Anclaje del bolívar al petro, eliminación de cinco ceros al bolívar fuerte, nuevo cono monetario, asignación de reservas petrolíferas al BCV, eliminación de aranceles a las importaciones
¿Qué vaina es esta? ¿Se volvió loco Maduro?

Pues no, al parecer, y como diría mi tía abuela Auxiliadora, los estaba esperando en la bajadita.

Seria de necios el negar que el Presidente tiene una altísima responsabilidad en la crisis que padece el pueblo de Venezuela. Su inacción, su alcahuetería con ministros incopetentes, su sordera no han hecho sino agravar los males causados por la guerra y el bloqueo al que nos someten los gringos.
Sin embargo, pareciera que el hombre ha despertado de su letargo y se ha lanzado al contraataque con cinco jugadas que parecieran magistrales y mejor aún, por flancos diferentes. Veamos:

Jugada 1
Siempre dijimos que nuestra moneda era muy débil para resistir un ataque como el que le montaron con la cotización arbitraria del dólar. Ahora el gobierno pasa a la ofensiva al anclar el bolívar soberano al petro y fijar el valor de este en un barril de petróleo.
Desde nuestra perspectiva esa debilidad, que tanto daño le ha hecho a nuestra economía, pudiera ser solventada con esta audaz acción.
No es cierto que un bolívar soberano tendrá el mismo valor de un petro (68 dólares) pues de ser así el salario mínimo (55 BsS) pasaría a ser equivalente a 3740 dólares lo cual es sencillamente imposible.
Lo que si creemos que ocurrirá es que el valor que en petros, se le asigne al bolívar soberano, dependerá del valor equivalente que se le quiera asignar al salario mínimo.
Así, si se establece, que los 55 bolívares del salario mínimo, equivalen a 4,4 petros nos da como resultado que esos 55 BsS representan 300 dólares.
Con esta acción el gobierno se juega a Rosalinda, pues con ella aspira estabilizar la economía a corto plazo, algo que le es de vida o muerte.
Desde nuestra posición de observadores creemos que al no poder manipular el petro como han hecho con el bolívar (habría que manipular el mercado petrolero) los precios se estabilizarán, la especulación e inflación cederán terreno
y el poder adquisitivo del ciudadano se incrementará significativamente.

Jugada 2
La eliminación de cinco ceros al bolívar fuerte, permite que los bancos puedan dispensar hasta el equivalente a 20 millones de hoy con un solo billete. Eso debería ayudar a resolver el problema de la falta de efectivo, el descarado negocio de su compra y venta y las largas colas en los bancos. Aquí es necesario obligar a los bancos a que dispongan de cajeros automáticos.

Jugada 3
Venezuela a pesar de haber cumplido cabalmente con sus compromisos de deuda es víctima del sistema internacional (manejado por los gringos) de determinación de riesgos. Hasta 30% de interés y descuentos en bonos de hasta 50% ha tenido que dar el país para conseguir dinero fresco.
Con la asignación de un bloque petrolífero al BCV se manda al mismísimo demonio a esos grupos. Ahora se emitirán bonos de la deuda pública respaldados por un bien tangible, medido y certificado. Se acabó con esto el juego macabro y los prestamos a grandes intereses.
Adicionalmente, se fortalecen las reservas internacionales.

Jugada 4
Como ya dijimos, con el anclaje del bolívar al petro, los precios tenderán a ser internacionales (ya el 80% está fijado en dólares negros) al igual que el salario (ya hablamos de una posibilidad de 300 dólares). La especulación tendría que desaparecer, pues los que pretendan seguir con esa práctica tendrán que enfrentar una competencia estimulada por la eeliminación de aranceles.

Jugada 5
Al pagar un salario internacional (55 bolívares soberanos, 300 dólares o 4,4 petros) no es necesario mantener los subsidios a los servicios públicos (por lo menos a los niveles actuales) lo que permitirá a empresas como el metro, Corpoelec contar con capacidad financiera para brindar un mejor servicio.

Ahora, como en toda guerra, habrá que esperar la reacción del enemigo; pero al menos hay una acción en progreso.
Liguemos todos que tenga éxito