Por un momento pensé que el relajo en el negocio de los acumuladores de vehículos era solamente en la Duncan de la Circunvalación Dos, sector Los Robles de Maracaibo, pero según las denuncias que hace la gente en las redes sociales, el desorden de similar forma se produce en sus filiales de Barquisimeto y San Cristóbal; ahora bien, ante esta situación ¿no será posible colocar captahuellas en las distribuidoras de baterías?, tomando en cuenta que la activación del sistema biométrico tiende a mermar las colas de gente alrededor de los establecimientos comerciales
Las irregularidades en la compra de este repuesto, son tan aberrantes como las que se originan para adquirir alimentos y, por iniciativa del sector de expendedores, sabemos que jamás se acabará tal situación.
La Cámara de Fabricantes Venezolana de Productos de Automotores dijo a mediados de julio que el Cencoex les había entregado 12 millones dólares a Duncan y Titán, y en dos meses se reactivaría la distribución, pero eso solo quedó en palabras a juzgar por el abarrotamiento de clientes en los locales de venta del producto.
El Fondo para el Desarrollo Económico y Social del Estado Zulia (Fondesez), informó igualmente que en la entidad zuliana para adquirir baterías no deberían realizarse colas, debido a que se distribuyen 15 mil y son suficientes para abastecer a las personas… pero la realidad demuestra lo contrario… Y este Gobierno debe darse a respetar.
Representantes de las distribuidoras de baterías pudieran argumentar que ellos venden al pecio que establece la ley, algo que no se duda; pero el problema es la tronera que existe con ese negocio bajo cuerda en el que muchos inescrupulosos adquieren estos dispositivos, para fomentar el “bachaqueo” y robar al cliente cobrándoles cantidades exorbitantes.
De cualquier forma, hay una compraventa evidentemente irregular que han debido investigar desde hace tiempo las autoridades competentes, en la que se presume complicidad interna, grupos vendecupos que hacen colas desde los días anteriores y después les cobran a los clientes por el espacio.
Siempre he dicho que la guerra económica no es una nimiedad en Maracaibo; aquí si no todos, la mayoría de los comerciantes especulan, por ende, se amerita cuanto antes la intervención directa del coordinador nacional de la Sundde, Andrés Eloy Méndez, y la del general en jefe Vladimir Padrino López, en las distribuidoras de baterías.