El presidente Nicolás Maduro ha señalado, varias veces, que su presidencia se fundamenta en la legalidad y, en especial en todo lo que determine la CRBV. "Dentro de la Constitución todo, fuera de la Constitución nada", esto lo ha afirmado en reiteradas oportunidades.

La derecha venezolana, en la cual encontramos una variedad de contradicciones, podemos ver: un sector de vende patria y traidores; otra parte, mercenaria y violenta, así como un tolete traficante de ideas y servil; finalmente un grupo de negociadores, aparentemente respetuosos de la CRBV.

Sin embargo, vemos y sabemos que todos estos pedazos, con sus jefezuelos, obedecen las líneas emanadas del imperio norteamericano, el cual cuenta con el apoyo de ciertos países serviles y agresores de la Unión Europea.

Esta oposición desintegrada se viene reuniendo, en su afán de solicitar un Revocatorio del presidente de la República, todo esto con fundamento en el artículo 72 de la CRBV. Es claro, para estos casos, si sirve la Constitución de Venezuela.

El presidente Maduro ha salido al paso y, con firmeza, todos unidos podemos señalar, desde múltiples rincones de Venezuela, que queremos acompañar al presidente, estamos dispuestos a enfrentar este pedimento; lo único que exigimos es que se cumpla con lo pautado en el artículo 72 de la CRBV.

En tal sentido, debemos destacar que la derecha venezolana, previo a accionar con este pedimento, debe reconocer ante los organismos internacionales y, ante su patrón: el imperio gringo, que el presidente de Venezuela, a quien se le pide el Revocatorio, se llama Nicolás Maduro Moros.

Queremos señalar que asumimos el artículo 72 constitucional, el cual señala que: "Todos los cargos y magistraturas de elección popular son revocables.

Transcurrida la mitad del periodo para el cual fue elegido el funcionario o funcionaria, un número no menor del veinte por ciento de los electores o electoras inscritos en la correspondiente circunscripción podrá solicitar la convocatoria de un referendo para revocar su mandato…"

De acuerdo a esto y tomando en consideración que el Consejo Nacional Electoral tiene registrados más de 21 millones de electores, se determina que la mercenaria oposición en Venezuela debería presentar un listado con más de 4.200.000 firmas, quienes piden o apoyan la solicitud del revocatorio presidencial.

Luego debemos tener en cuenta que el ciudadano Nicolás Maduro, fue electo presidente de la República, en el 2018, siendo elegido por una población de 6.248.864 votantes. Esto implica, siguiendo lo señalado en el artículo 72 constitucional que:

"…Cuando igual o mayor número de electores y electoras que eligieron al funcionario o funcionaria hubieren votado a favor de la revocatoria, … se considerará revocado su mandato y se procederá de inmediato a cubrir la falta absoluta conforme a los dispuesto en esta Constitución y en la Ley…"

Si entendemos bien lo señalado, la tarifada y apátrida oposición deberá contar, para este proceso, si es que insisten en el llamado revocatorio, que deben mantener contacto y llamar a votar por el Revocatorio de Nicolás Maduro, a más de 6.248.864 de votantes; es decir, igual o más de los votos con que ganó Maduro; si es que pretenden que su pedimento tenga sentido.

Entendemos que en Venezuela hay algunas personas cegadas por "la minguada, balurda y absurda política que desarrolla Guaidó y sus tarifados"; es triste decirlo, no sabemos cómo alguien meridianamente serio asume o apoya a una persona, famosa por mostrar las nalgas, quien entiende de negocios, pero carece de criterio político.

Sabemos que hay algunos compatriotas disgustados con la gestión que viene desarrollando el gobierno. Sabemos de algunos militantes molestos con la política económica que implementa Maduro; entendiendo que hasta ahora es que ha dado un resultado algo positivo.

Sin embargo, Maduro fue elegido presidente por un mandato de seis años y durante estos tres años se ha enfrentado a una y mil batallas. Enfrentando al imperio, sus secuaces de la Unión Europea, la traición de algunos gobiernos de América: Chile, Brasil, Colombia y otros, en menor medida, los cuales tienen como tarea atacar y atacar a Venezuela. Además, de una oposición irracional, estafadora que ha llegado al extremo de clamar por una invasión a la Patria.

Es lamentable los acontecimientos de Chile, donde cientos de estudiantes fueron atacados, asesinados, cegados y golpeados; lo mismo se percibe en Colombia y en Brasil. La realidad es bastante triste y delicada, vienen generando problemas sin entender lo que pasará dentro de unos años. No les importa el futuro, solo el día de hoy y para ello trabajan para volverse ricos a costillas de la pobreza del pueblo. El mismo estilo del facho Macri en Argentina.

Estos gobiernos serviles y estafadores, olvidan el cerco y las sanciones de la cual es víctima Venezuela, por un imperio, sin asumir que esto es violatorio del Derecho Internacional. De todas formas, muchos países en el mundo perciben la realidad y ven de soslayo, como un imperio utiliza su poder para destruir un país digno y bravío.

Ante esta realidad el presidente Maduro ha dicho "Si, acepto el reto, llamen a un Referendo y nos enfrentaremos, cuando lo decida el CNE bajo las leyes, las normas y contando siempre con lo que dictamine la CRBV". Bajo estos preceptos, esperamos que la oposición, como ente tarifado y sin criterios políticos, acepten las normas que desde allí se emanen.

Venezuela sigue creciendo y este pedimento mercenario, no podrá frenar el avance, que pronto veremos en la patria de Bolívar y Chávez. El Socialismo es el camino visible, posible y verdadero para salvar la humanidad.

Nicolás Maduro, como presidente acepta el reto y nos enfrentaremos a la derecha y a sus cómplices internacionales. Es el reto que el pueblo revolucionario asume contra una oposición entreguista, mercenaria y vende patria.

El Pueblo tiene la verdad y a él nos debemos, bajo los parámetros de nuestros grandes precursores, la Patria marca el camino hacia el Socialismo. Venezuela seguirá marchando para asumir el Socialismo como razón histórica.