Una semana “negra” para el mercado cambiario nacional y para nuestra maltrecha economía interna por el declive de la ventas comerciales, el continuo cierre de negocios ante la profundización de la contracción del consumo privado empujado éste, por la escalada de los precios internos de los bienes y servicios y la especulación.
El epicentro de este terremoto lo hemos apreciado impávidos en los estragos que está causando el encarecimiento de la moneda estadounidense en el mercado de cambios sobre el Poder de Compra de los venezolanos. Las estanterías de los automercados y bodegones están llenos de mercancías y muy especialmente de los alimentos que faltan en los hogares empobrecidos de este país. Esto no se resuelve con el Impuesto a las Grandes Transacciones (IGT) y tampoco con una flexibilización del encaje legal y mucho menos CASHEA. La solución de esta colosal tragedia está en solventar la profunda crisis política interna (entre Gobierno y la oposición conectada con EEUU) y desatar el cúmulo de sanciones que pesan sobre el sector energético nacional (impuestas por EEUU y la UE). La máxima presión sobre la Nación la está ejerciendo el Secretario de Estado estadounidense Marco Rubio sobre el presidente Donald Trump, el empresario mediador en la guerra que mantienen Rusia y Ucrania. A Venezuela, como país monoproductor y monoexportador, le urge colocar su petróleo libremente en los mercados internacionales para proveerse de los recursos monetarios que demanda la economía interna e imprescindibles para brindarle estabilidad al tipo de cambio. El intercambio comercial entre Venezuela y Rusia haciendo uso de sus propias monedas nacionales se quedó estancado en la mesa de negociaciones y Venezuela no puede sucumbir o colapsar ante lo que se decida en Washington, así como tampoco la seguridad de la Unión Europea no puede depender de lo que se decida en Washington y en Moscú. Hay que buscarle salida a este oprobioso conflicto y se necesita un mediador que muy bien puede ser los líderes de las otras dos potencias mundiales, como lo son China y Rusia.
La brecha cambiaria, el día jueves 27 de marzo alcanzó un nivel extremadamente preocupante al ubicarse en 53,99% (Bs.37,49 por dólar), alimentado por la fuerte escalada de dólar libre o paralelo desde días previos y que se ubicó el jueves 27 en Bs.106,93 por dólar USA. En realidad, el día martes 25/03 el dólar libre se disparó en un 6,39% (Bs.95,60 por unidad) y al día siguiente, el miércoles 26/03, lo hizo con más fuerza en 7,657% (Bs.102,92). En la jornada cambiaria del viernes 28/03, la cotización del dólar libre registró una caída de 4,99% al situarse en Bs.101,59 por unidad y la brecha cambiaria se acortó a 46,03% (Bs.32,02 por dólar).
En la semana que recién finalizó, la moneda estadounidense en el mercado libre ha registrado una variación relativa positiva de 14,96%, en lo que va del mes de 25,62% y en lo que va del año 2025 acusa una variación 44,25%. En términos de depreciación de la moneda nacional, el bolívar, podemos afirmar que en lo que va del mes de
marzo esta ha perdido valor en el paralelo en 21,89% y, este desequilibrio, por supuesto, está generando un tremendo impacto en las transacciones comerciales y financieras que están fuera del alcance del control o la supervisión de la autoridad monetaria del país y al final será recogido en la cadena suministros y en los precios internos de la economía doméstica. Ahora tenemos más inflación, más carencias, más desasosiego y como es de esperarse más pobreza en este rico país.
El precio del dólar oficial ha mantenido su constante alza durante varios meses en su intento del BCV por acortar la brecha cambiaria, lo cual se le está escapando de las manos ya que no dispone de ninguna carta para frenar este descalabro cambiario, financiero, económico y social . La escasez de dólares está haciendo aguas en la política cambiaria del instituto emisor. La cotización del dólar oficial el día viernes 28 de marzo se ubicó en Bs.69,5664 por dólar y representa una variación relativa de 0,18%. En la semana que finalizó el día 28/03, la cotización oficial registró una variación relativa positiva de 1,82%, en lo que va del mes de marzo de 7,61% y en lo que va del año 2025 de 29,16%. Un abismal contraste con lo que viene registrando la cotización del dólar libre. La depreciación del bolívar en el mercado oficial asciende en el mes de marzo a 7,31% y ésto está generando un descomunal malestar en el venezolano que ve que cada día que pasa las cosas se ponen más difíciles en este rico pais, y entre ellos destacan los millones de pensionados y jubilados.