Recientemente ( en la fase posterior al referéndum del 2D ) la Asamblea Nacional Aprobó el PLAN NACIONAL DE DESARROLLO ECONOMICO-SOCIAL SIMON BOLIVAR 2007-2013, el cual había sido entregado meses atrás a dicha asamblea por el Cdte. Chávez.
Apenas conocido esta aprobación, la contrarrevolución enfiló sus baterías contra este plan, descalificándolo como un intento de avanzar hacia el socialismo por otra vía que no sea la reforma. De allí que se pueda prever para el 2008 un duro enfrentamiento con el imperio y sus socios, ahora teniendo como foco de ataque el plan de desarrollo.
Por ello, considero esencial difundir y discutir los contenidos programáticos del plan 2007-2013, como parte de un rearme ideológico rumbo al socialismo. A parte del debate necesario, con las líneas estratégicas que se definen más adelante, se deben ejecutar planes y proyectos, que en lo cotidiano y en ámbito territoriales específicos ( Yanama – Cumbe ) concreten un modo de vida distinto al capitalismo.
Este planteamiento nos permite trascender los riesgos y amenazas de las posturas derrotistas o desmoralizantes y al mismo tiempo enlazar hacia el futuro con la propuestas alternativas que se han venido impulsando y concretando en la revolución bolivariana.
En otros artículos ( “Evaluación preliminar de los resultados del referéndum” y “teoría crítica y la evaluación del referéndum” publicados en Aporrea. Org )hemos delineado aspectos que tienen que ver con la crítica y la autocrítica, pero ahora creo pertinente enfatizar los diversos aspectos que son como nudos críticos en la “batalla de ideas”, que se puedan traducir en líneas de reflexión y de debate para los revolucionarios en el futuro inmediato y en la prospectiva estratégica que demanda la transición socialista.
En esa dirección, nos planteamos correlacionar el enfoque y los objetivos del Plan de Desarrollo Simón Bolívar con las TESIS DEL SOCIALISMO REVOLUCIONARIO que elaboramos en el año 2006, particularmente aquello que tiene que ver con el ámbito cultural y educativo.
Inicialmente vamos a realizar una reseña parcial del PLAN DE DESARROLLO ECONOMICO-SOCIAL SIMON BOLIVAR, haciendo énfasis en 4 tópicos del mismo ( Nueva Ética Socialista, Suprema Felicidad Social, Democracia Protagónica revolucionaria, Modelo Productivo Socialista ) y focalizando la atención en el enfoque, es decir, obviar los objetivos, políticas, proyectos, según la nomenclatura del plan.
I. NUEVA ÉTICA SOCIALISTA
Enfoque 1
La plena realización del Socialismo del siglo XXI que estamos inventando y que solo será posible en el mediano tiempo histórico pasa necesariamente por la refundación ética y moral de la nación Venezolana. Tal refundación supone un proyecto ético y moral que hunde sus raíces en la fusión de los valores y principios de lo más avanzado de las corrientes humanistas del socialismo y de la herencia histórica del pensamiento de Simón Bolívar. Su fin último es la suprema felicidad para cada ciudadano. La base de este objetivo fundamental descansará en los caminos de la justicia social, la equidad y la solidaridad entre los seres humanos y las instituciones de la República.
La necesidad del nuevo proyecto ético Socialista Bolivariano parte de la constatación de una realidad cuyos rasgos dominantes son:
La confrontación entre un viejo sistema (el Capitalismo) que no ha terminado de fenecer, basado en el individualismo egoísta, en la codicia personal, y en el afán de lucro desmedido, y un nuevo sistema (el Socialismo) que está naciendo y cuyos valores éticos, la solidaridad humana, la realización colectiva de la individualidad y la satisfacción racional de las necesidades fundamentales de hombres y mujeres, se abre paso hacia el corazón de nuestra sociedad.
La pobreza material y espiritual en la cual permanecen aún millones de venezolanos, por lo mismo, imposibilitados de satisfacer sus necesidades primarias y desarrollar la espiritualidad inherente a toda persona.
La sustitución de la cultura del trabajo creador y productivo por la subcultura de la corrupción y el soborno como medios de acelerada acumulación de bienes y riqueza monetaria, extendida en importantes sectores de la sociedad.
El uso y la promoción de la violencia sicológica y material que los medios de comunicación utilizan como factor para configurar en la subjetividad del ciudadano, la convicción de la imposibilidad de vivir en paz, en democracia y en la confianza de que es posible la realización común.
El proyecto ético Socialista Bolivariano tiene como misión la superación de la ética del capital, y se centra en la configuración de una conciencia revolucionaria de la necesidad de una nueva moral colectiva, que solo puede ser alcanzada mediante la dialéctica de la lucha por la transformación material de la sociedad y el desarrollo de la espiritualidad de los que habitamos en este hermoso espacio de tierra que es Venezuela. Tal dialéctica debe llevarnos a fundar la convicción de que si nosotros mismos no nos cambiamos, de nada valdría cambiar la realidad exterior.
