Caracas, 09 de julio de 2007.- El ministro del Poder Popular para la Energía y Petróleo, y presidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA), Rafael Ramírez, aseguró que la actividad petrolera en el Occidente del país es normal y señaló además que la producción promedio de la Nación alcanza 3 millones 200 mil barriles por día.
De esta forma, Ramírez desmintió la información publicada por el diario vespertino El Mundo, en la que se hace referencia a una presunta caída de la producción petrolera en Occidente de 200 mil barriles diarios de crudo, debido a supuestos conflictos desatados por la nacionalización de 46 taladros.
Sobre el particular el titular del Menpet dijo: “Esa es una información completamente falsa. Nosotros no tenemos ningún problema de producción en el Occidente ni en el Oriente del país”.
En este sentido, especificó que “la producción puntual es de 3 millones 70 mil barriles diarios, de los cuales un millón 439 mil corresponden a Oriente; 79 mil a la región Centro-Sur; un millón 134 mil a Occidente; y 418 mil a la Faja Petrolífera del Orinoco”.
Ramírez también recordó que Venezuela cumple con el recorte de producción fijado por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), estipulado en 195 mil barriles por día.
Justicia laboral
Al ser consultado sobre el estatus de los trabajadores que operan los taladros nacionalizados, el ministro Ramírez reiteró que se está llevando a cabo un proceso para incorporar a la nómina de PDVSA a los trabajadores que operan los taladros. “Vamos a absorber a más de mil 300 trabajadores, quienes van a pasar de la figura de contratados permanentes a la figura de fijos de PDVSA, con todos los derechos, obligaciones y el amparo de nuestra industria petrolera”.
El Presidente de PDVSA destacó que los operadores de los taladros “siempre fueron contratados, y siempre estuvieron sujetos a los caprichos de las contratistas, en manos de los sindicaleros que negociaban sus beneficios laborales”.
Aclaró que los rumores sobre un supuesto conflicto “obedecen a los intereses de algunos dirigentes sindicales, quienes han estado tratando de causar divisiones en el seno de los trabajadores para impedir que los taladros pasen a control del Estado”.
Ramírez explicó que la política entreguista de la apertura petrolera de la vieja PDVSA dejó en manos de outsorcing y de terceros la operación de 46 taladros propios de PDVSA, equipos que forman parte de una de las actividades medulares de la Corporación. Estas unidades de perforación, que son propiedad de la empresa estatal, fueron cedidos en concesión a compañías privadas como parte de una estrategia que perseguía la privatización de la industria petrolera.
En este sentido, y dada la importancia de esta maquinaria para la economía de la industria nacional, el Ministro enfatizó que: “estamos decididos, con la creación de nuestras filiales, a asumir directamente esta actividad. Nosotros no nos vamos a dejar chantajear ni vamos a permitir una situación, que a todas luces, es irregular en el manejo de nuestra industria petrolera”.
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