I.

El proceso histórico que se vive en Venezuela desde el gran triunfo electoral del Comandante Chávez 6 de diciembre de 1998, tiene garantizado una direccionalidad política hacia el socialismo, porque el cambio y la transformación del Estado, la Democracia y sus políticas sociales, están previstos en un texto constitucional, que se cambió revolucionariamente durante 1999, en el marco de un proceso constituyente inédito contra el capitalismo, bajo la guía de un líder fundamental, tal como puede apreciarse en un discurso de Chávez.

“El viejo Estado burocrático y corrupto, pensado y hecho de esa manera para beneficiar a las élites criollas, para reprimir y excluir a las mayorías y al pueblo, ciertamente ha experimentado procesos internos de transformación, pero igual estamos muy lejos del Estado social de derecho y de justicia que necesitamos para consolidar y profundizar nuestra Revolución”. Hugo Chávez


II.

Afirmar tal condición es producto de identificar el sentido humanista y la fuerza de las ideas recogidas en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y contrastarla con la extinta Constitución de 1961.



De una Constitución que se elaboró y aprobó en 1961 entre cuatro paredes por las cúpulas partidistas, se pasa a una Constitución elaborada en 1999 por el Poder Constituyente Originario y aprobada en Referendo nacional con participación masiva.



De una Constitución con un Estado indefinido, se pasa a una Constitución que establece un Estado democrático y social de Derecho y de Justicia.

De una Constitución para la democracia representativa definida por la capitalista Carta Democrática de la OEA, se pasa a una Constitución para la Democracia Participativa y Protagónica del pueblo.

De una Constitución que establecía derechos sociales, que por ambigüedades intencionales, eran violados por el Estado, se pasa a una Constitución donde los derechos sociales respaldan las demandas sociales, jurídicas, políticas, económicas y culturales de la sociedad, estableciendo una nueva relación ciudadana para la satisfacción de tales demandas.

De una Constitución que permitió al capitalismo salvaje la aplicación de políticas para la precarización del trabajo, así como la privatización de la educación, la salud y las empresas estratégicas, asi como la eliminación de las prestaciones sociales, la estabilidad y dignidad en el trabajo, se pasa a una Constitución que reconoce a la educación y al trabajo como los procesos fundamentales para alcanzar los fines del nuevo Estado, al mismo tiempo que protege las empresas estratégicas y en consecuencia garantiza las prestaciones sociales, la estabilidad laboral, elimina la tercerización como forma de esclavitud y ademas de garantizar la educación gratuita y de calidad, hace posible la municipalización del servicio de salud.

III.

Por estas y otras razones, es evidente que la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela es un plan de lucha contrario al capitalismo, es un plan de lucha socialista.

Basándose en esta Constitución, el gobierno ha ejecutados políticas de inclusión en los sectores de educación, salud y vivienda, bajo la figura de Misiones Sociales para beneficiar a millones de ciudadanos y ciudadanas. Con lo cual se derrota al capitalismo en esos espacios.

La Constitución ha servido para construir el Poder Popular: Comités de Tierra Urbana, Consejos Comunales con sus comités e iniciar la construcción de las Comunas rumbo al Estado Comunal.

También para combatir al capitalismo con políticas de inclusión social como:

· Eliminación de la Tercerización en el trabajo.

· Gran Misión en Amor Mayor: Pensiones de Vejez para toda la población

· Misiones Educativas: Robinson, Ribas, Sucre

· Misión Barrio Adentro I, II y III.

· Gran Misión Vivienda Venezuela.

· Misión Milagro nacional e internacional.

La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela establece un modelo de Estado, un tipo de Democracia y unos derechos sociales que fácilmente pueden alinearse para generar y aplicar unas políticas sociales que garanticen, la victoria en una la lucha contra el capitalismo y el tránsito hacia el Socialismo.

Por todo esto es entendible que los voceros del capitalismo estén hablando de una Constituyente para cambiar la Constitución Bolivariana, lo que no dicen es que quieren una Constituyente para sembrar el Capitalismo en una Carta Magna.


La Constituyente que pregonan los Capitalistas no pasará.