Asumiendo la verdad incontrovertible, que se expone a nuestros sentidos acerca de la guerra económica, que se perpetra alevosamente y hasta con marcado desprecio, contra el pueblo venezolano, solo nos resta sugerirle al Gobierno del Presidente Nicolás Maduro, hacer un censo urgente para tener plenamente identificados y ubicados, los expendedores de toda clase de mercancía a lo ancho y largo de la geografía nacional, para definitivamente excluirlos de ese negocio y sustituirlos de inmediato. Porque como lo decimos al principio de este artículo, lo que se expone a la vista y los otros sentidos no necesita anteojos: todos los mercaderes están en guerra contra el pueblo incluidos los mercaderes informales, creo, que sin exclusión, todos los expendedores, están alineados contra el pueblo.

Podemos asegurar, que ésta, es la única oportunidad en que una muestra para realizar una encuesta retrata perfectamente la realidad y, si existe algún mercader consciente y honesto, que me perdone, pero es difícil creer, que hayan personas sensibles al dolor humano en ese sector del comercio. Es, que cuando analizamos el comportamiento de los precios encontramos que hasta el gobierno sucumbe ante la elevación de los mismos, no existe ningún precio que luego de subir experimente una baja, así, se demuestre, que fue producto de la especulación. Probablemente, baje el precio a un nivel inferior, pero este nivel siempre será superior al anterior, nunca regresará al que tenía originalmente, antes del inicio de la agresión económica.

Es por ello, que le sugerimos al Gobierno en un ejercicio de la soberanía que esta descrita en el artículo 5 de la CNRBV, y que nos atañe por ser venezolano por lo menos de seis generaciones, que les prohíba la explotación del negocio de expendedor, a todos los comerciantes que especulen o hayan especulado por lo menos una vez, aunque sea una sola vez y, que esta medida alcance hasta los expendedores informales, no se olvide de los servicios de restaurantes, hoteles y parecidos. Estos deben ser sustituidos por comerciantes decentes, idóneos para la explotación de esas actividades siempre reguladas y autorreguladas, so pena de sufrir castigos fuertes porque la salud mental y de todo tipo del pueblo debe ser preservada en todo momento. Esto no es un capricho, esta es una petición seria, porque la burla, el irrespeto y la sorna con que esta casta de abusadores trata al pueblo soberano y al gobierno que se ha dado en legitimidad y libre albedrio, debe ser castigado de la manera más ejemplar. Está bien claro a la vista, que estos individuos enemigos del pueblo, ya han desbordado la ley de precios justos y toda otra ley, que se les oponga, dentro del marco del estado de derecho. Mientras tanto, ellos, -los infractores- solo responden con las más abyectas muestras de traición. El que tiene el poder y no lo ejerza, es una aberrado y el pueblo venezolano tiene el poder ¿Acaso es un aberrado?.

En este grupo de expendedores, sujetos de castigo ejemplar, el Gobierno Revolucionario, debe incluir a los corruptos infiltrados en el mercadeo de las empresas tecnológicas del estado, los más conspicuos, por sus prácticas ofensivas contra el pueblo. Por ejemplo, Movilnet y sus concesionarios, cuyos propietarios de las concesiones, además de hablar mal del gobierno hacen mil y una trampas para escamotearle al pueblo el acceso a los equipos que el Gobierno ordena expender a precios justos, amén de humillar a las personas del humildes que asisten a los pomposos Centros Comerciales, donde están instaladas estas empresas concesionarias. Estas concesiones deben ser revocadas y aplicadas a las personas infractoras, que las detentan, la carga punitiva más alta y ejemplarizante.
Por otro lado consideramos un error incluir a la empresa privada en el mercadeo de los equipos del Plan “Mi casa bien equipada”, ello, solo servirá para destruir el sistema de venta solidaria y al precio justo del plan “Mi casa bien equipada”, definitivamente, no se puede poner a los caníbales a cuidar carne.

Considere señor presidente, que la situación llega a tal límite de preocupación y molestia del pueblo humilde, con el irrespeto de los parasitarios prevaricadores de la renta petrolera, mercachifles y pelucones alineados con el imperio, que los propios trabajadores de las Empresas Polar, le solicitan intervenir, para obligar a la directiva de esas empresas a cumplir con la producción de harina de maíz regulada y el aceite entre otros productos. De no hacerlo –afirman- que, el pueblo podrá levantarse, no contra el Gobierno, sino contra estos pelucones agresores de las clases populares y su revolución bolivariana. Estas empresas, sus propietarios y/o sus directivas, deben recibir un castigo ejemplar y, el pueblo debe ser resarcido de tanto trato innoble agresivo e irrespetuoso.

Es por ello que en esta oportunidad escribiremos nuestras acostumbradas consignas con signo de interrogación, por las dudas.
¿INDEPENDENCIA Y PATRIA SOCIALISTA Y SOBERANA?
¿CHÁVEZ VIVE?
¿LA PATRIA SIGUE?
¿VIVIREMOS Y VENCEREMOS?
Amanecerá y debemos ver, ello, es imperativamente necesario