En esta dialéctica del proyecto ético Socialista Bolivariano aparecen varios desafíos:
a. La necesaria superación positiva de la miseria y la pobreza material y espiritual que garantice la realización de la ética y no su anulación. Está claro que el estado de necesidad permanente anula cualquier posibilidad real del ser ético
b. La construcción de un Estado ético, vale decir, de una nueva ética del hecho público. Un Estado de funcionarios honestos, eficientes que más que un altar de valores, exhiban una conducta moral en sus condiciones de vida, en la relación con el pueblo y en la vocación del servicio que prestan a los demás. Un Estado del cual se sienta parte el ciudadano. El Estado está llamado a ser el espacio ético por excelencia, si no lo es, el ciudadano no tendrá motivo para serlo.
c. Civilidad: la virtud por la que los ciudadanos se hacen responsables de la vida pública. Ningún ciudadano quiere ser súbdito ni vasallo, si no señor de la República. Política de los ciudadanos
d. Creación de una institucionalidad cuyo valor supremo sea la práctica de la justicia y la equidad. Que frente a la dialéctica del derecho y la justicia sean capaces de decidir por la justicia, sin minar las bases del derecho.
e. Tolerancia activa militante en un medio plural donde conviven distintas religiones, distintas culturas, distintas concepciones de la vida. La tolerancia asume las diferencias y las respeta.
“ II. SUPREMA FELICIDAD SOCIAL
Enfoque 2
a. La suprema felicidad social es la visión de largo plazo que tiene como punto de partida la construcción de una estructura social incluyente, formando una nueva sociedad de incluidos, un nuevo modelo social, productivo, socialista, humanista, endógeno, donde todos vivamos en similares condiciones rumbo a lo que decía Simón Bolívar: la suprema felicidad social.
b. Las bases de las políticas de la construcción de una nueva estructura económica y social incluyente están contenidas en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en las tradiciones de lucha del pueblo venezolano y en la voluntad política del actual gobierno de avanzar hacia la construcción del socialismo.
c. Las relaciones sociales de producción del socialismo están basadas en formas de propiedad social, que comprenden la propiedad autogestionaria, asociativa y comunitaria; permaneciendo formas de propiedad individual y pública.
d. La estructura social está conformada por un entramado de relaciones sociales permanentes y recurrentes, que ordenadas jerárquicamente en cuanto al poder, la riqueza, el conocimiento y el prestigio, determinan situaciones diferenciadas en la satisfacción de las necesidades sociales y en la distribución de la riqueza y del ingreso.
e. La estructura social de Venezuela está en proceso de transición hacia una formación económico social más incluyente, porque el gobierno está ejecutando, especialmente con las Misiones, un proceso de inclusión social masivo y acelerado, financiado por la nueva forma de utilizar la renta petrolera, lo que ha permitido avanzar en la cobertura y la universalización en la satisfacción de necesidades de identidad, alimentación, salud, educación, vivienda y empleo.
f. A la diversidad biológica, de edad, étnica y de género se le han sobrepuesto históricamente desigualdades sociales, reproducidas por un Estado al servicio de los intereses del capital en detrimento del trabajo, que han contribuido al aumento de las limitaciones en las capacidades individuales y colectivas, requeridas para el disfrute de los derechos humanos y sociales. La política de inclusión económica y social forma parte del sistema de planificación, producción y distribución orientado hacia el socialismo, donde lo relevante es el desarrollo progresivo de la propiedad social sobre los medios de producción, la implementación de sistemas de intercambios justos, equitativos y solidarios contrarios al capitalismo, avanzar hacia la superación de las diferencias y de la discriminación entre el trabajo físico e intelectual y reconocer al trabajo como única actividad que genera valor y por tanto, que legitima el derecho de propiedad. Todo orientado por el principio de cada cual según su capacidad, a cada quien según su trabajo.
g. La satisfacción de las necesidades sociales está vinculada con el sistema de producción-distribución de bienes y servicios, porque sólo en la medida en que los trabajadores en Venezuela contribuyan con la producción de la riqueza social según sus capacidades, con el desarrollo de sus potencialidades creadoras, aumentan las probabilidades de satisfacer las necesidades sociales. Y, el principio a cada quien, según sus necesidades se basa en la calidad de la satisfacción, comenzando por satisfacer las necesidades sociales básicas y superar las brechas y déficit persistentes.
h. La inclusión social adquiere su más elevado desarrollo cuando el modo de atención es personalizada para los grupos sociales en situación de máxima exclusión social y está orientada hacia el autodesarrollo de las personas, las comunidades y sus organizaciones, lo cual implica prácticas democráticas, responsables y autogestionarias, por parte de los involucrados.
III. DEMOCRACIA PROTAGÓNICA REVOLUCIONARIA
Enfoque 3
La democracia protagónica revolucionaria es la expresión genuina y auténtica de la verdadera democracia.
Los espacios públicos y privados se consideran complementarios y no separados y contrapuestos como en la ideología liberal.
Es necesario que los individuos se organicen para lograr las ventajas que otorga la asociación cooperativa, es decir, transformar su debilidad individual en fuerza colectiva, teniendo en cuenta que el establecimiento de la organización no implicará menoscabo de la independencia, autonomía, libertad y poder originario del individuo.
Los ciudadanos personificaran y ejercerán siempre los mecanismos sustantivos del poder político, es decir, conservarán siempre su poder y su soberanía, la cual está siempre orientada el bienestar de todos, con los principios de igualdad y libertad.
