisora RCTV.
Dice el comunicado:
"La Asamblea Nacional se ve en la obligación de rechazar categóricamente ante el mundo, por una parte, el pronunciamiento formulado el pasado 24 de mayo del presente año por el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara del Senado de los Estados Unidos de Norteamérica, por tratarse de un pronunciamiento violatorio de los tratados internacionales, pues constituye una intromisión en los asuntos internos de nuestra República, por falsos e infundados en sus argumentos y por inmorales al pretender erguirse en defensores de los sagrados Derechos Humanos, cuando en realidad son los mas grandes depredadores de la humanidad. Unido al anterior el otro acto de intromisión ejecutado por un sector minoritario de la derecha del Parlamento Europeo, a propósito de la no renovación de la concesión a la televisora RCTV.
En la resolución Nº 211, el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara del Senado estadounidense dice estar profundamente preocupado “por la trasgresión de la libertad de pensamiento y de expresión que se comete en Venezuela como resultado de la negativa del Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, de renovar la concesión de la estación de televisión "Radio Caracas Televisión (RCTV)”. En realidad son numerosas las razones que el Estado venezolano tiene para llevar a cabo este acto administrativo, el cual por cierto se trata de un acto apegado plenamente a la legislación del país y no viola ninguno de los acuerdos internacionales suscritos por Venezuela. Es por ello que la Asamblea Nacional, expresa su repudio a las declaraciones de sendas facciones parlamentarias, por constituir una abierta intromisión en nuestros asuntos. Nuevamente nos toca recordar ante el mundo que hoy Venezuela es un país auténticamente libre y sus decisiones están ajustadas a las leyes nacionales e internacionales.
Estas declaraciones pretenden alentar a los grupos extremistas venezolanos quienes se empeñan en una campaña de desestabilización política con el propósito de provocar una crisis institucional y crear condiciones para desalojar, a través de mecanismos inconstitucionales al Presidente de la República Hugo Chávez Frías; tal y como lo hicieron durante el golpe de estado de abril de 2002 y el sabotaje petrolero de 2003, con el apoyo directo del gobierno de los Estados Unidos. Esta situación tan evidente no le causó preocupación en su momento al Comité antes mencionado y tampoco lo causa ahora.
Paradójicamente, cuando los supuestos defensores de los Derechos Humanos de la facción del Senado de los Estados Unidos emiten una declaración tan tergiversada, en una supuesta defensa del derecho a la libertad de pensamiento y de expresión, aprueban una vez más un presupuesto “de la Muerte” de 120 mil millones de dólares americanos para seguir sembrando sufrimiento en el pueblo de Irak y Afganistán, lo cual asumen de forma natural pero poniendo en evidencia la doble moral que los caracteriza y su conducta maniquea e hipócrita para engañar a la opinión pública. Venezuela, la cuna del pensamiento libertario latinoamericano, sí es respetuosa de los Derechos Humanos fundamentales. En Venezuela nunca hubo más libertad de expresión y de pensamiento que en la actualidad. Venezuela sí tiene moral para decirle al Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara del Senado norteamericano, ¡ya basta de intromisiones!, ¡de violaciones al derecho internacional! ¡de vulnerar la vida y llenar de sufrimiento a las mujeres y niños inocentes que mueren minuto tras minuto producto de la invasión del ejército de los Estados Unidos!
Con relación a la opinión expresada por un sector minoritario del Parlamento Europeo, valga decir que ésta no es más que el fruto obtenido por la derecha española agrupada en el Partido Popular, que desató en las últimas semanas, en alianza con el imperialismo norteamericano y los grupos opositores venezolanos, una tenaz campaña en contra del gobierno venezolano. La misma agrupación política, que pretende mostrarse como “paladín de la democracia” y que respaldó el Golpe de Estado contra el presidente Hugo Chávez el 11 de abril de 2002, liderizada por el entonces jefe del gobierno español José María Aznar. Llama la atención que una decisión de esta naturaleza que expresa preocupación por una supuesta violación de la Libertad de Expresión y otros Derechos Humanos en Venezuela, haya sido tomada en una sesión con una asistencia de 65 eurodiputados en un parlamento que está integrada por 785 parlamentarios. De esa escasa asistencia apenas 43 diputados se expresaron a favor y 22 en contra, lo que muestra su poca relevancia política y por el contrario vulnera la legitimidad y prestigio del Parlamento Europeo.
Esta decisión minoritaria de la derecha del Parlamento europeo, es una muestra más de su reiterada oposición al gobierno soberano de Venezuela, quienes aprovechan todo momento para seguir en su insistencia de desprestigiar y querer “deslegitimar al Gobierno Venezolano que ha sido respaldado de manera continua en las urnas” tal como lo expresaron eurodiputados de España e Italia en sus declaraciones al respecto. Sin embargo, los eurodiputados opositores, hacen silencio y han apoyado la guerra en Irak y la violación permanente a los Derechos Humanos de los miles de inmigrantes que van a Europa en busca de una posibilidad de sobrevivencia, provenientes de las otrora colonias arrolladas y empobrecidas por los gobiernos colonialistas europeos.
La Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela, fiel a los principios de respeto a la autodeterminación de los pueblos y a la soberanía nacional, reitera categóricamente el rechazo a las intromisiones que el Imperialismo norteamericano y sus aliados en todo el mundo, están promoviendo dentro del país, originando dentro de la población venezolana un clima de desinformación y ocultando a la comunidad internacional lo que realmente está sucediendo. E igualmente aprovechamos esta oportunidad para exhortar a ambos parlamentos, en cuanto al pronunciamiento en contra de la liberad del mas grande terrorista del mundo, mejor conocido como el “señor de la muerte”, Luís Posada Carriles".
