En plena Semana Santa, la impunidad se evidenció en la delincuencia común de cuello blanco, verde y amarillo; y todos esos colores que agrupan la oposición hacia el pueblo venezolano que es lo mismo que decir a la revolución Bolivariana.
Una cantidad de estafadores de sueños, que vivían disfrazados escondidos en las cúpulas del poder, hacían creer al pueblo venezolano que eran decentes, se destaparon con su conducta delincuencial, abrazándose con políticos fracasados de estirpe barata, que no convencen ni a su madre para que los acompañe en su rumbo de fracasos, resulta que ahora unidos con la iglesia, las jineteras y todos los opinadores de oficio se han dado a la tarea de imponer la inmoralidad, más de lo que la tenían establecida, antes la disfrazaban con su falsa moral, pero ahora les dio por legalizarla, aceptarla como la conducta normal para un pueblo que se trata de levantar de los escombros que dejaron en cuarenta años de inmoralidad, que deformaron cuatro generaciones, imponiendo como norma el robo, el cuanto hay pa’ eso, etc. Y que la indujeron a los vicios consumistas, en gran porcentaje la sumieron en la droga, la prostitución y un montón de conductas más que ahora pretenden en su desesperación de golpistas que aceptemos como normales.
Curas que en otros tiempos tenían la moral sucia pero la escondían, destaparon su delincuencial conducta, cuando deberían estar dando sermones de principios, como dicta la ley de Dios, ahora les parece normal que un irresponsable influenciado por sus consejos se lance borracho a una carretera a matar inocentes o a matarse con la familia; porque el es opositor y haciendo ese llamado le lleva la contraria al gobierno y al hombre que el pueblo eligió para que conduzca su destino.
Las jineteras le apoyan la comparsa y en sus mensajes de moral y luces les parece que hay que justificar a un delincuente que se escapa de la cárcel y que pagaba condena por desfalcar a la Nación con actos de corrupción, hay que enzalzarlo como héroe de la patria, porque es importante llevarle la contraria al Comandante General de la Nación, o sea a Hugo Chávez Frías.
Estos impunes, inmorales tienen todavía la esperanza que este pueblo, que despertó de su letargo, vuelva a creer en ellos y en sus mentiras, jamás pensaron que los hijos de Bolívar iban a concientizar un dia que los principios se heredan y tarde o temprano volveríamos hacer los descendientes de la decencia y no de la inmoralidad que trataron de perpetuar en el pueblo; ese pueblo grande que hoy no les cree sus mentiras y sus manejos mediáticos se pierden en la rabia que los consume cada vez que hacen encuestas y se dan cuenta que su estrategia no a funcionado, que no inculcaron su odio, porque decidimos que no volverán, que este pueblo salió de las catacumbas, de la ignorancia para no regresar jamás, porque ya hemos decidido que:
PATRIA O MUERTE VENCEREMOS.
Adelante pueblo heroico HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.
machucamelo@cantv.net
