La Guillotina al ruedo
No es un secreto que Henri Falcón ha sido un soberano corrupto, basta con recordar sus días de abogaducho y verlo haciendo una cola los días viernes para cobrar su mesada, también nos llega a la memoria su zapato derecho con un hueco en la suela. De aquel hablador compulsivo y engreído "pela bola" no queda nada pues hoy se nos presenta cual MAGNATE y hasta con exquisito paladar…me pregunto ¿te sacaste la latería? ¿Qué labor hiciste para que te de tanto real? Sin duda que lo que hizo fue robar al estado y de manera descarada, tanto que sus viajes al exterior son tan comunes como ir a Bobare todos los días y todos nos preguntamos ¿con que dinero paga esos viajes?
Seguro que alguno de sus adulantes dirá: "eso es envidia, ya no se metan tanto con Henri, trabajen duro para que tengan" me parece escuchar a esos jaladores de oficio defendiendo al manos de seda Gobernador. Y no es eso, querido amigo y amiga si usted me ve a mí de la noche a la mañana, viajando 3 y 4 días a las mejores playas de Brasil y luego me ve en Panamá y a cada rato me ve gastar dinero a manos llenas, comprando propiedades ¿Qué dirá usted? Ese Andrik ha trabajado mucho para darse sus lujos, o dirá ese está robando!!! Dirá que soy un ladrón y entonces cual es la diferencia con este cleptómano progresista, ninguno debemos decir en coro "éste es un vulgar ladrón", duélale a quien le duela.
A la revolución se le acercó todo bicho con uña, adeco o copeyano para robar, para arreglar su vida… cual cuento de patria!!! ese es el caso de Falcón, proveniente de la fila de COPEI, para su momento le cargaba las maletas al gobernador copeyano de Yaracuy de entonces, mas este llegó en las postrimerías de la cuarta república y no le dio chance de meter sus uñas en el botín y vio en el proceso socialista, que apenas se gestaba su posibilidad, de tener lo que siempre soñó y que la vida humilde que llevaba le negó.
Lleno de frustraciones, necesidad y con muchas ideas para apoderase de las arcas del estado sin ser pillado llego a ser Alcalde y allí comienza su carrera política delincuencial, traidora y viva la Pepa de Henri poniendo en marcha todas sus ideas maquiavélicas y corruptas, logrando ser lo que ya todos sabemos.
Esto es bueno recordarlo pues pareciera que a alguien se le ha olvidado, en estos días la mano de la justicia esta apretando fuerte, y hemos vistos caer supuestos de izquierdas de CVAL, Abasto Bicentenarios, estafadores de carros, de viviendas pero todos disfrazados con boina, pero estos que esta claramente identificados no solo como opositores, traidores y vende patria, también como corruptos como es el caso de Henri, que además posee un expediente putrefacto y en fiscalía, aun nada, caerán solo ladrones de izquierda o veremos caer algún ladrón de derecha, yo propongo 50-50, vacié estos opositores roban a plena luz del día, y nadie les pone los ganchos.
Pero el caso que nos atañe hoy sobre Henri es el viaje a República Dominica, específicamente a Punta Cana, con avión privado, llevándose a toda la familia, pasando todo carnaval en esos lares, por cierto también se llevo a alguien para que le cargara las maletas como fue el caso del Concejal Omar Jiménez, otro que arreglo su vida pero que no le daba para tanto y por fin salió mas allá de Cubiro y se lo llevo el Kojak de la política, se dice que no puede ver una caja fuerte o una bóveda, pues se lanza de pecho. Bien se fueron para Punta Cana, medio palo! Omarcito iba muy feliz, la condición era que advirtiera la llegada del avión y se dice que Omar ya pelao, cual Isla de la fantasía, decía a cada rato ¡¡¡ el avión jefe el avión!!! Gracias a esa célebre frase comió, bebió y disfrutó sin sacar medio del bolsillo, todo lo pago Sir Henri Falcón, quien se gasto unos cuantos dolarillos, que no dilapida cualquier pendejuan. Es que la plata es como la tos, cuando se tiene es difícil de ocultar, diría mi abuelo.
Hay quienes dicen que Falcón, ahora le dio por disfrutar de otros carnavales por lo malo que son los de Alfredo Ramos, incluso en conversa ya ebrios Henri y Omar, recordaron a la catirrucia Amalia Rosa. Claro, esto es lo risible del cuento, pues Basurita es tan malo con estas fiestas que se dice que en su vida organizó ni siquiera un cumpleaños; en Barquisimeto eso quedo en el pasado revolucionario.
Mientras en Lara los policías con uniformes rucios, ruñíos y mal pagados se ven con tristeza por las calles de Lara, los educadores son burlados y no cobran, viviendo en una constante protesta, mientras se mueren las parturientas en el hospital por falta de inversión estadal, por ausencia de ética y eficiencia, este Gobernador se va para Punta Cana a disfrutar de los carnavales, ya lo había hecho el año pasado en Brasil. ¿Con que dinero se hacen estos viajes de placer? ¿Cuánto cobra el Gobernador para darse esta vida? para él, su familia incluso llevándo hasta el arrocero del barrio ¿cómo se justifica esto? Se dicen que los Cohen dueños del SAMBIL, aun pagan favores a este megalómano.
Es que hemos visto a Henri en cualquier cantidad de irregularidades; mafia, trafico, desfalcos, cobro de comisiones, desvió de partidas, inversiones falsas, mala praxis en obras (caso avenida Uruguay), robo de proyectos como fue el caso del Manto de la Divina Pastoras (próximo articulo) incluso venta de terrenos entre gallos y media noche(triangulo del este) y ahora se gasta los dineros del estado; para pagar piloto y copiloto, los mejores hoteles del mundo, beber los mejores whisky, consentir sus paladares, un avión privado y de paso se lleva a todo aquel.
Punta Cana se convirtió en estos carnavales en la Isla de la Fantasía, donde un ladrón con toda su familia, disfrutaba de las mieles de los dineros extraído de las arcas del estado, dándose la mejor vida, sin que ningún nivel de justicia le perturbe y donde un concejal hizo la del fulano aquel que advertía!!!"El avión jefe el avión¡¡¡ ojala deje de ser una fantasía la impunidad en Venezuela para los sectores de la derecha, ojala no exista mas el titubeo para llevarse preso a estos delincuentes, ojala no vuelva a ver a este manilargo en otro evento como este ni tampoco escuchar a ningún adulante decir …el avión jefe el avión.