El cambio debe estar orientado a poner de relieve los elementos en común, que permitan construir una comunidad, no individuos aislados y egoístas atentos a imponer sus intereses a la comunidad, a esa entidad - la comunidad - se entrega todo el poder originario del individuo, lo que produce una voluntad general, en el sentido de un poder de todos al servicio de todos, es decir, sustentado moral y colectivamente, lo que obliga a que la conducta de los asociados, aunque tengan intereses particulares, (voluntades particulares), para poder ser moral deberá estar guiada por la justicia, es decir, por principios de igualdad —única manera de fortalecer el cuerpo político colectivo-, y de libertad.
Dado que la soberanía reside en el pueblo, este puede por sí mismo dirigir el Estado, sin necesidad de delegar su soberanía, tal como en la práctica sucede con la democracia representativa o indirecta, esta dirección del Estado está indisolublemente unida a la búsqueda del bien común, y no como en la democracia representativa en la que, bajo la argucia de la libertad individual, con el camuflaje de la “igualdad de oportunidades” y el acicate de la competitividad, se legitima el interés de grupos minoritarios contrapuestos al interés general de la sociedad.
La democracia participativa, es la soberanía popular la cual se hace tangible en el ejercicio de la voluntad general, la cual no puede enajenarse nunca, y el soberano, que no es sino un ser colectivo, no puede ser presentado más que por sí mismo: el poder puede ser transmitido pero no la voluntad. La consecuencia es lógica: si la soberanía reside en el pueblo y éste acepta obedecer a un poder distinto, por ese mismo acto se disuelve como pueblo y renuncia a su soberanía.
La soberanía popular, reunida en asamblea pública de ciudadanos, (Asamblea Constituyente) única depositaria legítima del poder legislativo, la Soberanía no puede ser representada, la voluntad no admite representación.
a. Para alcanzar mayor solidez de la democracia protagónica revolucionaria se hace necesario restituir a la política su carácter público, participativo, ético y solidario, cuyo principal sentido es la constitución de la ciudadanía, los espacios de civilidad, las instituciones y una cultura política democrática, basada en una elevada conciencia social ética y en una activa y consciente participación ciudadana. Se trata de rescatar la política como mediación para la vida humana vital, a través de su sentido de solidaridad y de la búsqueda del bien común.
b. El poder político será utilizado como palanca para garantizar el bienestar social y la igualdad real entre todos los miembros de la sociedad. Por eso, la justicia está por encima del derecho y la ley, aunque los presupone. Se garantizan las condiciones materiales para el ejercicio real de los derechos a la educación, la salud, el trabajo, la recreación, aunque el ciudadano no tenga dinero con que pagarlos.
c. El ejercicio de la soberanía se realiza a través de la participación ciudadana en todos los ámbitos de la actividad legislativa y en la toma directa de decisiones para la dirección del Estado en todos los niveles de éste: nacional, regional y local. El ciudadano puede delegar su poder, pero no su soberanía. Por eso, cuando el funcionario a quien delega dicha función se aparta de ella, puede destituirlo a través del referéndum.
d. Enfrentar la corrupción mediante sanción ejemplarizante a los corruptos, promover una conciencia ética, legislar con equidad y severidad, crear los mecanismos expeditos para la participación contralora de la sociedad y como forma determinante de su participación.
e. La integración, comunicación y coordinación entre las diversas organizaciones populares es determinante para el logro pleno de la democracia protagónica revolucionaria.
f. El espacio para la participación protagónica debe seguir siendo conquistado y mantenido por las organizaciones populares.
g. Es necesario mantener la coherencia entre el discurso sobre la democracia protagónica revolucionaria, por una parte, y el proceder de todas las instituciones de la sociedad, por la otra, de esa manera, aunado al continuo incentivo de los valores democráticos, se estará garantizando el mantenimiento del poder popular de las venideras generaciones.
h. Promover el control social de la población hacia los medios de comunicación masivos
i. Fomentar la utilización de los medios de comunicación como instrumento de formación
j. Universalizar el acceso a los diferentes tipos de comunicación
IV. MODELO PRODUCTIVO SOCIALISTA
Enfoque 4
La producción en la búsqueda de lograr trabajo con significado se orientará hacia la eliminación de la división social del trabajo, de su estructura jerárquica actual y a la eliminación de la disyuntiva entre satisfacción de necesidad y producción de riqueza. El modelo productivo responderá primordialmente a las necesidades humanas y estará menos subordinada a la reproducción del capital.
La creación de riqueza se destinará a satisfacer las necesidades básicas de toda la población de manera sustentable y en consonancia con las propias exigencias de la naturaleza en cada lugar específico.
El estado conservará el control total de las actividades productivas que sean de valor estratégico para el desarrollo del país y el desarrollo multilateral y de las necesidades y capacidades productivas del individuo social.
