Si algún gobierno en la historia de Venezuela ha ido a fondo contra la pobreza, ese es el Gobierno del presidente Hugo Chávez Frías, que viene impulsando un proceso de inclusión y transformación social.
En la Venezuela Bolivariana no hay ni condiciones ni razones para el robo, la delincuencia, y menos aún para la violencia y el asesinato.
En Venezuela se le paga (subsidia) a la gente para estudiar; el proceso, la lucha y la Constitución garantizan la dignidad, la inclusión y la justicia social, ejecutándose programas que impactan directamente a la satisfacción de las necesidades esenciales del ser humano, la familia y la sociedad.
La inversión social del Gobierno revolucionario del presidente Hugo Chávez sobrepasa -y bien largo- los cuatrocientos mil millones de dólares en programas de: salud, educación, alimentación, vivienda, trabajo, cultura, deportes, hábitat, etc.
Si revisamos todos los protocolos internacionales, doctrinas, teorías, etc. sobre la prevención del delito, llegaríamos a la conclusión de que el Gobierno Revolucionario del presidente Chávez ha cumplido con todos; y lo más importante: ha ido a fondo contra sus causas estructurales.
Este Gobierno revolucionario tiene toda la autoridad ética y moral para actuar implacablemente y sin contemplaciones contra los delincuentes, el crimen organizado y la violencia. La gente lo pide: ¡Más duro Nicolás!
Una Revolución que se respete debe ir a fondo y acabar definitivamente con las mafias en las cárceles; el crimen debe ser tratado con todo el peso de la ley, está en juego la sobrevivencia de la Revolución, es una lucha por la vida.
Denunciamos que la canalla, factores políticos y delictivos externos e internos, intentan desmoralizar y destruir a la Policía Nacional Bolivariana.
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