Artículo "La Batalla Ideológica" por William Izarra (12/12/10)
http://aporrea.org/actualidad/a113873.html
Comandante y amigo William Izarra, he leído su interesante artículo en Aporrea “La Batalla es Ideológica” y como todo lo proveniente de su intelecto no tiene desperdicio, se debe leer no una, sino dos y tres veces para sacarle la sustancia a su contenido.
Cuanto tiempo ha transcurrido quizá diez once años desde aquel encuentro donde nos conocimos, en aquel acto, realizado en un gran teatro que ya quizá ni no existe en la esquina de la candelaria. Fuimos El señor Alfredo López QEPD y yo en representación de los Círculos Zamora a darle el respaldo que usted necesitaba y merecía en ese instante. Precisamente respaldo frente a uno de esos injustificados ataques de infamias y calumnias que acostumbra la canalla de la derecha endógena, los disfrazados de revolucionarios, los oportunistas los reformistas, en contra de los revolucionarios de izquierda o verdaderos y que en ocasiones como aquella a la que hago referencia, lograron engañar y confundir al propio Hugo Chávez, tal como ahora sucede con muchas de las situaciones que han pasado y pasan incluso en el Aló Presidente.
Sin duda digo yo, son los alacranes de todos los colores que pululan alrededor del presidente, como decía el buen general Müller QEPD.
Ciertamente comandante amigo esta batalla como usted bien dice es ideológica, no se puede dar un cargo de responsabilidad, decisión y mando al que no tiene el alma corazón y sus conocimientos entregados a la revolución bolivariana. De lo contrario sucede lo que ha sucedido con muchos llamados “compatriotas”, se tornan burócratas los rodea el dulce encanto de la “duce vida” y se olvidan que están allí para lograr un objetivo, que forman parte de la táctica de este proceso para ganar la batalla final, para lo cual hay que crear como decía el Che Guevara “el hombre nuevo” dotado de ideología y principios del árbol de las tres raíces. De lo contrario ninguna función aporta esta “burocracia reformista endógena” al proceso, todo lo contrario como el árbol hueco, son un mal ejemplo para el resto de compatriotas.
Los burócratas reformistas se sirven de la Constitución Bolivariana y de su estatus personal logrado, para beneficiarse ellos y no para servirle a su pueblo.
Reforma o Revolución hay está el detalle diría un famoso actor, ciertamente reforma es más de lo pasado, de lo mismo que deseamos cambiar. Revolución es transformación y cambio radical de todas las viejas estructuras. Para lograr esto se debe radicalizar el proceso. Considero, que es la única forma y nuestra última oportunidad.
Reforma o Revolución ese es el planteamiento que usted menciona y que es el talón de Aquiles de este proceso. O vencemos a los reformistas o los reformistas acaban con el proceso bolivariano y con la posibilidad de una revolución verdadera que perdure en el tiempo. Incluso los llamados reformistas son capaces en sus arrebatos burocráticos y corruptos de llevarse en los cachos al propio líder del proceso nuestro comandante y presidente Hugo Chávez.
La punta de lanza de este proceso es sin duda el propio pueblo. Conformado, unido en lo que usted llama Democracia Directa, yo digo Todo el Poder para el Pueblo, que viene a ser lo mismo, o de hecho los Consejos Comunales y Las Comunas. Para el éxito de esta punta de lanza, son tan importantes los Centros de Formación Ideológica, CFI que usted menciona, pues es bien sabido que sin ideología no hay revolución y yo agrego: -sin revolucionarios verdaderos tampoco-.
Revolución y no Reforma este es el dilema actual si queremos que el proceso revolucionario bolivariano se proyecte más allá del 2011 con nuestro líder a la cabeza. Para esto debemos contar con una vanguardia de verdaderos revolucionarios formados como usted acertadamente propone.
Derrotar el reformismo dentro de los entes del gobierno y del propio PSUV y desatar su nudo gordiano en el que tienen atado a este proceso es un objetivo y hacer la revolución verdadera que pueblo rebelde e invencible está esperando el objetivo final.
¡Hasta la Victoria Siempre!
