El lunes 16 de junio se conmemora un nuevo año de la captura y luego la muerte de Fabricio Ojeda, 72 horas después de ser detenido, este caso es parte de los expedientes que están en revisión de la justicia a solicitud de la Fiscalía General de la República por intermediación de la Comisión por la Justicia y la Verdad y la Ley para sancionar las violaciones a los DDHH por razones políticas entre 1958-1998.
Ciertamente el caso de Fabricio es uno de los más polémicos que la historia contemporánea haya conocido, no sólo porque representaba una figura destacada en la insurrección popular del 23 de enero de 1958, sino porque siendo un joven líder revolucionario destacado, tanto en lo público como en lo clandestino, fue vilmente sometido y su muerte anunciada como suicidio, cuando todo indicaba que se trató de una artera operación para eliminarlo, dentro de la sede del SIFA en el Palacio Blanco.
La semana del 16 al 22 de junio se realizarán en Caracas diversos actos en honor a los mártires, en el 23 de enero con una jornada de conversatorios, audiovisuales, programas radiales, en la Biblioteca Nacional con una exposición, actos como los que tradicionalmente realizan en el Boconó en Trujillo, o en la Cantaura de Anzoátegui para recordar los sacrificios de miles de venezolanos que como Fabricio Ojeda decidieron transitar la ruta más dura para la liberación de la patria.
Así como Jorge Rodríguez padre y como otros miles, Fabricio era un líder en plena juventud, que fue sometido por el terrorismos de estado a la desdicha de la muerte, con la fortuna de haber dejado sus ideas escritas para que hoy se hicieran realidad en los rostros de millones de jóvenes con acceso a la educación universitaria y la oportunidad de ser soberanos y dignos, millones que hoy tiene acceso a la salud y a la vivienda en un tejido social maduro, fuerte y resistiendo los embates de la especulación y los lastres de los monopolios y oligopolios nacionales y transnacionales. Recojo las palabras de Anayanse Jimenez en 1966 cuando dijo:” Venezuela tendrá muchos Fabricios…”
