En una inesperada maniobra, las fuerzas realistas de SALARIOS MINIMOS, propinaron una contundente derrota a las tropas patrioticas de SALARIOS JUSTOS, quienes quedaron diezmados en los mercados, al recibir el impacto de una latica de atun en aceite vegetal de 98gr., con precio impreso de PJ a Bs. 205.

La táctica de esconder y no hacer aparecer impreso los precios en los productos de primera necesidad y consumo masivo le habia produjo muchas victorias a SALARIO MINIMO, mientras PRECIOS JUSTOS sufria humillantes derrotas frente a la opinion pública. La idea de ir mermando las fuerzas de PRECIO JUSTO, para que éste se fuera debilitando y se reconociera el poder absoluto del mercado capitalista, surtió su efecto.

Hay que reconocer que el comando de PRECIO JUSTO, estaba "preñado de buenas intenciones", pues su objetivo central era en verdad, establecer reglas justas en la fijacion de precios, con las cuales SALARIO MINIMO pudiera estar satisfecho y suplir sus necesidades a fin de que aportara sus fuerzas de trabajo al sistema productivo nacional. Lo que no previó SALARIOS JUSTO, es que SALARIO MINIMO tuvieran tanto poder adquisitivo y se organizara aplicando las tácticas del BACHAQUEO envolvente y acabaran en un santiamen todas las mercancias que salian al mercado.

Ante tal situacion y para frenar el consumo desmedido e incontrolable, PRECIO JUSTO tuvo que utilizar las fuerzas militares para frenar el CONTRABANDO DE EXTRACCION y el OCULTAMIENTO DE MERCANCIAS como mecanismos para elevar injustamente los precios.

Las medidas antes mencionadas, tomadas por PRECIO JUSTO, fracasaron unas tras otras y el triunfo de SALARIO MINIMO era inminente por los apoyos de pertrechos recibidos desde el exterior, que aportaban dólares asequibles a SALARIO MINIMO. Es allí que PRECIO JUSTO cambia de estrategia y decide obligar a los empresarios a etiquetar los PRECIOS JUSTOS en los productos alimenticios y de primera necesidad, a lo cual se habian negado hacer durante los últimos cinco años, alegando la existencia de un proceso inflacionario debido a las carencias de divisas. Esta medida resultó contraproducente y produjo esta derrota que aquí enunciamos como: "Parte de guerra III". (Las otras dos estan en los anteriores articulos por mi escritos en esta página web.)

Todo lo anteriormente leído tiene alguna lógica si considermos tres premisas:

1.-Que la actual Guerra Económica sufrida por el pueblo venezolano, es comparable con la Guerra de Independencia, cuando las fuerzas patrioticas conformadas por los mantuanos de la época (PRECIO JUSTO), tuvieron que enfrentar a las fuerzas realistas identificadas con la corona española (SALARIO MINIMO) apoyadas por las huestes de "patas en el suelo" dirigidas por José Tomas Boves.

2.-Que una la Ley de Precios Justo es una aberracion conceptual, pues en un sistema Capitalista es imposible de establecer precios justos de las mercancias producidas.

3.-Que la única manera conocida hasta ahora, de hacer que las fuerzas laborales produzcan para beneficio de los dueños de los medios de produccion, es mediante el pago de salarios mínimos de sustentacion, que nunca les alcance para satisfacer sus necesidades básicas y les obligue a ir cada dia al puesto de trabajo.

De allí que éste "PARTE DE GUERRA", dirigido al Comandante en Jefe y Presidente de la República, es una forma de llamar la atencion sobre los descalabros que estamos sufriendo los que recibimos ingresos de SALARIOS MINIMOS y tenemos cada dia que enfrentar a los PRECIOS JUSTOS del capitalismo más aberrante que ha conocido la humanidad, como es el CAPITALISMO RENTISTA PETROLERO VENEZOLANO, el cual nunca ha producido ni ha generado riquezas, divisas o felicidad a nuestro pueblo.