Mucho se lee y se oye hablar sobre la guerra económica, sabemos exactamente qué es y lo que significa, nos preguntamos, que alcances tiene y sobremanera quien o quienes la producen y porque, pues bien, trataremos en este artículo de desentrañar estas interrogantes y lo más importante, que hay detrás de toda la madeja que la impulsa.
No es una guerra de todos contra todos, por el contrario, es de unos pocos contra el pueblo, aunque en sus mentes no lo calculan afecta a todas las clases sociales, quizás no por igual, pero los afecta, esta es la primera digamos, premisa para entender todo lo que gira alrededor de la intencionalidad de llevarla a cabo.
Ahora bien, como toda guerra se supone que hay los amigos y los enemigos, quienes son unos y los otros, indudablemente que, y aquí tenemos que detenernos, para descifrar estos “enigmas” es necesario entender quien está en la cúspide de la pirámide que establece cuando, donde y la forma de hacer esta guerra.
Como segunda premisa, y es importante saberlo, el imperio a través de “su gente” acá, baja la línea para que ejecuten el plan, como sabemos toda guerra requiere de un plan, con etapas y ciclos y esta los tiene, lo implementaron para las elecciones de octubre de 2012, sin muchas repercusiones, lo retomaron con mucha fuerza para las elecciones de abril 2013 y en algo les funcionó, al no reconocer los resultados electorales se sumergieron lo que para ellos fue como algo decisivo y fulminante, ocasionando verdaderos niveles de desabastecimiento y desatando una feroz especulación, aún hasta la fecha, no han descansado no descansarán, ellos pretenden unir en octubre lo anterior con las elecciones de diciembre.
Pero esto es todo, lo que ha significado el plan urdido y puesto en práctica, indudablemente que no, la diferencia estriba en lo que siempre han obviado y de alguna manera subestimado, la fuerza de la revolución y de un pueblo que creemos que en su gran mayoría ha entendido lo que está pasando y no es fácil de engañar, independientemente que todo lo transcurrido hasta ahora ha tenido relativo éxito, efectivamente de alguna manera han horadado a ciertas capas de la población que se siente molesta de las incomodidades que se les produce no encontrar los productos que necesitan y que poco saben de sus orígenes por tanto culpan al gobierno que es lo mas fácil para una explicación sumamente sencilla. Estamos hablando del proceso conspirativo desde sus inicio, por supuesto y es lo que mas llama la atención puesto que consideramos que la respuesta ha sido algo tardía y equivocada la estrategia al solo quedarnos prácticamente en la sola denuncia de que hay una guerra económica, sin muchas explicaciones e ir al fondo de las causas.
Toda guerra además, incluida esta, tiene por objetivo alcanzar el poder y es en verdad lo que está detrás de todo este complot llamado ahora económico dadas las experiencias exitosas que han tenido en otros países. No obstante, es importante destacar ue en los últimos tiempos el gobierno y el pueblo organizado está aprendiendo el como salir al paso de la conspiración.
Ahora veamos la incidencia propiamente económica, de tal manera que apreciemos en exacta magnitud que es lo que está pasando y que buscan con el frente abierto del desabastecimiento y la especulación, por cierto es valedero el caso para afirmar que muchos que no están directamente relacionados con la conspiración se han aprovechado de ella, recurriendo al contrabando y el acaparamiento. En lo económico podemos decir que esta situación desdibuja la marcha económica introduciendo elementos no propios de la normalidad económica como tal, lo que significa que las variables de manera accidental se alteran sin motivo aparente. Aprovechar esta coyuntura para aumentar indiscriminadamente los precios es una locura teóricamente hablando, fuera de la lógica económica, lo que quiere decir que su duración tiene vencimiento anunciado, viene diciembre, entienden.
Pues bien, en esto ha consistido la guerra económica, amén de producir desconcierto y desesperanza en la población, el objetivo está al descubierto y la creación del órgano superior para combatirlo si es bien implementado y aplicado debe producir resultados entre el corto y mediano plazo.
