Los relatos del absurdo improntados en el inconsciente colectivo de los seguidores de la oposición criolla y continental, luchan por legitimar una nueva retórica de presupuestos falsos, inscrita en la negación toda legitimidad del Gobierno Revolucionario, a partir del desconocimiento al nuevo mandato presidencial que comenzara el 10 de enero del 2019.
En ese sentido, a pesar de las continuadas derrotas del sector oposicionista y su extraordinaria propensión a la estupidez ilustra (ausentismo electoral, desconocimiento de las leyes y negación al orden constitucional) ellos no escarmientan, reflexionan o asumen que sus estrategias son inútiles, si no logran antes organizar y convencer a sus propios seguidores.
Ahora bien, mientras el oposicionismo insisten en la negación maniática de todo cuanto se diga o se haga desde las estructuras del poder constitucional del Estado, las fuerzas del poder popular organizado en el PSUV y sus aliados, gana el favorecimiento del pueblo organizado, prueba de ello es, los resultados de las pasadas elecciones municipales.
Dice el dicho popular: "De humanos es errar y de sabios rectificar" pero a decir de la idiotez reiterada, por el discurso y praxis del oposicionismo contra social, anti socialista, contra comunista, alérgico a lo comunitario y/o cooperativo, lo único que se les puede creer, es que la racionalidad y el espíritu de aceptación, reflexión y enmienda, allí no existe.
Para colmos de males, la arrogancia opositora que en desacato usurpa al poder legislativo, para el día 05/01 tienen como tarea anunciar el fin de la Revolución, reiterar el desconocimiento al mandato del Presidente Maduro y tal vez, imponer el retorno a la Constitución del 1961. Pues en seno de ese club de enemigos en el que se convirtió la Asamblea Nacional, se elegirá a algún aletargado con ínfulas de grandeza, como presidente del foro parlamentario, con el fin de asumir la conducción de la república de Venezuela, tal y como les enseño Pedro el Breve en el 2002.
Si no fuera por las nefastas consecuencias que tal nivel de locura oposicionista trae al país, seguramente con solo copiar y editar las estupideces que a diario cometen, ganaríamos un Oscar al mejor film del ridículo y el absurdo.
Ahora bien, a pesar de la conspiración y de la innegable guerra económica, política y social en la estamos gracias a la oposición irresponsable, no se puede negar que el Gobierno Bolivariano nos ha salvado del desastre total. Pues no es poca cosa la que hace a diario el Presidente Maduro para palear esta espantosa crisis inducida. Y no es poca cosa la que hacemos quienes le acompañamos desde el poder popular, en esta lucha al resistir y avanzar a contracorriente de las fuerzas del mal y sus aliados, en pro de la Paz.
Una breve mirada a la respuesta gubernamental bolivariana en materia económica interna, política internacional y alianzas geopolíticas, permite entender la dimensión extraordinaria que ha adquirido nuestra actual situación. Aquí se está debatiendo entre un mundo unidimensional y solo para los poderosos, versus, a un mundo de vida, con el cual se empodere las grandes mayorías que adolecemos de los insumos necesarios para la vida.
Lo que no dice los tanques de pensamiento de la derecha y sus aliados, es que ya es imposible negar el fracaso del modelo capitalista pues este es el único responsable de la pobreza en el planeta; la insatisfacción de las necesidades básicas para la vida y la depredación ambiental.
El año que viene, continuaremos desarrollando este debate. Por un lado Rusia, China y Turquía, avanzaran en el ajedrez planetario para contener las pretensiones imperiales de los EEUU. Y por el otro, amanecerá el 2019 y veremos como las placas tectónicas que a pesar de todo mantienen el equilibrio de los factores de poder, continuaran moviéndose reconfigurando los nuevos escenarios internacionales, donde Venezuela tendrá que navegar bajo la conducción invencible del Presidente Nicolás Maduro y el apoyo sustantivo de quienes con disciplina y lealtad desde el pueblo le acompañamos.
Para nadie es un secreto que a partir del 2019, es menester re interpretar el meta mensajes que emanan del poder mundial, con el fin de potenciar nuestro posicionamiento en un mundo dinámico que está en plena transformación.
Este año que se aproxima, pasaremos de la dicotómica visión de izquierdas y derechas, amigos y enemigos, a un tablero multifactorial que exige sumar todas las fortalezas posibles, sin más requisito que el hallazgo de coincidencias e intereses comunes con cada nación del mundo, incluyendo a aquellas, con las cuales hemos tenido distanciamientos hasta ahora.
Sigamos juntos y confiemos en el líder, en el conductor de victorias y su comando cívico militar. El seguirá siendo Presidente y nosotros seguiremos siendo revolucionarios. Hasta la victoria siempre.
