Mi crecimiento político sin duda alguna se los debo a los partidos políticos; mi primera experiencia fue cuando pequeño en el Movimiento al Socialismo (MAS), cuando era un partido alternativo y de izquierda popular (hoy da lastima traicionando al pueblo). Cuando estaba medio despertando a la política milité en el Organización Renovadora Auténtica ORA) el primer partido de confesión evangélica. Aunque tuvo más contenido que el partido de Rosales (Un Nuevo Tiempo) su fracaso se debió al ser de línea de derecha. Luego cuando ya me comenzó a quemar la revolución por dentro entré a la Causa Radical (CAUSA R) donde comencé a crecer ideológicamente. Lamentablemente la derecha infiltrada la dividió naciendo el partido Patria Para Todos (PPT), partido que hasta a principios de año milité con disciplina. Mucho antes de volver al PPT busqué militar en el Movimiento Quinta República (MVR) pero ante su hermetismo no pude entrar.
Ese ha sido el camino recorrido en tantos años, mi formación ideológica se fue nutriendo gracias a los discursos, enseñanzas y ejemplo del presidente Chávez. Su Aló Presidente, cadenas y eventos ha sido para mí en particular una tremenda cátedra ideológica. Sus enseñanzas de historia venezolana y latinoamericana, sus reflexiones ideológicas, su gestión, las misiones, sus victorias ante la arremetida de la contrarrevolución fue modelo, pedagogía pura. Sin desmerecer lo que se aprende dentro de las dinámicas de los partidos de izquierda.
Pero muchas cosas me desanimaron con respecto a la militancia partidista. Mucho comportamiento cuarto republicano; por ejemplo la dirigencia llega a tomar actitudes de aislamiento y cierta oligarquía. Las divisiones internas, las rencillas. Esa manera de estar viendo a los camaradas de otros partidos del proceso como competencia.
A mi parecer la propuesta del presidente Chávez es bien acertada. Un partido único. Un movimiento que aglutine a todos los sectores llámese partidos, grupos electorales, movimientos sociales, misiones, grupos, etc. Un partido que siga una sola línea que pueda ser evaluado, formado, dirigido y que sobre todo tenga los intereses del pueblo más que de grupos. La importante de este proceso es poder integrar experiencias, capacidades, visiones, didáctica, como por ejemplo: La experiencia pedagógica y sistemática del PPT, la fuerza de convocatoria del MVR, la disciplina de PODEMOS, la moral del PCV, la pasión revolucionaria de UPV, el sabor de pueblo de los TUPAMARO, y así sucesivamente.
Esa forma de apreciarse la revolución por cuotas de poder solo pertenece a la estructura de la Cuarta República. Cada campaña electoral los partidos se movilizan en incrementar su militancia, según los resultados de los votos. Eso discrimina mucho y se ha visto, Si el PPT porque obtuvo 300 mil votos y el MVR 3 millones, éste es más importante que el PPT. Que sí en una concentración se vio más el color rojo que el color morado de PODEMOS signifique que ese partido está en mengua. Se cuentan por banderas el gallo rojo, se sectoriza en una marcha los partidos por colores. Eso tiene que quedar para el pasado. No todo el que se viste de rojo es del MVR porque éste lo tenga como color. O un partido moviliza es a su gente mientras la masa queda excluida de la actividad. Y es bueno hacer esta fusión inmediata para que en 7 años de gobierno revolucionario los partidos se adapten y no exista eso de que sí no me dejan participar, como partido, entonces se va solo en las elecciones.
Estamos en una nueva etapa revolucionaria, ya los Ministerios tienen que estar dependiendo más de un partido político que del pueblo.
Sencillamente uno lo ve siempre. El Ministerio de Educación es administrado por dirigentes de X partido, el otro Ministerio de tal partido, y así sucesivamente cuando la burocracia continúa galopante. Qué partido levantó la bandera de los cambios de estructuras como punto principal en una oferta electoral. No, se quiere ser revolucionario pero con las mismas estructuras. ¡Cuotas de poder!.
Ahora, una participación directa del pueblo en la forma de incidir en la administración de los Ministerios conlleva formación ideológica, disciplina, sistema, flexibilidad, sinceridad, unidad. No es que la pelea sea ¿Cuáles dirigentes deben coordinar ese único partido?. A mi parecer y deacuerdo a la estructura que se debata, los dirigentes de cada uno de los partidos y movimientos deben coordinar las áreas donde el partido más se destacó. Si el PPT tuvo una excelente gestión en la educación, la cultura y el deporte allí debe trabajar, debe integrar, coordinar, formar al pueblo en esa área. Si otros dirigentes de X partido son efectivos y eficientes en la movilización del pueblo para actividades de calle, allí debe estar coordinadores que formé, crea estrategias y dinámicas en el área. Esto como un ejemplo.
Con respecto a la estructura la misma debe estar amoldada a las políticas y ejes del estado. Ejes en lo económico, en lo social, en lo jurídico, en la seguridad, en lo ideológico, etc. Tanto líderes y representantes de los sectores populares como de los partidos (que deben de dejar de exisitir) ha de crear estrategias para que la revolución sea más profunda y efectiva.
El Pueblo a de ser el partido, no debe haber diferencia entre el que fue líder de un partido al que fue líder de un sector popular. Es muy importante que la integración de líderes de la población entienda que nutrirse de la experiencia de muchos de los representantes de un partido es vital. No es que por ser pueblo va ahora a desplazar a dichos cuadros. Aquí se manejó mucha la tesis del antipartido, algo así como el chavismo sin Chávez.
Cómo se va a llamar ese partido único; que se debata con las masas. Partido Socialista Bolivariano de Venezuela podría ser una propuesta, surgirán muchas opciones. Lo importante es unificar las voluntades, las experiencias, las capacidades, la gerencia y lo ideológico.
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