Esto es gravemente inaudito: La ciudadanía del Área Metropolitana de Caracas, se pregunta día a día: ¿Qué carajo, qué diablos está pasando con el Metro de Caracas? Y más aún, que pasó a manos del estado, pareciera que el servicio va de mal en peor, creando mucho desánimo, desencanto y frustración, para dar a entender a la opinión pública, que este servicio, gracias a la revolución bolivariana, NO FUNCIONA, NO SIRVE.
Se trata de crear un plan conspirativo, donde la ineficiencia, la burocracia, la corrupción, la falta de formación y experiencia profesional (y aunado a esto, el cáncer de la 4° República, que hacen de las suyas, en este proceso de transformación revolucionaria); juegan un papel predominante, a los designios de esta oposición apátrida, fascista y pitiyanqui.
Vemos como servidoras y servidores públicos de este ente, hacen mucho, para dar una buena imágen, del sistema Metro. Lamentablemente, se ven atrapados por la estructura del viejo estado: No saben qué hacer, la dirigencia de la alta directiva de turno, los catalogan de "ineptos", y los atacan con la campaña sucia de desprestigio, para quitarlos donde están. Mientras que la mayoría de quienes dicen llamarse "trabajadoras y trabajadores a carta cabal", se quedan haciendo lo mismito, cuando el Metro de Caracas, era un servicio privado, es decir, cuando estaba a merced de la 4ta. República. Esos mismitos, declaran al Metro en "estado de emergencia", para transformarlo en jugosos contratos "chupasangres", en grandes negocios.
Esas grandes directivas y gerencias de turno, llevan el nombre del gobierno nacional, en situaciones irregulares con su equipo selecto (y adulante) de trabajo, acumulando deudas, despidiendo a leales y combatientes servidores y servidoras públicas... sólo para promocionar la gente, que a ellos mejor les conviene y le parezca.
Imáginense usted, querido lector y lectora, en un sólo día, el terrible viacrucis, que atraviesa usted, como habitante del Área Metropolitana de Caracas: usar un servicio de transporte público en mal estado, expuesto a la merced del hampa, expuesto a oir el vocabulario soez y bajo del conductor (y el exagerado toque de corneta), como de los usuarios y usuarias, que están a bordo; tomas el Metro de Caracas, te encuentras con las escaleras mecánicas en mal estado (y desde hace tiempísimo.....), sin aire acondicionado, con fallas de retraso, expuesto a que te roben, te golpeen, te empujen... ver el espectáculo de indigentes, pedigueños, enfermos habidos y por haber (y te enseñan las horrorosas afecciones del cuerpo)... te piden plata o comida, para mantenerse; los vendedores ambulantes, quienes te ofrecen con su charla, la venta de sus productos; los raperos, los hiphopjeros, los trovadores... para que les colabores con algo... la atención para la tercera edad, mujeres embarazadas, y personas con discapacidad, es deficiente (y peor aún, los asientos de color azul, que es apto para este tipo de personas, pasajeros con insensibilidad, no les permite el asiento); y sin contar, los borrachos que consumen su botella, dentro de sus instalaciones; así como los fumadores, drogadictos... cualquier gente inmoral, inculta... que promueve un escabroso espectáculo a la vista de quienes transitan el Metro de Caracas.
¡Ni hablar del problema de las horas pico... (en especial, la lentitud en las estaciones de transferencias, y el despelote de usuarias y usuarios, que se caen a golpes, para entrar, y esperar tiempo eterno, para abordar el otro tren), el problema de la basura, del racionamiento eléctrico, las olas de suicidios (y por gente joven, que decide quitarse la vida)... también han contruibido a desmejorar y dar mala imagen al servicio!
¿Es que no te huele querido lector (o lectora), que con todo esto, esté la presencia de un plan de sabotaje, orquestado por altos dirigentes de la oposición, y que van de la mano con gerentes públicos, quienes forman parte de la derecha endógena, de los quinta columna, del gobierno de Chávez? ¿Serán esos, que quieren crear un clima de desastre, de desorganización, de desestabilización... "para hacer ver a la opinión pública, que el Metro de Caracas, a manos del Gobierno Nacional, no está funcionando, y más, cuando tildan a de lo peor, a nuestra revolución bolivariana y socialsita"?
