La petrolera estadounidense Chevron volverá a operar en Venezuela, anunció el Gobierno del país latinoamericano luego de que EEUU firmara un acuerdo con dicha empresa para reanudar la extracción de petróleo en Venezuela. Se trata de una flexibilización del bloqueo estadounidense contra la industria petrolera del país suramericano
Chevron, que opera en sociedad con filiales de Petróleos de Venezuela (PDVSA), tiene un legado en el país latinoamericano que se remonta al descubrimiento del Campo Boscán en la década de 1920. Lo mismo que subrayó en su reciente tuit el ministro de Petróleo de Venezuela, Tareck Aissami, a través del cual informó de una "exitosa reunión de trabajo" con el presidente de Chevron Venezuela, Javier La Rosa, y recordó que, en 2023, la empresa cumplirá 100 años de operaciones en el país.
El yacimiento, ubicado a 40 kilómetros al suroeste de la ciudad de Maracaibo, comprende un área de 660 kilómetros cuadrados y llegó a tener una producción 115.000 barriles diarios de petróleo, la misma de países como Dinamarca, Brunei y Chad.
Chevron, que actualmente es la segunda petrolera más grande de EEUU luego de Exxon Mobil, mantiene cinco proyectos de producción onshore y offshore en Venezuela y cuenta con cuatro operaciones con participación minoritaria junto a PDVSA en el oeste y este del país: Petropiar, Petroboscán, Petroindependencia y Petroindependiente. Del total, tres corresponden a actividades de crudo pesado.
De acuerdo a la empresa, las inversiones realizadas por la compañía en Venezuela no solo captaron mano de obra local, sino que motivaron el desarrollo tecnológico en el país. Asimismo, la empresa ha realizado aportes de más de 100 millones de dólares en proyectos de inversión social que benefician a 45.000 venezolanos en materia de salud, educación y otras áreas.
Entre 2019 y 2020, la compañía invirtió cinco millones de dólares para asegurar el acceso a agua potable y el apoyo médico a poblaciones vulnerables mediante un trabajo conjunto con el Plan de Respuesta Humanitaria de las Naciones Unidas y programas de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo (Usaid).
Además, Chevron ha impartido cursos y programas para fortalecer el emprendedurismo en el país, con el apoyo de organizaciones locales.
A pesar de la vasta actividad de Chevron en Venezuela, las operaciones se habían interrumpido por las sanciones impuestas por el Gobierno estadounidense contra el país suramericano. La compañía podrá volver a trabajar en 2023, gracias a una licencia por un período de seis meses otorgada por la Oficina de Control de Activos Extranjeros de EEUU.
Este permiso trascendió luego del acuerdo parcial entre el Gobierno y sectores de la oposición de Venezuela, en el marco de la reanudación de la mesa de diálogo en Ciudad de México, el pasado 26 de noviembre.
La producción de las empresas mixtas con participación de Chevron ronda los 50.000 barriles diarios pero podría alcanzar los 200.000 barriles si se realizan inversiones importantes en los próximos dos años, según estimaciones.
La habilitación surge en un escenario mundial azotado por el aumento de precios de los combustibles y la escasez energética, consecuencia del conflicto en Ucrania y las sanciones a Rusia, que ha generado acercamientos entre el Gobierno venezolano y el estadounidense.
En marzo, delegaciones de alto nivel de Washington y Caracas se reunieron en Venezuela, lo que constituyó el primer acercamiento desde la ruptura de las relaciones diplomáticas entre ambos gobiernos en 2019.