Esto conlleva identificar cuál modo de propiedad de los medios de producción está mayormente al servicio de los ciudadanos y quienes la tendrán bajo su pertenencia para así construir una producción conscientemente controlada por los productores asociados al servicio de sus fines.
a. Establecer un Modelo Productivo Socialista con el funcionamiento de nuevas formas de generación, apropiación y distribución de los excedentes económicos y una nueva forma de distribución de la renta petrolera, lo que será el reflejo de un avance sustancial en el cambio de valores en el colectivo, en la forma de relacionarse los individuos con los demás, con la comunidad, con la naturaleza y con los medios de producción.
b. La dirección a seguir, por encima de lo urgente y lo inmediato, responderá a las preguntas sobre cómo será posible:
∗ Cohesionar las fuerzas sociales en productores asociados, haciéndolas responsables de prácticas productivas y administrativas autogestionadas
∗ Sustituir la concentración y centralización de la toma de decisiones por una genuina autonomía descentralizada que alcance hasta las comunidades locales.
c. El Modelo Productivo Socialista estará conformado básicamente por las Empresas de Producción Social, que constituyen el germen y el camino hacia el Socialismo del Siglo XXI, aunque persistirán empresas del Estado y empresas capitalistas privadas.
d. Son Empresas de Producción Social (EPS) las entidades económicas dedicadas a la producción de bienes o servicios en las cuales el trabajo tiene significado propio, no alienado y auténtico, no existe discriminación social en el trabajo y de ningún tipo de trabajo, no existen privilegios en el trabajo asociados a la posición jerárquica, con igualdad sustantiva entre sus integrantes, basadas en una planificación participativa y protagónica.
e. En las EPS los trabajadores se apropiarán del excedente económico resultante, que se repartirá en proporción a la cantidad de trabajo aportado; la gestión será democrática y participativa y el peso relativo de la participación será con base en la persona y no con base en el capital aportado.
f. Las EPS surgirán a partir de la multiplicación y crecimiento de experiencias exitosas de unidades asociativas existentes, de las que se establecen como resultado de la acción del Estado, y de la transformación de empresas del Estado o de empresas capitalistas privadas en EPS.
g. La nueva forma de generación y apropiación de los excedentes económicos, será productivamente eficiente y productora de bienes y servicios de calidad, de tal modo que compitan exitosamente con las empresas privadas capitalistas del país y de los otros países con los cuales se intercambian bienes y servicios.
h. Operará un tejido productivo entre las EPS, interconectado, que progresivamente abarcará el mayor número de actividades económicas, complementándose y apoyándose para beneficio colectivo de la comunidad y del pueblo en su conjunto.
i. La empresa del Estado dedicada a la explotación de los hidrocarburos, dada su extraordinaria capacidad de compra y contratación, alcanzará un papel fundamental en el desarrollo de las EPS, delegando progresivamente actividades productivas específicas en ellas, de acuerdo con el nivel de complejidad que requieren las tareas y las capacidades desarrolladas en el país y fomentando nuevas EPS que la conecten orgánicamente con el tejido productivo nacional. Otras empresas del Estado productoras de bienes básicos, participarán de las características indicadas para la empresa estatal de los hidrocarburos.
j. Las demás empresas del Estado se transformarán en EPS mediante diversas estrategias aplicadas según las características propias de los procesos productivos, de las condiciones económicas y del desarrollo organizativo de los trabajadores.
k. Se avanzará sustancialmente en la consolidación del carácter endógeno de la economía, mediante la utilización progresiva de los recursos del país, con visión de futuro y respeto a las generaciones por venir, y dando prioridad a la satisfacción de las necesidades del país.
l. Se desarrollarán los encadenamientos internos de las actividades económicas fundamentales, principalmente en las basadas en la existencia de materias primas y recursos naturales en el país, con la finalidad de potenciar la capacidad interna de producción de bienes y servicios.
m. Se diversificará el potencial exportador de bienes y servicios, una vez satisfechas las demandas internas, principalmente de aquellos basados en la existencia de materias primas y recursos naturales en el país, y con el mayor grado de elaboración posible, en tanto lo aconsejen adicionalmente las condiciones de los mercados externos. Para el comercio exterior, se hará énfasis en la complementación de los intercambios.
n. Se dispondrá de una acumulación suficiente de reservas e ingresos fiscales diversificados para enfrentar exitosamente las contingencias económicas.
o. Se hará un énfasis particular para impulsar el logro de un desarrollo tecnológico interno que posibilite la autonomía relativa de las actividades productivas y de servicios necesarias para alcanzar y sostener el desarrollo, mediante el fortalecimiento de la capacidad de innovar, importar, modificar y divulgar tecnologías orientadas primordialmente a la satisfacción de las necesidades humanas que, a su vez, favorezcan el desarrollo científico.
p. El desarrollo de un sistema de innovación se logrará mediante la consolidación de una estructura socio-institucional y legal, de capital social, de redes de agentes interesados, de conocimiento de las necesidades de la sociedad, de las experiencias alcanzadas y de los recursos necesarios. Contará con una cada vez mayor participación de los ciudadanos, para que aumente el conocimiento, y se reduzcan drásticamente las diferencias nacionales de acceso al mismo.
Veamos ahora, la conexión teórico-ideológica que posee los anteriores enfoques del Plan Simón Bolívar con la TESIS DEL SOCIALISMO REVOLUCIONARIO (Tesis 1, 2 y 3 ) en lo que tiene que ver con la ética socialista, el humanismo y la revolución cultura.
Para el pensamiento nuestra americano, esta nueva subjetividad se empalma con la idea de Corriente histórico-social, como expresión de nuestras raíces, tal como lo demandó José Carlos Mariátegui, cuando dijo:
“No queremos ciertamente, que el socialismo sea en América calco y copia. Debe ser creación heroica. Tenemos que dar vida con nuestra propia realidad, en nuestro propio lenguaje al socialismo indo americano”.