Claro ejemplo está, las reacciones de usuarias y usuarios, con su rostro de amargura, de descontento, de decepción... al Gobierno de Chávez, que es culpa de él, que el Metro de Caracas, está de mal en peor. ¿Acaso Chávez tiene la culpa, que el Metro esté en esas pésimas condiciones?
Ahora bien, ¿Cómo se explica, cada año, se anuncian públicamente, planes para la reconstrucción, mantenimiento, tecnología... de las escaleras mecánicas, y lo que tu observas, a los trabajadores de empresas contratistas, desarmándolas (y hasta llevándoselas como producto chatarra). Ves que no se compran buenos respuestos de calidad, para su mejor funcionamiento. Esto es para jugar e ironizar con la paciencia del usuario y usuaria que emplea el servicio. ¡Compadezco a mis camaradas con discapacidad, al encontrarse con este grave problema!
¿Qué se puede esperar de las empresas o las cooperativas de mantenimiento que contrata el Metro de Caracas, al no contar con los suficientes implementos de limpieza? Los ves realizando sus faenas, sin protección personal, es decir, no cuentan con guantes, con tapabocas, con gorros; y da tristeza, verlos con sus uniformes de trabajo. Da asco ver las instalaciones del Metro.
¡Qué gratos recuerdos me llegan a la memoria, la pulcritud en sus instlaciones, y la conciencia de la ciudadanía, que a diario ayudaban a mantener el Metro, en buen estado! Ahora no. Las papeleras rotas, otras, arrancadas de su lugar; el hervidero de cucarachas, chiripas y zancudos, en los vagones; los asientos, se han convertido en un papeleras. La ciudadanía en vez de colaborar, hacen del Metro de Caracas, un antro. No hay sanción. No hay políticas de educación y cuido, en beneficio de las mejorías de nuestro Metro. No hay fiscalización. No hay seguridad.
Otras grandes fallas, son las máquinas de expender tickets, con sencillo (anteriormente, funcionaban con moneda vieja; ahora, cuesta que con moneda actual, se vean funcionando). En las estaciones, donde se hace gran magnitud de usuarias y usuarios, vemos en la taquilla de venta de los tickets, un solo operador de turno, y las colas kilométricas, de nunca acabar. Tenemos el caso de los estudiantes, quienes aspiran a obtener el pasaje preferencial estudiantil del Metro de Caracas: Otro calvario más, para hacer sus colas kilométricas... ¡Ah! Si el sistema está funcionado, pues de lo contrario, pásate la semana que viene, por el número final de la cédula de identidad que te corresponde. En las estaciones del metro, donde se mantiene la compra de esos pasajes preferenciales, también vemos colas kilométricas, con un solo operador de venta, al público estudiantil.
Las vallas publicitarias, en vez de transmitir un mensaje de concientización, de valores, de respeto, de tolerancia... brillan por su ausencia. Las imágenes del "buen ciudadano Metro", no existen, porque las despegan, las rayan, las queman (y lo hacen a propósito). ¡Ah! Pero si me colocan una imagen publicitaria de una mujer desnuda, eso es intacto. ¿Qué mensaje positivo podemos darle a la mujer venezolana, a la revolucionaria, a la trabajadora, a la madre, a la estudiante, a la indígena, a la afrodescendiente... que haga uso del sistema Metro, con una imagen publicitaria, que denigra su formación como mujer y sus valores?
Cuando nos enfrentamos con situaciones de retraso (y más con las horas pico), los parlantes que emplean los operadores y operadoras de turno, también brillan por su ausencia. Tenemos que ser adivinos, o armarnos de paciencia, de saber que pasó, y esperar todo un viacrucis, para llegar a nuestras casas, a nuestros estudios,a nuestras diligencias... ¡Y peor aún, cuando son suicidios de gente "anormal", que deciden ponerle fin a su vida, lanzándose a los rieles del tren! Ni siquiera hay un plan de prevención para erradicar eso.
