Votar en las elecciones programadas para el 6 de diciembre en Venezuela, es una acción heroica y de esperanza de sus habitantes, que se siente: perseguidos, amenazados, asediado, bloqueados y descalificado de lo que no somos y calificado de lo que tampoco somos. Ahora quienes nos descalifican y califican no son precisamente la virgen maría, quienes hacen esa labor de descalificar y calificar lo que no somos, son: las corporaciones mediáticas, la gran prensa mundial que tiene como objetivo defender el capital, el capitalismo, el liberalismo, el neoliberalismo y mediatizar la población, este es el contento y escenario donde vamos a votar los venezolanos en las próximos elecciones parlamentarias del 6 de diciembre 2020. Vamos a una confrontación entre el humanismo y el capital, no vamos a la elección de la reina de carnaval del Barrio de los sin techos de caracas. Es mucho pedir que el venezolano sepa que el gran capital, la burguesía, los apátridas y los que no tienen consciencia ni ubicación de clase, votaran por los candidatos a diputados que represente los intereses de: Donald Trump, imperio estadounidense, cartel de lima, Unión Europea y la delincuencia del diputado rastrojo Juan Guido, es decir ellos no votaran por los candidatos a diputado que presente el Chavismo.
La esperanza es un estado de ánimo optimista en el cual aquello que deseamos o aspiramos nos parece posible. En este sentido, la esperanza supone tener expectativas positivas relacionadas con aquello que es favorable y que se corresponde con nuestros deseos. La mitología griega explica el origen de la esperanza a través del mito de la caja de Pandora. Según cuenta la historia, Zeus, luego de que Prometeo le robara el fuego para dárselo a los hombres, se enfureció y regaló a Pandora, mujer del hermano de Prometeo, una caja donde estaban encerrados todos los males del mundo. Pandora, con una curiosidad innata infundida por los dioses, abrió la caja para ver su contenido y todos los males fueron liberados, pero la cerró rápidamente, quedando dentro únicamente la Esperanza. La esperanza, es el fundamento del amor mutuo entre los hombres.
La oposición al Presidente Nicolás Maduro, entró desde hacen varias semanas en una fase de desconcierto, después de meses de tensiones internas y con un liderazgo en deterioro por el desgaste. La fuga del terrorista Leopoldo López de Venezuela añadió incertidumbre al camino emprendido por el diputado rastrojo Juan Guaidó, quien no es presidente de la Asamblea Nacional, ni es un líder reconocido por la mayoría del pueblo venezolano, actualmente tiene una aceptación marginal ya no es la cara visible del antichavismo. El diputado rastrojo Juan Guaidó, sabe que muchos de sus aliados, más de 50 países que dicen que le reconocen como presidente interino de Venezuela, van reevaluar su posición cuando acabe el lapso legislatura el 5 de enero. El Consejo Nacional Electoral (CNE) anunció que más de 14.000 candidatos se postularon para 277 escaños, por 107 partidos.
En los últimos años, desde EE.UU. todos los Presidentes electos han atacado a Venezuela sin contemplación, en forma ilegal, criminal, vergonzosa. La Revolución Bolivariana vio a Bill Clinton, luego 8 años de George Bush y el golpe de Estado en 2002 y la conspiración; luego el emperador Barack Obama, quien firmó el decreto infame declarando a Venezuela amenaza para EE.UU. y abrió las puertas a la locura con 8 años de Barack Obama. Y ahora estos 4 años del demente Donald Trump. El bloqueo a la economía venezolana está anclado en una estrategia global de largo plazo, de carácter bipartidista que refleja el consenso de la élite supremacista de los Estados Unidos. Siempre hemos señalado que los partidos republicanos y demócrata solo coincidencia en su política exterior.