Del año 2010 al 2015 la asamblea nacional como organo colegiado, como espacio para el debate, la discusión y aprobación de leyes cónsonas a los intereses del pueblo, estuvo desplegado en lo que el comandante Chávez denomino, "Parlamentarismo de calle", que no es otra cosa, que un despliegue en el territorio de nuestros legisladores, a debatir, a escuchar, a reunirse, al contacto directo, al cara a cara y a informar, acción que permitirá que nuestra gente participe de las leyes en construcción, aporte y además esté informada de lo que se hace en el corazón legislativo venezolano.
Del 2015 al 2020, hubo un silencio legislativo, ni una ley fueron capaces de presentar al país, quienes en ese momento, habían ganado por mayoría esos curules. Ya esto lo hemos dejado claro. Hubo serpentinas, alcohol, lujuria, viajes, robo, autoproclama y usurpación, pero ni una sola ley que beneficiara al menos, a quienes votaron por ellos. En la calle solo se hablaba del fraude de esos diputados. Hubo resaca legislativa.
Arranca el 2021 y una nueva asamblea nacional se instala, ya con una propuesta de leyes a debatir. Algunas de esas propuestas salen a la discusión colectiva en el marco del parlamentarismo de calle; Ley de ciudades comunales, Ley de Adultos Mayores , reforma de la ley de Zonas Económicas Especiales, ley del Agua, ley del Gas, ley de Simplificación de Trámites Administrativos, ley Contra la Violencia y Trato Cruel a los Animales, entre otras.
Aquí lo importante es que nuestro pueblo, el ciudadano y la ciudadana se familiaricen con las leyes desde el parlamentarismo de calle. La Prof. Diputada Emérita Mirian reyes en Guayana, hablaba de caravana legislativa.
Ahora bien, la Revolución de Hugo Chávez que dirige Nicolás Maduro se ha empeñado en el ascenso social del pueblo, los primeros años, así se evidencio y así estaba enmarcado en el proyecto originario; a cada quien según sus necesidades y de cada quien según sus capacidades. La oposición se empeñó en enlodarlo todo, así como enlodados están ellos. Sin embargo, en el planteamiento del comandante Chávez, está la construcción del hombre nuevo en base a la tesis de la redención social que no es otra cosa, que levantar el castigo, pero el castigo social que nos tenían adecos y copeyanos y el castigo económico que nos tiene hoy la oposición neurótica. Sin dejar de lado el castigo legislativo que hubo desde el 2015.
Hoy nuestros diputados y diputadas andan desplegados en el parlamentarismo de calle, escuchando, atendiendo, ayudando al ejecutivo, aportando a la revolución, debatiendo con la gente y esa es la tarea. Que nadie se asuste, que nadie se desespere, que nadie se sugestione, que a nadie lo ataque la presbicia política con este despliegue, si creo que debemos sumar fuerzas para ayudar al presidente en cada rincón de este país para poder salir adelante, avanzar y lograr el sueño del comandante Chávez; la regeneración social.
A LO INTERNO: Suero antiofídico por favor!