Para Mariátegui, esta creación heroica del socialismo implica una lectura no mecánica ni economicista del cambio revolucionario, sino que plantea revalorizar los contenidos de la revolución cultural: la construcción de una subjetividad que subvierta los valores burgueses. La constitución de los explotados como sujetos históricos, conlleva entonces el desarrollo de una estrategia global desde el punto de vista educativo, comunicacional y organizativo, que contempla:
- Considerar los contenidos de esta subjetividad de un punto de vista histórico, incorporando las tradiciones y luchas de explotados y oprimidos.
- De allí, la importancia de la diversidad étnica y la interculturalidad, articulada a la concepción clasista de la sociedad.
- Combate en el terreno de la superestructura institucional: escuela, fábrica y medios de comunicación, entre otros.
- Particular importancia tiene la identificación y promoción de la resistencia e insurgencia cultural.
Desde el ángulo de la corriente histórico-social, la creación heroica del socialismo y su originalidad en nuestra América está asociada a la riqueza socio-cultural en la que se apoya:
1.- Aporte de la resistencia indígena, la cual ha batallado durante más de 500 años para defender sus acervos y sus derechos ancestrales. Tupac-amaru, Guaicaipuro y otros héroes marcan el hilo de la corriente histórica que hoy renace bajo las premisas de la diversidad étnica y la interculturalidad.
2.- Contribución del cimarronismo afromericano marca otro hito de la lucha contra la esclavitud en sus diversos planos. El cumbe o el palenque son la expresión de aquella gesta emancipatoria, con sus mártires entre los que encuentran en nuestra tierra Negro Primero, el Negro Miguel y otros tantos.
3.- La herencia del bolivarianismo revolucionario, que ha resurgido con fuerza, derrotando el uso y abuso que hizo la oligarquía de nuestro libertador. La concepción de la patria grande, en la perspectiva continental, es parte del legado bolivariano que recorre a nuestra América.
4.- El testimonio de los cristianos comprometidos con la opción por los pobres, que no sólo se reduce a acción ecuménica, sino en la confrontación con las relaciones de poder del Estado opresor, como lo recogen los sacrificio e insurgencia de Monseñor Romero y Camilo Torres.
5.- La emergencia del marxismo crítico, con los aportes emblemáticos de Maríategui cuando reivindica el socialismo indoamericano y postula la creación original que no calca ni copia.
Nuestra tarea teórico-ideológica en los actuales momentos es construir una síntesis con los aportes de estas cinco corrientes, combatiendo el dogmatismo y el empirismo que perpetua nuestra dependencia del pensamiento eurocentrista.
En nuestra América encontramos un importante acervo cultural que puede ser plataforma en el terreno de los valores para enfrentar el proceso capitalista enajenador:
- Valores y actitudes solidarias en comunidades campesinas e indígenas.
- Modalidades de trabajo cooperativo como la callapa y el convite, como expresión del apoyo mutuo.
- Gastronomía popular y patrones de consumo saludables y en correspondencia con la producción local.
- Relación armónica con la naturaleza, que respeta el medio ambiente.
- Cultura del ahorro y del trabajo creador.
- Formas de comunicación auténtica, centradas en la conversa y el valor de la palabra.
- Formas de ocio y de recreación donde se dignifica la naturaleza y la persona humana.
- Valoración de lo público como espacio de encuentro ciudadano, como suelen ser las plazas y otros patrimonios arquitectónicos de los pueblos.
- Sueños y esperanzas, animados por la religiosidad popular.
- Fibra patriótica que se enraíza en las gestas y luchas independentistas.
Reivindicando estos acervos socio-culturales, se hace urgente desarrollar una praxis en la siguiente dirección:
- Una de nuestras primeras líneas de trabajo tiene que ver con la investigación y validación del acervo cultural, potenciando su desarrollo y articulación.
- El movimiento cultural revolucionario que hay que impulsar, debe desarrollar también estrategias educativas y comunicacionales que permitan construir una nueva dirección intelectual y moral (bajo la inspiración de los aportes gramscianos que reseñamos en otras tesis) pasando de la línea de resistencia a una praxis de mayor insurgencia en el combate cultural, apoyándonos en el legado bolivariano y martiano: “MORAL Y LUCES SON NUESTRAS PRIMERAS NECESIDADES” , “SER CULTOS PARA SER LIBRES” o también como lo indicaba el propio Martí en otra dirección “AHORA LA FUERZA ESTÁ EN EL SABER”, “LA FUERZA ESTÁ EN SABER MUCHO”.
- Otra línea de trabajo en la construcción de la hegemonía, tiene que ver con los intelectuales orgánicos:
- La revolución bolivariana demanda de una labor educativa permanente para formar a los explotados y oprimidos en el área socio-política. Este es uno de los cometidos del Proyecto Educativo Nacional (PEN), de la red de centros formativos o “escuelas de cuadro” y de las misiones educativas, en función de la democratización del saber y de la ciudadanización.
- Captación de sectores intelectuales tradicionales, ganándolos para el proceso de cambio.
- Construcción de colectivos revolucionarios que asuman la producción de conocimiento como “intelectual colectivo”.
Estas son tareas urgentes que deben ser asumidas desde el nuevo Estado en construcción, desde el movimiento pedagógico, las redes socio-culturales, las emisoras comunitarias y los grupos revolucionarios en general.
