En mi bello pueblo de Guaríco, Villanueva y todos sus caseríos, pertenecientes al Municipio Moran del Estado Lara, todas las transacciones comerciales se realizan con el rubro del café.
Este municipio está considerado como el mayor productor de café del país y sus montañas son un oasis de bellezas, que impresionan al visitante con sus plantaciones de este cultivo.
En vista de la escasez de dinero efectivo y del alza desmedida del precio de todos los productos que se consumen en la población, cada vez que sube el dolar today, la sabiduría innata que existe en nuestros pueblos encontró la solución a esta problemática, y creó su dolar "criollo" y lo llamó el "dolar café".
Por ejemplo la gasolina, que por su escasez, se consigue a precio de bachaqueo, el campesino intercambia un quintal de café (46 kilos) por un barril de 200 litros. En estos momentos el precio del café está oscilando alrededor de 20.000,oo Bs. Soberanos con tendencia a la alza (el quintal).
Las calles de la población se han convertido en un mercado persa donde los comerciantes informales, venidos de El Tocuyo, Barquisimeto y otros lugares, intercambian diversidad de productos por café, y todos los comerciantes establecidos hacen lo mismo.
Las reparaciones de motos, vehículos y compra de repuestos y carros, todo se paga con café. Ayer le pregunté a una señora que vendía cocuy de penca, que ¿cuanto valía el litro? y me respondió que, seis kilos de café y le pregunté que ¿cuanto en efectivo? y me respondió que ella no trabajaba con esa moneda, por qué se devalúa mucho.
Los campesinos, entran a los bares, se instalan con su maleta de café en la mesa hasta que se consumen este rubro en cerveza.
Me llamó la atención, un cuento real, que sucedió en el único burdel que ha existido en mi pueblo desde toda la vida, llamado "el Chupadero", y es que las chicas están cobrando por el acto amoroso que dura muy pocos minutos, entre tres y cinco kilos de café por dicho acto y resulta que, a un amigo conocido llegó con su maleta de café y se puso a bailar para calentar los motores y cuando se acercó a la mesa, le habían robado la maleta de café, imagínense como quedó la calentura del hombre.
Hay otras chicas que no trabajan en estos establecimientos, pero igual cobran con café, hay una de ellas que le dicen " la kilo y medio", porque es la tarifa que cobra. Una amiga mía que está muy buena moza y al oír este cuento me dijo a manera de broma, que ella lo daría por un quintal y esto me puso a pensar.
Lo paradójico de esta situación, es que la empresa PACCA-GUARÍCO que es la mayor receptora de café de la zona, está a muy pocos metros del burdel "El Chupadero", por lo que va a llegar el momento, que es más fácil conseguir café en este negocio que en la PACCA.
El Petro y el Lingotico de oro que tanto pregona el gobierno, tiene su contrincante en el Dolar Café, porque éste bien almacenado dura años y el campesino sabe que este rubro subirá de precio como la espuma en los próximo meses, aparte que por lo general, ellos siempre son desconfiados con los anuncios de los gobiernos de turno.
La revolución tecnológica y digital, llegó a nuestros campos, ya el campesino pendejo que casi regalaba sus cosechas ya no existe, después que sus nietos llevaron las Canaimitas que le regaló el gobierno, ellos saben cuanto valen sus productos en cualquier parte del país, y si los insumos para la producción de sus alimentos suben, ellos de inmediato suben el precio de sus productos. La tecnología digital les dio un mecanismo de defensa que jamás organización política alguna les había dado.
Las mafias de las federaciones campesinas que se lucraban con el dolor y la miseria del campo ya son cosas del pasado, y los vividores que se llevaban nuestras ganancias sin sembrar cada día son menos.
Muy atrás quedó la odisea de nuestro legendario Argimiro Gabaldón que subió a nuestras montañas, con un ejercito de muchachos soñadores y llenos de utopías para hacer una revolución desde el campo, que fracasó rotundamente, a pesar que el campesino lo apoyó en su mayoría, pero la fuerte represión del ejercito en su momento, dejó una estela de torturados, fusilados y desaparecidos que muchos todavía lloramos y deseamos que hechos como estos no se repitan, porque dejan muchos traumas.
¡Que viva la revolución digital, que llevó progreso y entretenimiento al campo!.
Ahora nosotros sabemos cuanto vale nuestro café en la Bolsa de New York, Tokio y en cualquier parte del mundo.
¡QUE VIVA EL DOLAR CAFÉ!, ¡ABAJO EL DOLAR TODAY!.
rafaelvasquezz@hotmail.com