Sin duda que bastante conocíamos al monstruo del sur, pero llegar a ser en carne propia víctima del atropello, mas cuando el carácter de venganza saca de la guarida y de toda razón a quien considera que las instancias del poder están completas y bajo su dominio total, ya que bastante ha mencionado de cabezas de altas instancias judiciales como ex secretarios en su despacho, en sus pasantías por Miraflores.
Y en sus círculos cerrados asegura que algunos ministros comieron directo de sus propias manos, para así sentirse además de rey de reyes, el gánster mayor intocable y todo poderoso, además sintiéndose celoso de alguien que todavía la gente menciona como quien fuese el “ZAR” de Bolívar.
Funcionarios de distintos rangos repiten como de costumbre, llevar los casos a Caracas, porque las instituciones aquí, están totalmente castradas.
Lo ocurrido con mi propiedad terreno de casi 1990 m y edificaciones en ella construidas tal como reza el documento de la propiedad, se ejecuto con total violación a la constitución y las leyes del país, ya que para comenzar fue destruido un portón de casi 3 metros de altura, fueron arrasados todos los arboles algunos con más de 50 años de antigüedad, y sobre todo casa de mi propiedad, desapareciendo las puertas de acero, y saqueando todo el contenido de la casa, y alrededor de una semana después, se hace una notificación por la prensa local, considerada por estas mal llamadas autoridades, el argumento usado para justificar sus acciones.
La sorpresa y es que independientemente que fuesen terrenos considerados lomito, en distintas partes de la ciudad, pero es que esas acciones resultan ser de costumbre y muy habitual en manos de estos funcionarios, y con el silencio total de las instancias de justicia, que al ver el súper poder en manos de la absoluta tiranía, se replegaron al poder, ya que decidieron al igual que el policía, al ver que los delincuentes tienen sus protectores en las instancias del poder, prefirieron convertirse en socios del sistema de opresión o simplemente dedicarse a recibir su salario en espera de algún milagro.
A medida que pasa el tiempo nos encontramos con muchas más sorpresas de esta índole, ni hablar de otras que hemos denunciado oportunamente que en este artículo no alcanzaría para volver a reflexionar, desde el tráfico de cabillas, oro, diamante, madera, aluminio, acero, y otros más delicados.
Año atrás, denunciábamos como eran castigados los ciudadanos que se les ocurriese violentar las normas establecidas por la delincuencia organizada, ametrallándoles sus viviendas y locales en el mejor de los casos, bastante trabajo tendría la defensoría y la fiscalía, muchos casos que atender si se deciden instalarse verdaderamente en Bolívar, pero lejos de las influencias locales.
No estoy inventando esta información, ya que los cuerpos de seguridad al recibir la orden de colaboración con una verdadera comisión nacional, tienen remesas de archivos que aportar, sobre los múltiples casos de violación a los derechos humanos y las persecuciones contra funcionarios que se atrevieran a violentar las normas del todo poderoso, son múltiples los casos de destitución de funcionarios de seguridad que fueron vilmente expulsados por estos motivos y por quienes salgo en defensa y reivindico su lealtad y compromiso con una patria de verdadera justicia, en especial los hombres y mujeres de nuestras fuerzas armadas, SEBIN, e inteligencia militar, y no olvido hasta los muchachos de la policía del estado, quienes son obligados a comprar sus municiones, si no son parte de las castas, mientras vemos a las mafias, armadas hasta los dientes.
Estas cosas no pueden llamarse sino un verdadero terrorismo de estado.
Una verdadera acción de justicia seria la intervención de la gobernación del Estado Bolívar.
Si con un diputado se atrevieron a violar las leyes, como seria con el resto de los ciudadanos.