La revolución cultural planteada anteriormente y la reivindicación de los acervos comunitarios que se articulan con la corriente histórico-social (resistencia indígena, cimarronismo afroamericano, ecumenismo), está íntimamente asociada a los poderes creadores del pueblo expresado en la poesía, el teatro, el canto, la danza y las múltiples manifestaciones artísticas, por lo que no reduce a la producción de saberes alternativos y las prácticas educativas.
En este marco, el compromiso del artista se conecta con una opción libertaria, donde la forma y el contenido de su arte se compenetra con el imaginario colectivo, con los sueños y esperanzas que surgen de la transformación revolucionaria de la sociedad.
En esa perspectiva, la construcción ética y estética que se concreta en el canto por ejemplo, se conecta con las experiencias cotidianas del trabajo asociativo, con la defensa de la naturaleza, con la reivindicación de la alegría, con otra manera de cualificar el tiempo libre y el ocio creador.
Los anteriores aspectos conceptuales, remitido a los valores, a la producción simbólica, tienen unos nexos orgánicos con la producción material, con el tejido productivo que hay que construir rumbo al socialismo, concebido como cambio en las relaciones de producción capitalistas:
- Impulso y desarrollo de la revolución cultural que permita superar la alienación consumista, el monopolio del saber, la estética de la mercancía
- Emancipar el trabajo de las relaciones de sumisión: producción de plusvalía, máxima ganancia, mercantilización y división del trabajo.
Estas dos premisas involucran un nuevo enfoque de desarrollo en la óptica de la emancipación del trabajo:
Desarrollo humano integral, necesidades radicales y racionalización del consumo
Cambios en las relaciones de producción: caracterización de las diversas formas de propiedad presentes en la transición( estatal, mixta, privada, social, comunal) enfrentamiento de las relaciones mercantiles, combate de la división social del trabajo.
Superación de la extorsión y enajenación del trabajo, ubicación del doble carácter del trabajo en el capitalismo ( trabajo necesario-trabajo excedente ) su racionalización y humanización, producción con primacía de los valores uso sobre los valores de cambio.
Erradicación de la deformación y desproporción entre los sectores económicos.
Ocupación integral del territorio y superación de la contradicción ciudad-campo. Superar las asimetrías como la que expresa el eje norte-costero y el resto del país.
Lo sustentable y lo endógeno en el nuevo tejido productivo: ecología política y preservación del ambiente. Soberanía productiva y tecnológica.
A partir de estos supuestos teórico-ideológicos, se trata de promover un nuevo enfoque de desarrollo centrado en la equidad y la justicia social, formando integralmente a los ciudadanos(as) (particularmente a los sectores permanentemente excluidos ) en el desarrollo de sus habilidades cognitivas, destrezas manuales, promoviendo valores y sembrando ciudadanía rumbo al socialismo. Se busca la formación en valores, apuntando a la generación de una nueva cultura política como cemento de la democracia participativa, que se orienta también a la inclusión política.
Por esto no estamos hablando de cualquier concepción del desarrollo, sino postulando un enfoque que reivindica el desarrollo endógeno y sustentable en una perspectiva humanista, lo que demanda una ética y nuevos valores en la formulación y empleo de ciencia y tecnología, de igual manera demanda transformaciones educativas profundas
Como hemos indicado en el proceso de transición rumbo al socialismo, se trata de superar la extorsión del trabajo y su conversión en ganancia, de igual manera se combate la DIVISION SOCIAL DEL TRABAJO concretada en el divorcio existente entre el trabajo intelectual y el trabajo manual, planteándose en el proceso de cambio también el enfrentamiento a la separación entre la teoría y la práctica, LA DISTANCIA ENTRE EL “SABER” Y EL “HACER”. Esto se expresa en la necesidad de impulsar un nuevo modo de producción de conocimiento:
- Formación en conocimientos, actitudes y destrezas necesarias para desempeñarse en el terreno productivo empleando una CIENCIA CON CONCIENCIA Y PERTINENCIA SOCIAL, formación ésta que debe ser orientada hacia las demandas y necesidades concretas del sistema productivo de la economía socialista ( cooperativas, EPS, empresas socialistas ) tejido productivo que justifica lo que Oscar Varsavsky denomina “estilo tecnológico “ en el marco de un enfoque de ciencia propia : “… diferente por su contenido, sus problemas prioritarios, sus métodos de investigación y sus criterios prácticos de verdad …”.
- En la transición socialista se requiere una nueva plataforma tecnológica que se inserte en el nuevo enfoque de desarrollo. Por ello, debemos Impulsar líneas de investigación, diseñar y fabricar prototipos de máquinas, equipos, productos y procesos destinados a la solución de problemas tecnológicos comunes del conjunto de empresas o unidades productoras de bienes y servicios que conforman las cadenas productivas, operando como red. Estas son tareas fundamentales para eslabonar la producción-distribución-consumo en la perspectiva del desarrollo endógeno y sustentable, porque como ya reseñamos, hemos heredado un conjunto de máquinas-herramientas que responden a un determinado patrón tecnológico que no tiene correspondencia con nuestra necesidad de desarrollarnos armónicamente, sino que están íntimamente vinculadas a las deformaciones estructurales que hemos descrito, de igual forma, están asociadas a un determinado esquema de rentabilidad, que persigue la máxima ganancia apropiada individualmente. Por ello, podemos decir que nuestros parques industriales poseen una tecnología heterogénea que responde a las tendencias que el capital transnacional impuso a nuestra economía. En consecuencia, no se puede partir de tales activos, sin someterlos a una redefinición técnico-productiva.
