No pudiésemos hablar del petróleo sin mencionar a la OPEP y su crudo quien violentamente copó un mercado y tras él un gran negocio.
Tampoco podemos hablar de la OPEP sin mencionar a un Hugo Chávez con sus propuestas, esta organización tiene un antes y un después.
Son muchas las diferencias de un Chávez que habló de un petróleo para la paz. Quien buscó fabricar un equilibrio, desarrolló y planteó un marco de intercambio con nuevas relaciones internacionales, diplomáticas, desde PetroSur, PetroAmerica, Gran Gasoducto del Sur.
Pudiésemos decir que gracias a Hugo Chávez, Sudamérica dio pasos para convertirse en el eje Sur político del petróleo y estos caminos tuvieron proyección para toda América Latina y el Caribe.
Una alternativa distinta a la vivida por cada uno de las casi cuarenta naciones de este eje y el cual pudo ir directamente a convertirse en un polo. Esta es la causa por la cual las familias del poder histórico se aliaron en el Grupo de Lima y sin ningún empacho también aprobaron las sanciones provenientes tanto de EE.UU. como de Europa.
Podemos hablar de América Latina y el Caribe como el Sur geopolítico del petróleo. No más en Suramérica Venezuela impulsó treinta y tres filiales, empresas en muchísimas áreas. Participó en la construcción de refinerías, transporte, navieras, ofreció y dió un papel que permitiría rescatar y aliviar buena parte de las economías de varias regiones y les colocó y ofreció una oportunidad con valor energético, esto permitiría un intercambio mutuo y elaboraría una vía contundente en torno a lo que vendría a significar un nuevo desarrollo frente al poder hegemónico de siempre.
Era alternativa frente a un poder controlador el cual posee marcas, productos y servicios.
Un papel hegemónico versus una nueva alternativa la cual necesariamente iba a dar cuenta de autonomía política, modelos especiales y apreciados en muchos países de acuerdo a sus realidades.
Paises impactados, tocados, acordando y llevando en buena parte en torno a lo que significa exploración, explotación, producción, tranporte, mercados, eran las esperanzas, oportunidades que fueron dadas por el petróleo bien sea en su suministro y ayuda.
Era incorporar a nuevos países a la OPEP: México, Brasil, Argentina. Cuando muchos de no han podido desarrollarse por no haber tenido oportunidades de adquirir una buena cuota diaria y permanente de petróleo y algunos que hacen su manejo lo interpretan de forma y manera totalmente desequilibrada.
Tenemos que hablar de un manejo del petróleo en su forma y estilo distinto frente a lo llevado hasta ahora de manera desequilibrada. Frente a esto hay que crear una nueva alternativa con visión, sueños en torno al petróleo que sirva para el desarrollo, para el intercambio, para dar oportunidades de estudio, salud, infraestructuras, servicios para estas atareadas comunidades.
Hasta más pronto...