El título de esta nota, es la respuesta que ofrece la ex enfermera del presidente Chávez a un medio de comunicación, no sé si para justificar que el dinero que acumuló, fue por no tener tiempo en gastarlo, y no por corrupción como lo han divulgado los medios. La diferencia de tener tanto dinero, era porque le pagaban en dólares. ¡Qué casualidad! Me sucedió casi lo mismo que a ella; en esta navidad no me dio tiempo en gastar el dinero, el que me pagan en bolívares soberanos. Pero debo confesar que tuve tiempo suficiente para visitar la página del BDV, esperando ver reflejado mi salario que tardó bastante en llegar, por cierto el sábado en la noche, lo que significaba que tendría que gastarlo a través de la tarjeta de débito o esperar hasta el miércoles 26 para retirar algún efectivo en el banco.
De verdad que no me dio tiempo en gastarlo y para eso solo tenía un día, el 24 de diciembre. Comencé a recorrer la ciudad, desde temprano, buscando lo elemental para redondear una navidad chucuta. Pasé por las ventas de ingredientes para hallacas y todo caro, las alcaparras las vendían de mil en adelante y cuando vi la cantidad que alguien había comprado, le puse freno de mano a la tarjeta de débito; sin embargo, pregunté por el precio de las aceitunas, al escuchar su precio, me dije: Para que aceituna, si después se pierden en el plato y nadie se las come, ni el que está borracho; además, con los nietos tan necios que tengo mejor no comprarlas porque son un peligro para un ojo, si se las lanzan entre sí. Ante el precio de las pasitas, dije: Paso. Y me fui a otros negocios.
Pasé por una de esas bodegas que la polar tiene para vender la harina, si y solo si, se acepta el combo que complementan con una gelatina, un yogurt, etc., pero al preguntar el precio, hui del sitio. Seguía invicta mi tarjeta. Pasé luego, por una licorería y pregunté por el ´precio de la caja de cerveza y de algunos rones y me dije: "Con esa cantidad de dinero, en otros tiempos, habría brindado a todos los vikingos del pueblo en un acto de caridad"
Así, mientras recorría los negocios, el tiempo iba pasando. De tal manera, que los mismos comenzaron a cerrar. Y debo decir que no me dio tiempo en gastar el dinero, porque todo estaba carísimo. Mientras tanto, como la ex enfermera, esperaré otra oportunidad para seguir recorriendo otros negocios con la esperanza de comprar barato, si el tiempo lo permite. Pero estoy seguro de que mi dinero irá creciendo y hasta para España pudiera irme.
