Las leyes desaplicadas a tiempo pudieran estar generando en nuestro país un escenario teatral perfectamente legible como un Estado sin ley, desgobernado, anárquico e indolente ante tantas víctimas causadas por un puñado de desadaptados.
Es como si las autoridades que controlan casi todas las Alcaldías, casi todas las Gobernaciones, que ha formado un Ejército Nacional defensor del pueblo y no de una clase en particular, con una buena dosis de diputados limpiamente electos, con un Poder Ejecutivo electo en libres y transparentes comicios, con un poder Judicial mayoritariamente comprometido con los ideales de Hugo Chávez, con un Poder Ciudadano controlado en 66%, con un Estado que aparentemente viola o deja violar el # 2 del Art. 156 (Cap. II, Título IV de la CRBV), un gobierno así, inferimos, no tendría otra lectura internacional, aunque inducida, que se le haga ante tantos muertos pendientes de justicia oportuna, ante tantos desafueros, tanto libertinaje comercial con un comercio que a diario, a cada hora especula de lo lindo con crasas violaciones a las disposiciones del Banco Central de la República, con cuantiosos daños al patrimonio de las personas y al patrimonio nacional.
De manera que un gobierno así que está permitiendo un estrés in crescendo, así también debería estar considerando que con tanta falta de gobierno efectivo, oportuno y contundente, podría estar dando motivos para una intervención extranjera, si es que nuestras alianzas con tantos países dejan de servir de férula eficaz contra las habituales arremetidas imperialistas de la burguesía internacional.