De allí surge la necesidad de la reconversión industrial bajo la égida de lo endógeno, la reingeniería bajo la óptica de lo sustentable, la productividad bajo el sello de la humanización del trabajo. Estas determinaciones teóricas e ideológicas orientan permean, penetran, atraviesan todo el Plan Nacional de Ciencia y Tecnología, con implicaciones axiológicas y epistemológicas:
* Está centrado en un nuevo modo de producción de conocimiento con una epistemología constructiva de base inter o transdisciplinaria que se apoya en el dialogo de saberes y la elaboración colectiva. Aquí sigue siendo clave la promoción, fortalecimiento y desarrollo de la Misión Ciencia
* El énfasis hay que colocarlo en la investigación aplicada y en la ingeniería de reversa catalizada por demandas concretas y áreas problemáticas de urgente resolución, particularmente lo que se enmarca en los trenes productivos: petroquímico, acero, aluminio, forestal, entre otros en las industrias básicas.
* El estilo tecnológico debe combinar adecuadamente los acervos y capacidades propias: ciencia y tecnología ancestral, tradicional y artesanal, tecnología blanda, tecnología intermedia, tecnología de punta.
* En esa misma dirección, se requiere definir líneas de investigación en correspondencia con necesidades detectadas en el enfoque de desarrollo, priorizando la seguridad y soberanía alimentaria donde se plantea la transición del modelo agroquímico al modelo agroecológico, ámbito energético y petroquímico, ambiente y habitad, salud, reconversión industrial, entre otras áreas estratégicas.
* También se plantea desarrollar un adecuado proceso de selección y transferencia tecnológica que permita su adaptación y adecuación al modelo de desarrollo y sus diversas redes productivas, como puede ser el caso de las industrias básicas: hierro, aluminio, forestal, etc,
Por estas razones, se requiere de urgente proceso de articulación, que posee diversas connotaciones:
-- El nivel teórico-conceptual, donde se deben hacer los enlaces lógicos, estableciendo los conectores entre el enfoque de desarrollo y el tipo de ciencia y tecnología que aplica.
-- Los aspectos metodológicos y organizativos, donde se involucra el paradigma de planificación ( planificando bajo presión, planificación focalizada en problemas en un cuadro de incertidumbre y complejidad ).
La actual coyuntura es una buena oportunidad para comenzar a hacer los ajustes preliminares:
a.- Introducir el nuevo marco de referencia teórico, bajo el sello de la construcción socialista.
b.- Articular planes y proyectos, explorando área de concurrencia intra e interministerial
c.- Priorizar y jerarquizar el esfuerzo, por ejemplo en la soberanía alimentaria hay que proponer el enfoque del desarrollo rural sustentable, insertando programas como TODAS LA MANOS A LA SIEMBRA, potenciando el CIEPE e instituciones afines. Lo mismo vale para los nuevos materiales y la fabricación, empujando la ingeniería de reversas con el Instituto de Ingeniería para apoyar las empresas socialistas en MILCO Y MIBAM .
A lo largo de estas reflexiones hemos indicado la necesidad de la formación integral dirigida a superar las relaciones de producción capitalistas, donde se plantea la abolición de la jerarquía y el despotismo en la organización del trabajo.
Este aspecto es clave en el combate de la división social del trabajo, tal como se asume en el Plan Simón Bolívar:
“ IV. MODELO PRODUCTIVO SOCIALISTA
Enfoque 4
La producción en la búsqueda de lograr trabajo con significado se orientará hacia la eliminación de la división social del trabajo, de su estructura jerárquica actual y a la eliminación de la disyuntiva entre satisfacción de necesidad y producción de riqueza.
El modelo productivo responderá primordialmente a las necesidades humanas y estará menos subordinada a la reproducción del capital…”
Cumplir con esta orientación hace indispensable colocar en entredicho la manera como se entiende la investigación y la enseñanza tradicional, involucrando en tal sentido un nuevo modo de producción de conocimiento:
a.- Crítica al monopolio y la jerarquía del saber, que se materializa en la expertocracia o en las modalidades tecnocráticas.
b.-Cuestionamientos a la fragmentación del saber que surge de la especialización.
c.-Darle dignidad teórica al trabajo manual, reivindicando el saber popular, propugnando el diálogo de saberes.
d.-Asumir la democratización del saber y el pensar con cabeza propia, como requisitos básicos de la democracia en la fábrica.
e.- Abolición de los secretos tecnológicos, apertura de los libros de contabilidad, humanización de las jornadas y puestos de trabajo.
Los
anteriores aspectos son un marco conceptual que ubica parte de los desafíos que
tiene nuestra educación ( básica o superior ), reconociendo en la escuela o
universidad las secuelas específicas de la división social del trabajo:
1.- Contradicción entre la escuela y la comunidad.
2.- Separación profesor-alumno
3.- Conflictos por el monopolio y la jerarquía del saber en manos de la expertocracia.
