¡¡A veces nos sorprenden los escenarios de desempeño individual y/o gremial del ser humano!! ¡¡Nos aturden del ser pensante: - “Sapiens” - sus arbitrariedades!! Sus actos y aberraciones que al margen y en presencia de tiempos y espacios de tanto desarrollo científico y conocimientos que maneja del universo galáctico. De sí mismo y los demás; lamentablemente en algunas oportunidades: - ¡¡Le fanatizan y enajenan!!
Lo anterior lo reflexionamos al contextualizar el transcurrir episódico de lo evolutivo. El Hombre; como ser social en estadio superior, divorciado de la barbarie. El hombre; como visión de páter familiae - (La Familia) - El hombre como líder y posterior sujeto histórico que primeramente administra la propiedad comunal de la gens o la fratria; y luego estafa y expropia al colectivo en su deshumanizado afán de explotar y acumular capital originario - (La Propiedad )- Y; finalmente, -“El Estado”- como vertiente y original figura jurídica que irrumpe a fin de perpetuar privilegios; pretendiendo reprimir la histórica contienda de contrarios de clase [Marx, Engels, Morgan, Etc.]- y en algunos otros momentos de sorpresa; el toparnos con la observancia de lo que denominamos -»Trastocadas involuciones históricas del ser y de la vida - (Fallecimiento de Bolívar en relativa juventud ; y plena capacidad intelectual - Asesinatos de Zamora y Hugo Rafael en fulgurantes momentos de aportar irreversibles destinos políticos y económicos a la patria) - que en esencia lo constituyen yerros humanos; fracturas que desapropian y abortan devenires y destinos«- De todo esto; aciagamente preocupados. Las resultas que nos embrollan la reflexión, cuando observamos las marchas y contra marchas de - “La Libertad” - De ella, la libertad, en el difícil ejercicio de entender en el individuo social, el uso que de ella hace como suprema conquista de civilidad y/o atropello de incivilidad. ¡¡Nos confunden insistimos!! ¡¡Las arbitrariedades e inobservancias que de ella se hacen!! De la misma manera que nos complican el acceder a la paz. La tranquilidad. El sosiego. Su agresión y consuetudinario quebranto a las mismas: La libertad y la paz en sentido general: ¡¡Todo ello y apropósito de lo que fundamentalmente nos ocupa en las presentes notas; traducido como torcido atropello, y desempeño de imposición coercitivo fantasioso; del sector evangélico hacia considerable y mayoritaria masa de indiferentes y/o no creyentes.!! ¡¡Insulto estulto, de imponer dogmas y exacerbados fanatismos eclesiales del uno al otro!!
Cierto es que alguno grupos humanos - (En su individualidad y/o agremiación templaria con otros) observen mermadas sus capacidades anímicas al afrontar el cotidiano forcejeo que la lucha reclama en el habitual reto de vivir y hacer presente y futuro. Y en evasión angustioso o nivel de acmé; todos esos sujetos; en conflicto psíquico y/o somático consigo mismo; al pretender evadirse de la realidad existencial circundante, conscientemente se hagan elementos permeables de la irracional alienación dogmática. Claudiquen y constituyan en seres proclives por debilidad de carácter al fraude/chantaje espiritual. Lo anterior de las veces; por sumisión incondicional. Esclavitud de ánimos que les lleva a perder la cordura y confianza en sí mismos. Erosión de auto estima. Perdida de equilibrio emocional, y posterior desempeño de fanatismo, como conducta patológicamente terminal de su psiquis y relación social con los demás, que indefectiblemente le expondrán al aislamiento profiláctico con el resto de la sociedad.
Lo que señalamos con anterioridad le traemos a colación al cuestionar algunos escenarios conductuales de la secta evangélica y su satánico y desconsiderado desempeño para con los demás. ¡¡Que en lo cualitativo y cuantitativo innegablemente; somos más!! ¡¡Muchos; muchos más!!
