Bragueta alegre son los hombres que empreñan alegremente sin importarle la suerte del producto de ese braguetazo . Son esa clase de hombres que no les importa regar su sangre por doquier. Esos que nunca se ocupan de darle ningún tipo de asistencia a sus hijos. Esos que son los culpables de tanto niño de la calle. Aunque justo es reconocer que las muejeres tienen su cuota de culpabilidad por no cuidarse.
Se entiende perfectamente que esta conducta es una secuela cuartarepublicana. Nunca los gobiernos adecocopeyano se ocuparon de educar tanto al hombre como la mujer en materia sexual, de concepción de una nueva vida y sus implicaciones. Porque los niños de la calles es un problema de EDUCACIÓN de adultos. Aunque hay niños que aún estando en casa son de la calle también.
Vean ustedes este caso
La niña tomó a Carneiro de la mano tan pronto terminó el acto de reinauguración de la escuela Rafael Cabrices y se lo llevó para su casa. Su casa es una habitación alquilada que comparte con su abuelita y 10 gatos.
La niña, de nombre Princesa ( omito su nombre por razones obvias), nunca ha tenido amor de padre y madre. Sus progenitores la abandonaron al nacer. Sólo la abuelita le cuida. Viven en una habitación muy pequeña sin servicios básicos. La nena a veces duerme con los diez felinos en un destartalado mueble, y otras en el pavimento mientras la venerada anciana le vela el sueño. Es graciosa. Muy simpática. Tiene seis años. Y es una cotorra; habla hasta por los codos. Es inteligente y vivaz. De piel clara y pelo amarillo de mazorca tierna.
Contó la abuelita que la niña luego de estar en casas de unas tías finalmente llegó a vivir con ella en la habitación alquilada. Comen los que Dios les provee y, por supuesto, la niña nunca ha tenido una muñeca.
Carneiro estuvo en el "hogar" de la beba acompañado de su señora esposa María de García Carneiro. Juntos sintieron el dolor de ver el cuadro de carencias que rodea a estos dos seres
-"Hay que ayudarla de inmediato, dijo, a ella y a su abuelita. Tenemos que proveerlas de casa, escuela, beca, trabajo, alimentos, pensión. En fin. De todo lo que es necesario para un hogar donde hay niños y ancianos desamparados.
UN DIA DIFERENTE
Mariita y su esposo Carneiro, invitaron a Princesa a pasar un día diferente, bonito, alegre. Del Piache se vineron en la camioneta y de entrada la invitaron a almorzar. Después de comer se bañó en la piscina con el uniforme escolar. No tenía trajebaño además eso no estaba en el programa. Simplemente quiso darse un piscinazo. Pero antes pidió permiso a la esposa del General.
¿Cómo te llamas?
-"Princesa"
¿Quién te invito a bañarte en la piscina?
- "Mí mamá. La esposa de "Caneiro. Mis primeros padres no sé donde se encuentran. No los he visto mucho. Mi mamá ahora es la esposa de "Caneiro".
¿Con quièn vives? ¿Quiénes son tus padres?
- "No te dije que mis papás son Caneiro y su esposa. Mientras tanto vivo con mi abuelita"
¿Te había bañado antes en una piscina?
- "No. Es la primera vez. Es sabroso. Y sabes que no me da miedo". Dicho esto se zambulló dejando ver parte de su uniforme escolar.
De pronto. Un bañador de dos piezas de paquete lució Princesa.
¿Y eso?
-"Me lo regaló "ahorita" mi mamá junto con dos ropitas, un par cholas y un par de zapatos nuevecitos. Mi uniforme se está secando".
Con Princesa, Carneiro y su esposa Mariita harán lo que siempre han hecho con los seres que menos tienen: darles mucho amor y asistirlos y proveerlos de las cosas fundamentales para ser felices, para vivir con dignidad. Ya veran ustedes, amables y pacientes lectores, como Princesa será una niña feliz, dichosa.
Princesa esa noche durmió con su nueva familia. Luego de levantarse y desayunar con las morochas García Carneiro se fue de paseo para la vivienda principal de Carneiro.
- "Hoy es domingo, dijo Princesa y mañana será lunes y entonces tendré que regresar al Piache I. ¿Sabes? Yo no quiero que venga mañana".
americoarcadio@yahoo.com