En un mensaje contundente emitido este domingo, la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, ratificó la decisión del gobierno de mantener intactos los acuerdos establecidos con empresas transnacionales de petróleo y gas que operan en el país, a pesar de las recientes notificaciones de Estados Unidos sobre la revocatoria de licencias a aquellas asociadas con la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA).
A través de un comunicado difundido en Telegram, Rodríguez enfatizó que "Venezuela no reconoce ni aplica jurisdicción extraterritorial alguna", dejando claro que, desde la perspectiva del gobierno venezolano, las empresas internacionales no necesitan permisos o licencias de gobiernos extranjeros para operar en territorio nacional. "Como siempre lo hemos sostenido, las empresas internacionales no requieren licencia ni autorización de ningún gobierno extranjero", afirmó la vicepresidenta.
Rodríguez también destacó que Caracas se posiciona como "un socio confiable" en el ámbito energético global y aseguró que el país está plenamente preparado para enfrentar lo que calificó como "esta coyuntura", en referencia a las tensiones generadas por las sanciones estadounidenses. La declaración subraya la postura soberanista del gobierno venezolano, que busca mantener su autonomía en la gestión de recursos estratégicos frente a presiones externas.
Este pronunciamiento llega en un momento de creciente incertidumbre para las compañías transnacionales que operan en Venezuela, las cuales enfrentan el dilema de cumplir con las prohibiciones impuestas por Washington o continuar sus operaciones bajo el amparo del gobierno de Nicolás Maduro. Hasta el momento, ninguna de las empresas afectadas ha emitido comentarios oficiales sobre cómo procederán ante esta situación.