"Tanto nadar para morir en la orilla", así reza un refrán popular, y es lo que evidentemente ha hecho el madurismo, cuando al negar durante este lustro la existencia del precio del dólar paralelo, alegando una "guerra económica" y "guerra financiera" contra el bolívar, no sólo termina aceptando el valor de referencia de Dólar Today, sino que incluso casi que coloca semejante indicador como tasa de compra para las remesas que desde el exterior envíen a los venezolanos, a través de una de las casas de cambio autorizadas por el gobierno¹.
Y es que lo anterior, echa por tierra las propias tesis fantasiosas del madurismo sobre la "guerra económica", donde uno de sus principales voceros, y hasta "asesor económico", Tony Boza, ha quedado en ridículo con el propio madurismo y ante la opinión pública cuando llegó a afirmar: "La inflación en Venezuela es caprichosa, la podemos medir hacia el pasado, lo que ha sucedido, pero como es caprichosa no la podemos proyectar hacia el futuro, sino que depende del señor que está detrás de la tecla de una computadora que le pone valor a la relación bolívar dólar todos los días"² .
En otras palabras, suponemos que Tony Boza quien comparte los mismos criterios que otra "economista" como Pascualina Curcio (que busca afanosamente un carguito de "ministra") la autora de la "(hiper)inflación inducida", nos dirán que los responsables en aceptar la tasa devaluacionista sobre el bolívar es culpa de unos "infiltrados" en el Banco Central de Venezuela (BCV), que ahora detrás de las computadoras de ésta institución, fijan también de manera "caprichosa" ese valor, y por ende, tanto Boza como Curcio no debería extrañarnos que se orienten a "construir" la teoría de los "traidores inducidos", o sea, seguir afirmando con extrañas abstracciones que la destrucción de la economía, así como el hambre que vivimos los venezolanos, no existe, sino que todo es producto de una especie de realidad virtual, porque el madurismo siempre ha aplicado las medidas necesarias que requiere nuestra economía. Verbigracia, a este paso, honestamente, voy a sugerirle a Boza y Curcio que se dediquen al humorismo, porque como "economistas", para decirlo sin eufemismos, son unos completos fracasados y habladores de bazofia política, y por supuesto, de barbarie económica.
El madurismo necesita dólares para poder seguir cancelando los intereses de deuda externa en múltiples compromisos, especialmente con los chinos, buscando refinanciar deuda con éstos, y encontrar divisas que le permitan reflotar a la quebrada industria petrolera, así como generar un mínimo de inversiones y materias primas para el sector agrícola y de transporte. Por ello, conoce muy bien que el envío de remesas es un valioso mercado para encontrarlas, sin entregar nada a cambio, porque para eso imprimen el dinero electrónico (inorgánico), lo cual además presagia, que no habrá interés, cuando menos en el corto plazo para salir de este marasmo hiperinflacionario, lo cual equivale a decir que Venezuela está cada vez más hundida en lo económico y financiero.
El madurismo ha fijado el valor del dólar para remesas casi al valor que fija Dólar Today. Es el significado evidente de que este gobierno está quebrado, sin dólares y en el medio de un desastre político, económico y social sin precedentes. Ya ni mencionan el cacareado "petro" que bien sabemos se convirtió en otra falacia de este gobierno, porque ni siquiera alcanzó a ser aceptado entre sus propios partidarios.
En síntesis, el madurismo busca afanosamente la entrada de divisas aunque ello implique terminar de aceptar que nunca existió la "guerra económica" y que sus "economistas" son unos charlatanes, porque en definitiva, se acaban las alternativas para evitar el total hundimiento del gobierno y lo que terminaría convirtiéndose en el episodio final de lo que luce inevitable: la salida de Maduro del poder ante el hambre de un pueblo.
Podemos decir que en lo sucesivo el dólar madurista se fijará conforme se vaya fijando Dólar Today, aunque ello signifique manejar ese valor desde el teclado de manera "caprichosa" e "inducida". ¿Verdad Tony? ¿Verdad, Pascualina? A propósito de ser ciego. Quien tenga ojos que vea.
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