A Todos los que salieron a la calle, y empuñaron el fusil de la dignidad en los momentos de peligro, estuvieron prestos a defender la revolución en cada uno de los lugares donde se encontraban contra la acción enemiga. Y a los jóvenes que se unieron con su pueblo para defender su revolución, para defender nuestra revolución; defender las instituciones que se han creado a fuerza de sacrificio, defender los logros que todo el pueblo ha conseguido en nueve (09) años de revolución bolivariana. Todo el pueblo unido, defendió en 24 horas esta revolución. La intención del enemigo era sacar por la vía del golpe de estado a nuestro comandante presidente Hugo Rafael Chávez Frías, y así mismo sembrar el caos en el país. La acción decidida de nuestro pueblo liquidó la intentona imperialista en sólo 24 horas. Allí jóvenes que aún eran niños se llenaron de gloria. Algunos están hoy aquí como exponentes de esta revolución heroica, y de los jóvenes caídos en combate sólo nos queda su nombre y su heroísmo por defensa de la revolución, que nos inspira y nos da mucho más fuerza para defender nuestra patria, nuestra revolución, para estar preparado para nuevas batallas que habrá de dar, para nuevas actitudes heroicas frente al ataque imperialista.
En el momento de la defensa de la revolución, la democracia, la patria, la tarea más importante, es la de unir al pueblo venezolano, porque mientras exista un “11”, siempre habrá como respuesta un “13”. Hoy la defensa de la revolución sigue arpando el primer lugar en nuestros desvelos. Pero no debemos olvidar que la consigna que guía al pueblo venezolano es: “El pueblo unido jamás será vencido” esta consigna es universal, y está íntimamente unida a los pueblos oprimidos del mundo, que la defensa de cualquier revolución, no debe estar dispersa, y el único requisito que nos pide la patria, es estar unido y prestos a la defensa. Que además debemos defender la revolución, construyendo con nuestro trabajo y preparando los nuevos cuadros técnicos para acelerar mucho más su desarrollo en los años venideros.
Cuando los apatrida se plantearon la salida, de nuestro camarada comandante presidente Hugo Rafael Chávez Frías, por las malas, o mejor dicho por la vía inconstitucional, como lo fue el golpe de estado del 11-A el pueblo dijo "presente" una vez más, respondiendo al llamado de la revolución invadiendo todos los rincones de la patria, para defenderla. Y así, en pocas horas, exactamente 24 horas, donde hubo incluso mártires de nuestra revolución, pudimos anunciar una nueva alternativa en América Latina y al Mundo, la Venezuela revolucionaria.
El estudio a todos los niveles es también hoy una tarea de la revolución venezolana; el estudio mezclado con el trabajo, como en los casos de la Misión Ché Guevara, jóvenes y adultos, que toda su vida fueron excluidos, hoy en esta revolución trabajan y estudian para seguir adelante, y tener una vida digna que siempre se la habían negado. Es una tarea de sacrificio que se hace alegremente reuniéndose los jóvenes y adultos, una vez más unido para llevar su mensaje revolucionario, su mensaje socialista, su mensaje de la nueva mujer y el nuevo hombre.
Pero es muy importante esta tarea, porque reciben experiencias nuevas: una nueva experiencia del contacto humano, nuevas experiencias de cómo es el trabajo colectivo y, de todo lo que hay que hacer para mejorar el nivel de vida, de compatriotas, que viven en regiones apartadas, y que deben tener el mismo nivel de vida que existen en las ciudades. En este roce entre pueblo, se recibe experiencia y madurez revolucionaria. Y los camaradas que pasan por aquellas tareas de alfabetizar adentro ó fuera de nuestra patria; que al estar en contacto directo con nuestro pueblo ayudándolo lejos de su lugar habitual de vida, reciben —puedo afirmarlo— más aún de lo que dan, ¡y lo que dan es mucho! A estos camaradas muchas felicitaciones por el digno trabajo realizado, siendo el único interés en juego, preparar a los compatriotas para servir a su patria.
Esta digna forma de trabajar, es la forma que mejor cuadra a esta revolución bolivariana, se educa para el socialismo, esta forma digna en la cual el trabajo pierde la categoría de obsesión que tiene en el mundo capitalista y pasa a ser un deber social grato que se realiza con alegría, que se realiza al son de cánticos revolucionarios en medio de la camaradería más fraternal, en medio de contactos humanos que vigorizan a todos y que elevan a todos.
Además, esta revolución, sigue avanzado mucho en su organización, ya tenemos un Partido Político PSUV. Podemos dar fe, con esta organización de hoy, que hay una gran madures política. En todos lados, deben existir centros de trabajo, en todos los organismos administrativos, en todos los lugares que haya que ejercer la acción, allí debe estar el pueblo trabajando para la revolución. El avance organizativo debe ser considerado también como un logro importante de esta revolución.
Sin embargo, camaradas, en este camino difícil ha habido muchos problemas. Ha habido dificultades grandes, ha habido errores groseros y no siempre hemos podido superar todo esto. Es evidente que el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), como organismo mayor de esta revolución, conjuntamente con el Polo Patriótico, integrado por Organizaciones Revolucionarias al lado de esta revolución, todos los camaradas debemos beber de las experiencias de los compañeros que han trabajado toda su vida en tareas revolucionarias (PCV-MEP-PPT). Y deben recibir siempre y recibir con respeto la voz de esa experiencia. Pero esta revolución, tiene que crear. Una revolución que no crea es una anomalía realmente. Y a la revolución bolivariana le ha faltado un poco de espíritu creador. Ha sido a través de su dirigencia demasiado dócil, demasiado respetuosa y poco decidida a plantearse problemas propios. Creando se empieza a pensar con la propia cabeza.
Patria Socialismo ó Muerte Venceremos
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