Elecciones 21 de noviembre 2021, inicio de la recuperación económica, política y social de Venezuela. Como venezolanos debemos hacer un llamado a la Comunidad Internacional al respeto de la soberanía y autodeterminación de los Pueblos, y solicitar su intermediación para que cese el bloqueo, económico y las sanciones unilaterales a las que han sometido a nuestra República. La complicidad es mala concejera no es sinónimo de solidaridad, el asedio, la ingratitud, el bloqueo, llamado también aplicación sistemática, sostenida e intencionada de medidas coercitivas unilaterales por parte de Gobiernos con complejos imperiales como EE.UU. y la Unión Europea. Pero también como venezolano debemos reiterar nuestra disposición solidaria y pacífica de trabajar con todas las naciones del mundo, de manera amigables por un sistema de alimentación consecuente con los objetivos de la agenda 2030.
El año 2020 y lo que va del año 2021, representa históricamente el escenario de la pandemia de Covid-19, y del bloqueo criminar en contra del pueblo venezolano, dirigido y ejecutado por los EE.UU, y la Unión Europea, con aliados cómplices de crímenes de lesa humanidad, con un balance aterrador a escala planetaria, en términos de contagios y de víctimas. En ese panorama de espanto, las cifras que presenta Venezuela son muy alentadoras, muy positivas, se sitúan entre las mejores del mundo, con la tasa de recuperación más elevada del planeta, a pesar de los bloqueos y de las medidas coercitivas unilaterales impuestas, en contra del pueblo venezolano, por las autoridades estadounidenses y europeas. Las elecciones de noviembre 2021, representa el inicio de la recuperación de la Patria venezolana desde los vértices: económico político y social.
En Venezuela existe un sistema público de salud gratuito y de calidad construido en revolución, a pesar de la persecución y de las sanciones criminales que nos impiden comprar equipos médicos en el mundo; y que nos impiden adquirir, de manera natural, las medicinas que necesita el país, que ha logrado mantener y perfeccionar el sistema público de salud fundado por el comandante Hugo Chávez. La ‘Misión Barrio Adentro’ fue el primer paso para construir nuestro sistema primario de medicina familiar con más de 14.000 ambulatorios, con el médico de familia. Todo eso con el apoyo de Fidel Castro, y de Cuba, desde hace dieciséis años, miles de médicos, médicas y personal sanitario cubano. Entre tanto, desde la dirección correcta del gobierno Chavista, hemos logrado formar también a miles de médicos, médicas, enfermeras y enfermeras. Los resultado obtenidos por el pueblo venezolanos frente a la pandemia del covid-19, se debe a la preparación que hemos logrado durante 18 años del sistema de salud venezolano con la ayuda prestada de la revolución cubana.
La guerra psicológica, tiene sus efectos en el País, hace daño a la población, la desmoraliza, recordemos cuando, en marzo pasado, Venezuela empezó a enfrentar la Covid-19, recuerdo artículos de opinión del: Miami Herald, de los diarios El País y ABC de España, del New York Times, que pronosticaban y se preocupaban hipócritamente, como siempre con Venezuela, del colapso de la pandemia del covid-19, de la sociedad venezolana, daban cifras verdaderamente aterradoras, trágicas del sistema de salud venezolano. En marzo, cuando ya se supo que era una pandemia, activamos todos los mecanismos de la medicina preventiva movilizamos a más de 16.000 brigadas médicas que aún se mantienen activa que permite buscar los casos con las pruebas de PCR y las pruebas rápidas. Los resultados son producto de un sistema de salud que estaba en funcionamiento antes que llegara la pandemia del covid-19. Estos antecedentes en materia de salud son los que garantizan tener la tasa de recuperación más alta del planeta de la pandemia covid-19.