Ayer en horas de la tarde, un grupo de esposas de los dirigentes sindicales que permanecen en el piso 5 del ministerio del Trabajo, exigiendo sea recibido el proyecto de contratación colectiva de los trabajadores del sector público, se anotaron un gran triunfo al lograr penetrar el cerco de aislamiento y hambre al que el ministro José Ramón Rivero los tiene sometidos, tratando de quebrar su lucha.
Como ya se sabe, unos 17 dirigentes sindicales encabezados por Marcos García, coordinador nacional de Fentrasep, permanecen en las oficinas del ministerio del Trabajo, esperando sea recibido el proyecto de contratación colectiva. Mientras tanto, ha dichos dirigentes se les ha sometido a una gran presión cortándoles el agua, el acceso a los baños, y a recibir comida por parte de sus familiares y camaradas. Sin embargo, ayer, en una acción heroica que ha moralizado tremendamente a los dirigentes que pernoctan en el Ministerio, sus esposas, junto a sus hijos y otros familiares presionaron hasta lograr entrar a las oficinas donde se encuentran, para hacerles llegar comida y agua, muy a pesar de las órdenes del Ministro. Nuevamente son las mujeres vanguardia de una lucha, con su arrojo, coraje y decisión de defender los derechos de sus compañeros. Esto hay que anotarlo como una verdadera victoria popular, aún parcial, que sólo se podrá refrendar definitivamente con el recibimiento por parte del Ministerio del proyecto de contrato colectivo de los trabajadores del sector público.