4.- Fragmentación y atomización del conocimiento: asignaturas, especializaciones, menciones.
Tales contradicciones impregnan los contenidos curriculares, los planes de
estudios, las estrategias metodológicas y las didácticas, el régimen de
evaluación, no escapando la propia arquitectura escolar: espacios separados,
oficinas, áreas de recreo, organización interna del salón de clase, ubicación
del pizarrón y alineación de los pupitres.
Estas implicaciones de la división social del trabajo en educación, nos permiten comprender el
currículo y su administración:
- Separación entre las materias teóricas y prácticas
- Distinción entre ciclo básico y especialidad
- Tipo de integración entre las diversas asignaturas
- Utilización del
tiempo escolar: turno, horario.
Es a partir de esta conceptualización, como abordamos la transformación educativa, particularmente en educación superior con la Constituyente Universitaria:
1.- Asumir abiertamente el carácter político-ideológico de la formación, es decir, el currículo no es un problema técnico, sino que en el qué y cómo aprender, cuáles contenidos escogemos, cómo los estructuramos y presentamos, qué metodología empleamos, cuál didáctica proponemos, cómo evaluar y acreditar los saberes, todo esto descansa en una determinada concepción del mundo, de la sociedad y del desarrollo, tamizados por diversos intereses: de control y dominio o de liberación y emancipación.
2.- Educación que promueve una revolución cultural y
productiva, basada en el desarrollo endógeno – sustentable.
3.- Formación histórico-cultural con conocimiento pleno de nuestras raíces y del acervo histórico como pueblo Respeto de la diversidad cultural.
4.- Promoción de valores dirigidos al cambio de las relaciones capitalistas de producción. Superar el afán de lucro y la máxima ganancia como móvil social, apuntando a la satisfacción de las necesidades colectivas. Primacía de los valores de uso sobre los valores de cambio.
5.-En el plano de la investigación, se plantea construir un modo de producción de conocimientos más democrático, participativo e implicante, incorporando diversas opciones epistemológicas y superando el monismo metodológico.
6.-Superar la dicotomía investigación básica e investigación aplicada, formulando líneas de investigación que permitan innovar y crear conocimientos y tecnologías propias, así como adaptar y transferir las tecnologías accesibles.
7.-Otorgarle a la investigación el necesario peso curricular, vinculándola a la resolución de problemas nacionales y locales. Otorgar igualmente mayor respaldo financiero a la investigación, y el reconocimiento y fomento del trabajo investigativo entre los profesores.
8.-Superar los anacronismos curriculares de nuestras universidades, que hacen que los aprendizajes no tengan pertinencia socio-cultural y estemos graduando desempleados o tecnócratas.
9.-Superación de las prácticas pedagógicas tradicionales, memorísticas y repetitivas, desarrollando métodos y estrategias didácticas no estandarizadas y produciendo recursos para el aprendizaje flexibles y contextuales. Incluye una reflexión crítica sobre los sistemas de evaluación aplicados por los docentes.
10.-Desarrollo de una práctica docente vinculada con el trabajo productivo, con el entorno social y natural, con el patrimonio cultural de las comunidades, con la problemática general que confronta el país, haciendo énfasis en la pertinencia social de los aprendizajes.
11.-En materia de extensión, superar las concepciones eventistas y simplemente difusoras de las actividades de extensión. Superar igualmente la concepción de la extensión como un mecanismo para obtener ingresos propios. Construir relaciones sólidas entre la universidad y la comunidad, impulsando propuestas en áreas de interés social (tales como salud, educación, vivienda, servicios públicos) en conjunto con organizaciones sociales diversas (consejos comunales, sindicatos, cooperativas, etc.).
12.-Otorgarle a la extensión universitaria un mayor peso académico al que hasta ahora ha tenido curricularmente y en la misma actividad de los docentes.
13.-Fortalecer la formación del estudiantado al calor del desarrollo de la ley del servicio comunitario, mediante la creación de valores en cooperativismo, solidaridad, cultura democrática, gestión participativa de los asuntos públicos, superando el individualismo, la competitividad, la intolerancia, la discriminación de género, racial y social.
14.-Socialización de la investigación universitaria, vinculándola a los sectores estratégicos de la nación: petróleo, manufactura, agricultura.
15.-Desarrollo de la municipalización de la educación universitaria, respaldando la experiencia de las aldeas universitarias y la aplicación de modalidades no convencionales de aprendizaje.
E/Carlos Lanz Rodríguez
19 de Diciembre de 2007.
Objetivos
I. Alcanzar irrevocablemente la democracia protagónica revolucionaria, en la cual, la mayoría soberana personifique el proceso sustantivo de toma de decisiones
II. Construir la base sociopolítica del socialismo del siglo XXI
III. Formar una nueva cultura política basada en la conciencia solidaria del ciudadano, de sus derechos y responsabilidades
IV. Construir un sector público al servicio del ciudadano que conduzca a la transformación de la sociedad
V. Ampliar los espacios de participación ciudadana en la gestión pública
VI. Fortalecer la práctica de la información veraz y oportuna por parte de los medios de comunicación masivos
VII. Fomentar que los medios de comunicación masivos formen parte de la promoción y defensa de la soberanía nacional
VIII. Consolidar al sistema de comunicación nacional como instrumento para el fortalecimiento de la democracia protagónica revolucionaria y la formación. “