A pesar del
escaso cumplimiento de las TRES R2, la inclemencia del tiempo, con la
naturaleza que ha sido implacable con el proceso revolucionario liderado
por el compañero Presidente Hugo Chávez, hemos nuevamente logrado
un importante triunfo este 5D, que nos permitirá consolidar los éxitos
logrados como así también emprender urgentemente el trabajo socio-político
en los estados que hemos perdido espacio y liderazgo.
Es inexplicable
que un estado como el Zulia, con uno de los índices de mayor delincuencia,
e inseguridad en el país, el oposicionismo nos desplazara en el Municipio
de una significativa importancia como es Maracaibo, como la Gobernación
del estado. A pesar del resultado, el compañero Di Martino acortó
distancia en votos con la candidata triunfadora y esposa del prófugo
de la justicia Manuel Rosales, en relación a las elecciones del 26S
porcentualmente.
En cambio en
el estado Guárico, el compañero Luis Gallardo, valiente, grande, lucido,
haciendo gala a su apellido y homenajeando con el triunfo al inolvidable
Willian Lara, se logró una victoria apoteósica, inmensa, casi igualando
el total de votos del extinto compañero gobernador, pero con un porcentaje
superior al 70% de los votos emitidos.
Quién suscribe, cree que es imprescindible refundar la izquierda y en forma especial refundar el PSUV, para lograr un rotundo éxito en las presidenciales del 2012. Supuestamente el comandante Presidente, estratega y líder de este proceso trabaja en función de esta sugerencia impostergable, como lo que él llama EL POLO PATRIÓTICO, ALIANZA PATRIÓTICA, tenemos un ejemplo notorio y público como lo es el Movimiento Revolucionario TUPAMARO, invito a los lectores de Aporrea a hurgar en la página Web del CNE y constatar el progreso del MRT desde el año 2005 al 2010 en las diferentes consultas electorales que se han presentado, y podrán observar el crecimiento progresivo y lo más importante que son votos propios , duros, transparentes, y rodilla en tierra con Chávez y la revolución.
Es paradójico
que el MRT, quién tiene un peso específico en el electorado nacional,
no tenga espacio en las políticas publicas, ni de poder en el gobierno
de Chávez. En las elecciones recientes el MRT se consolidó como el
segundo partido progresista de la izquierda venezolana por encima del
PCV.
Por lo anteriormente
expuesto, por la revolución, por la patria, debemos irrumpir
urgentemente en una alianza de verdad, verdad, hombres, mujeres, jóvenes,
y ponernos a trabajar por la continuidad de Chávez, por el socialismo
y por la felicidad de un pueblo esperanzado.