Tampoco, no hay un eficiente servicio de salud, para la atención a las usuarias y usuarios, que por no existir aire acondicionado, o la salvajada reinante de entrar o salir "a los golpes", tienen problemas de tensión, desmayos, convulsiones...
¡Es hora que el pueblo arrecho, también haga contraloría social en el Servicio del Metro de Caracas! ¿Cómo vamos a implementar una "Caracas Segura y Socialista", con un "Metro de Caracas inservible, inseguro y deficiente"? La millonada de usuarias y usuarios que a diario empleamos este servicio, como medida de inclusión social, por ser un transporte de costo digno, y al alcance del bolsillo del pueblo. Pero sigo preguntándome: ¿Dónde está la "Caracas Segura y Socialista", que pregonan constantemente el Camarada Alcalde del Municipio Libertador, Jorge Rodríguez, y el Ministro del Poder Popular para las Relaciones Interiores y Justicia, Tarek El-Aisami? ¿Y la Gaurdia Nacional, Poli-Libertador, Policía Metropolitana, y la nueva Policia Nacional... Dónde están para llevar a cabo la seguridad y el orden en las estaciones del Metro de Caracas, el plan de la Caracas Segura y Socialista?
Hasta en las unidades de los Metrobuses, se hace indispensable, la presencia policial en sus unidades.
El grave problema también, de las estaciones del metro, con presencia de buhoneros, en todas las entradas. No dan paso para la entrada y salida de sus usuarios y usuarias. Aunado a esto, la presencia de bandas de carteristas (o arrebatadores de carteras), de pandillas juveniles, quienes arremeten contra la ciudadanía indefensa, al tomar el metro. Me refiero a la 3° edad, a las mujeres embarazas, y mujeres con niños en los brazos. Esas mismas pandillas, burlan las medidas de seguridad del Metro, cuando evaden la entrada y la salida en los torniquetes.
¿Qué pasó con el programa "Las Mujeres Socialistas y Revolucionarias, tomamos el Metro de Caracas", organizado por el Ministerio del Poder Popular para la Mujer y la Igualdad de Género, con la C.A. Metro de Caracas? El año pasado, eso tuvo aceptación, como medida de prevención de la violencia hacia la mujer, en esos espacios. Hoy, no se ve nada de eso. ¿Dónde está la presencia organizada de los Frentes Populares de la Milicia Bolivariana, las Misiones Sociales, los Consejos Comunales, la Contraloría Social, Salas Situacionales de Batalla... que también tenían arte y parte, en las contudentes acciones para trabajar pueblo y gobierno, en conjunto, bajo la esencia del poder popular?
Por último, hay que reconocer, francamente, el esfuerzo de quienes son auténticos servidoras y servidores públicos, del Metro de Caracas. Yo los llamo "los servidores anónimos", porque multiplican esfuerzos, en darle al Metro, una bonita imagen, porque trabajan arrechamente con las uñas, y están de cuerpo y alma, con este proceso revolucionario. Lamentablemente, se siente traicionados con las altas directivas de turno. No perciben un justo reconocimiento salarial, ni mejoría de sus beneficios laborales.
Ministro Diosdado Cabello: ¿Es que en realidad no ha sentido el clamor del pueblo, cuando todas estas irregularidades e ineficiencias, del servicio Metro de Caracas, se palpen, en plena revolución Bolivariana?
Como Ministro, levante el látigo de las tres R: REVISIÓN, RECTIFICACIÓN Y REIMPULSO, contra esos apátridas funcionarios, ahí metidos en las altas directivas de turno, que hacen que nuestra Revolución Bolivariana, se vea en los organismos del Estado, caos, decepción y rabia, hacia el pueblo venezolano.
freddigodoy@yahoo.es