Analicemos el caso de las papas, tomates, pimentones, tomates y todo tipo de hortalizas y verduras, todos estos rubros los ofertan entre 12 a 30 BsF., pero a los campesinos les pagan una miseria.
Los granos, carne de rex o cerdo y embutidos es otro desaguisado con los precios y no hablemos de los enlatados.
Analicemos otro caso: por ejemplo, el caso de los detergentes para la limpieza de los hogares, jabones de aseo personal, pasta de dientes, otros: Veamos como muestra un sólo artículo; porque hace un año una bolsa de detergente en polvo para lavar la ropa su coste era de BsF. 28 y al día de hoy ese mismo artículo con el mismo tamaño y peso, su coste es de BsF. 80. Porque el Sr@. Ministr@ permite eso y no toma las medidas pertinentes.
En Colombia país del que lo importan su coste es de BsF. 42.
Otro caso que es una
inmoralidad: permitir que un kg. de pescado su coste sea de 50 BsF.
el más barato, ya que el pargo y mero u otros llegan a BsF. 100 o más,
y no hablemos de los moluscos y mariscos, cuando al pescador le pagan
un precio de miseria y este es el que arriesga. Que cuesta más producir
un kg. de carne de vaca o un kg. de pescado, al pez no hay que alimentarlo,
ni vacunarlo, ni cuidarlo, a la vaca sí.
Es un absurdo decir públicamente como le escuchamos a los Ministr@s que, los comerciantes los están chantajeando, por eso tiene que permitir el alza los precios, ustedes no creen que esa sea razón más que suficiente para proceder a multa y cierre del establecimiento y en todo caso en última instancia proceder a su confiscación.
Que es lo que se tenía que hacer el Sr. Ministr@, y su Ministerio para solventar el problema de la usura; un análisis de precios exhaustivo a todos los artículos sujetos a importación, colocándoles PVP a cada uno.
Modus operandi: Cuál es el coste del producto en su país de origen; cuanto para trasladarlo a puerto o frontera venezolana; cuanto su transporte por carretera, barco o avión; cuanto a los depósitos del mayorista (si el producto viene de un país lejano); cual debe ser la ganancia del mayorista; coste de reparto a los puntos de venta; a cuanto deben vender los comerciantes minoristas estos productos, por supuesto considerando una ganancia solidaria para los mismos (no mayor de un 15%): Sumando todos estos factores, la resultante es un precio unitario por cada artículo a las manos de los consumidores, y por supuesto, colocarle PVP a todo rubro que se presente a la venta en las tiendas o pulperías. El paso siguiente es controlar y supervisar rigurosamente que los pulperos no alteren los precios y, al que lo hiciera, colocarle una multa por un monto sustancial y cierre por tiempo indefinido hasta que acaten el precio sugerido; el cierre por 24 horas no soluciona el problema, los pulperos al otro día vuelven a las andadas remarcando los precios. No les parece.
Iguales medidas de control para todos los productos nacionales. A los productores les pagan una miseria y, las pulperías nos venden a los consumidores el coste multiplicado geométricamente.
Todos estamos contestes en que el Estado no puede ser bodeguero de todos los venezolanos, (t’a claro no) con las excepciones de Mercal y Pedeval.
Y… Seguimos con la misma Patria consumista y burguesa, la economía, la salud y la educación siguen en manos de las mismas mafias de siempre… ¿Cual socialismo?
manueltaibo1936@gmail.com