Una cesta es una recipiente que alberga variados productos, por ejemplo, la cesta de nuestro mercado familiar.
Así, la cesta de divisas es contentiva de variadas monedas de diferentes y seleccionados países, todos ellos con suficiente respaldo monetario y confianza internacional.
Digresión pertinente: EE. UU. con todo su poder destructivo bélico que le insume al pueblo norteamericano buena parte de Presupuesto Nacional es cliente deudor de China. De manera que quienes digan que China posee una divisa poco comercial es poco menos que un vulgar empírico que ni a tarifado llega. Fin de la digresión.
Seguimos. De ahora en adelante tendremos varias paridades cambiarias; por ejemplo, la paridad del Bs.F frente al yuan, otra, frente al rublo; otra, frente al dólar, otra, frente al yen; otra frente a etc.
La idea o intríngulis de la cesta monetaria es que si no tenemos reservas internacionales de determina divisa, podemos tener de otra u otra, con lo cual habremos reducido nuestra crónica hasta ahora monodependencia crediticia del dólar, a los EE.UU, y, por supuesto, minimizar cualquiera otra monodependencia de ningún un país.
Por supuesto 2, los países que integren nuestra cesta deberán estar abiertos a una multiconversión monetaria, de tal manera, que podríamos pagar oro en dólares, oro en yuanes, rupias, yenes o rublos, y desde luego en Bs. F. o en oro según las cotizaciones particulares de cada divisa y con saldos negativos en la Balanza Comercial, dado el caso de monedas con patrones fiduciarios.