La conformación de bloques de países regionales en las diversas áreas de cooperación e intercambio han permitido durante décadas a países que se encuentran ligados a una serie de factores de proximidad o vecindad como la distancia geográfica, unirse en lazos culturales y/o religiosos, el lenguaje común o similares en gustos, niveles, modos de vida e inclusive sistemas políticos, agrupan la búsqueda de una mayor cooperación con mejores beneficios energéticos, económicos, políticos, sociales y culturales.
La creación de un bloque regional a partir de envíos diarios de crudo hacia otras regiones va mucho más allá del solo hecho de lograr una mayor cooperación energética entre sus distintas naciones. Existe un objetivo adicional, podemos sumar el proceso de integración para influir activamente en las recientes relaciones comerciales internacionales con países miembros beneficiados desde Venezuela en sus envíos diarios de petróleo.
Por ende, podemos definir los bloques petroleros como grupos de países, limítrofes o no, unidos tras acuerdos que impliquen lograr objetivos para promover intercambios comerciales y a través de ellos hacia un nuevo modelo de integración, esto elimina total o parcialmente las barreras que restringían la circulación de bienes y personas entre los integrantes de los llamados bloques, haciéndolos accesibles y cooperativos en objetivos comunes.
En la actualidad, a pesar de los diferentes equipos concentrados en nuestras áreas geográficas de Sudamérica y el Caribe se han conformado bloques comerciales proyectados hacia distintas partes del mundo que siempre han sido voraces consumidores, donde ahora la energía que ellos han de necesitar para sus próximas décadas está en las propuestas de los grandes bloques.
Esta búsqueda de cooperación mutua ha sido estratégica para la educación, Mesas de Negociaciones, intercambios, trasferencia tecnológica, salud, cultura, todo gira en beneficios sociales y el impulso de unas mejores relaciones diplomáticas entre socios para hacer menos complicadas las relaciones internacionales.
Los acuerdos alcanzados a mayor escala sobre una base regional han permitido un mejor aprovechamiento de las economías a grados nacionales e internacionales. Estos bloques de países se han llevado a cabo en diferentes índoles e intereses geográficos, políticos, económicos, todo ha permitido una mayor y mejor cooperación; como ha sido el caso de los bloques económicos—comerciales muy aparte de los políticos.
Estas recientes organizaciones internacionales agrupadas en un conjunto de países ven el propósito de obtener beneficios mutuos en el comercio internacional de los hidrocarburos, primeramente su materia es económica, sin perjuicio de sacrificar lo social en el desarrollo que logre menguar sus necesidades. Aunque en mayor parte la conformación de ellos tienen motivos políticos y sus formas de unión se realizan a partir de firmas de tratados internacionales que pueden ser de distintos tipos y en nuestro caso ha tenido un gran peso lo social.
Tras la regionalización del comercio mundial existe un interesante movimiento sustancial hacia el regionalismo propuesto desde hace un poco más de cuatro décadas, comenzamos con la concreción de la Comunidad Económica Europea a finales de la última década del siglo pasado y a medida que la globalización se apoderaba del mundo nació el MERCOSUR.
Por eso la mayoría de los bloques comerciales en la actualidad están definidos por una tendencia regionalista, primeramente debido a las proximidades geográficas y de los recursos energéticos que poseen sus países miembros; mientras que las relaciones comerciales de carácter no regional tienden a ser bilaterales, a darse entre bloques comerciales en formación; ya que no es lo mismo comerciar entre dos países en particular que entre un bloque como el MERCOSUR con otro bloque u otro país en particular.
Pero siempre hay un precio a pagar por pertenecer a un bloque comercial específico en cualquier parte de la geografía mundial. Entre estos pueden mencionarse los costos inherentes en la desviación del comercio a favor de socios únicos en lo comercial, incluye un coste económico al hacer que las importaciones de terceros sean sustituidas por importaciones más costosas de socios preferidos.
Esto acarrea costos políticos que puede significar una discriminación a favor de un país contra otros vecinos. Además está el costo de la desviación del comercio que los más poderosos someten a los más pequeños, es la suma de desventaja adicional al pertenecer a un bloque en el que los exportadores no tratan de ajustarse a las normas mundiales sino a las normas de sus mecanismos, viéndose los pequeños países en grandes desventajas económicas y comerciales.