Si alguien le entra a los artículos que frecuentemente publica Pascualina Curcio, cae en su inconsistencia y concluye que viene dando vuelta como un trompo. No es broma, es real. Conste que Pascualina es la técnica más visible entre los técnicos del gobierno.
En un artículo que le colocó por título: ¿Qué hacer? y publicado el 06/05/2018, Pascualina nos sugiere esto como primer punto de este qué hacer:
"Detener la hiperinflación es la tarea urgente en este momento, no solo porque pulveriza el salario real, también contrae la producción nacional la pérdida del poder adquisitivo disminuye la cantidad de bienes demandados y los oferentes reducen las cantidades producidas); estimula el acaparamiento por las expectativas de aumentos de precios; alimenta el contrabando de extracción; hace insuficiente el presupuesto público" (Subrayado mío)
En el punto 3 agrega, que para impedir que se marque arbitrariamente el valor del bolívar, ella sugiere: "anclarlo a la cantidad de oro que está en las bóvedas, cuyo precio solo se fija en el mercado internacional. Los chinos, los rusos y hasta los norteamericanos están haciendo lo propio. Con la diferencia que mientras ellos deben comprar el oro, nosotros lo tenemos en las minas"[i]
Una solución sencilla. ¡Papaya! Tenemos el oro en las minas y ya. En este ¿Qué hacer? Y en las condiciones necesarias que Pascualina fija en este artículo, no hay ni una propuesta destinada a otra cosa. Oro y recuperar la producción petrolera. La "solución" en esa fecha que fue ayer, pasaba por ahí. Apúntese, que Pascualina colocó como primera cosa en este ¿Qué hacer?, la urgente tarea de detener la inflación. Está dicho y escrito por ella.
En un artículo publicado el 01/11/2018, Pascualina nos ofreció esta idea:
"Al anclar el bolívar al petro y éste, a su vez, al barril de petróleo, cualquier aumento del precio del hidrocarburo (único bien de exportación de nuestra economía) implicará, paradójicamente, una depreciación del bolívar. El que esto ocurra, es por decir lo menos, ilógico"
Unas líneas más abajo, PC dice: "Este error no sería tan mayúsculo si no fuese porque es el bolívar, y no el petro, la moneda de circulación nacional, es la unidad en la que se marcan todos los precios en nuestra economía. Es el bolívar el que debemos fortalecer si queremos detener la hiperinflación, no el petro"
Yo que soy medio duro para entender estas cosas, he estado por días como Juan Peña intentando explicarme: Cuál es la diferencia entre oro y petróleo en la política de anclar el bolívar. Me he quedado con la idea que el oro es amarillo y el petróleo es negro, pero recuerdo que al petróleo se le ha llamado oro negro y al fin de cuenta, no sería tan distinto. Es como seguir viviendo prestado. Por ahí me vino la idea de Pascualina anda como un trompo.
En un artículo publicado el 26/11/2018 dice lo siguiente:
"Mientras sigan atacando nuestra moneda seguirán aumentando los precios y deteriorándose el poder adquisitivo. Ante tal situación es imprescindible aumentar el salario nominal, garantizar el cumplimiento de las convenciones colectivas y mantener la proporcionalidad a lo interno de las tablas salariales. Lo que realmente importa, en lo que a salarios y precios se refiere, es que la población mantenga la capacidad de adquirir la misma cantidad de bienes y servicios"[ii]
En este artículo Pascualina se cansó y abandonó totalmente el primer punto de ¿Qué Hacer? Mientras sigan atacando a nuestra moneda, la hiperinflación nos seguirá comiendo. Esto luce una cosa eterna e inmanejable. En otra vuelta como el trompo; Pascualina nos ofrece que la solución es "aumentar el salario nominal". Se olvidó del real
Solución salomónica. Seguramente dentro de 30 días más ya este salario nominal no sirva para nada y haya otro aumento del salario nominal en 90 días más adelante. Esperemos entonces que en la otra vuelta del trompo Pascualina nos ofrecerá, como experta, otro pañito caliente.
[i] https://www.aporrea.org/economia/a262766.html
[ii] http://www.15yultimo.com/2018/11/26/salario-vs-precios-y-liquidez-monetaria/