El uno; constituido por engringolamiento fantasial, y supina incapacidad de racionalizar que es la independencia de albedrío. La incomprensión estulta y ausencia de necesidad imperativa de respetar el posicionamiento adverso; no creyente y/o agnóstico del otro. Y contiguo a esto último; su brutal y feroz incapacidad rayano en lo demencial; de no entender - [¡¿Quizás amparados por el estado democrático que en permisivo y celestinaje desempeño; permite el abuso?!] - Que atropellan el ejercicio de la libertad: ¡¿Confunden esta; con el vandalaje y abuso al otro que difiere?!! ¡¿Con él otro que según ellos cautivados por Satanachia; le encasquetan el excluyente y a la vez gracioso calificativo de mundano??!!
No dudamos que infinidad de personas como el que escribe estas notas; estemos: -¡¡Supremamente invadidos de tibieras!!- Por el acoso de esos fanatizados sujetos. Elementos que trastornan nuestra intimidad hogareña. Acólitos satelitales que quebrantan nuestro reposo doméstico. Invaden plazas y recintos públicos en verdaderas, orgías oráticas anclados en el túnel del tiempo. Orgásmicas tenidas de desenfreno fanático religioso. ¡¡Ciertamente!! nos atemorizan en sus disertos; con ojos desorbitados y acompañadas expresiones gestuales de erráticas y galimáticas interpretaciones bíblicas; mandándonos según su gobierno o reino celestial; al mismísimo infierno si no pensamos y actuamos como ellos. Compran costosos espacios en la televisión por cable y/o son propietarios de estaciones televisivas; y se cuelan subrepticiamente si se lo permitimos; en el hogar ¡¡Cada uno de ellos en sus denodados liderazgos y acomodado criterio oral y personal del pastor, en desempeño de interpretar –“¿Las Escrituras?”-; y ganar el fervor de la delirante feligresía!!
Independientemente de creer o no creer; porque legítimamente es asunto de respetable opción individual. La nuestra es la de tozudamente no sujetarnos a ningún tipo de alienación. Rechazamos lo constreñido. Lo esclavo de signo capitalista y/o esclavo de símbolo castrativo de sumisión congregacional religioso. Lo fanático. Lo dogmático carente de asidero y disciplina científica.
Por culto, falible, finito y no eterno; rechazamos la trampa caza incautos. El chantaje, temor y amenaza de la incertidumbre; como mecanismo de dominación que en nada se diferencia de lo atrasado, lo obscuro, lo obsceno; y lo medieval.
Como vinculante a todo lo anterior; denunciamos nuestra indefensión por parte del estado; ante el vandalismo terrorista que lo constituye la desconsiderada contaminación sónica apoyada en equipos de sonido de salidas estruendosas. Son intolerables los escándalos, ensordecedores rezos, cánticos y alabanzas; que perversos nos agreden en nuestras urbanizaciones por parte del sector creyente evangélico. En nuestros barrios. En nuestros domicilios. En nuestra comunidad en general. No podemos evadirnos y nos dictatorializan. No respetan el reposo y/o la posibilidad cierta de que existan pacientes de enfermedades que en proceso de recuperación; necesitan tranquilidad “¡¿Todo este vandalaje con la sospechosa ausencia de agresión sónica, aturdidora y evangelizadora; aplicada a los núcleos urbanísticos de las clases altas acomodadas?!” - ¡¿A qué se deberá preguntamos?! -
Toda una sumatoria de intolerables situaciones de maliciosas acciones asociales, que quebrantan la tranquilidad del paisano o ciudadano que en merecido reposo en las tardes, noches o fines de semana; son sobre saltados en su sosiego y su paz; por los fulanos evangélicos. - ¡¡De allí que denunciemos tal infamia, caos e irrespetos a nuestra libertad, albedrio; e intimidad!! -
¡¡Basta de abusos!! Reclamamos la autoridad de alguien; ¡¿Si es que existe alguien, a través de la Comisión De Cultos de la Asamblea Nacional que pueda acabar con tal peligroso libertinaje!! Es necesario e impostergable zanjar esta desagradable situación de molestia, irrespeto y agresión en el vecindario. Seria propicio se hiciese presente - ¡¿El Cambio?! - En estos instantes de expectativas políticas y económicas que según observamos están cambiando las vainas para que sigan peor. ¡¡No lo digo yo; lo dice la gente!!