La significación histórica de la confrontación electoral que se vivirá en Venezuela el próximo 26 de septiembre, donde se elegirán a los próximos diputados integrantes de la Asamblea Nacional, se marca, no solo porque los derechofascistas, jugando al síndrome de Honduras-Zelaya, en el afán de salir del Presidente Hugo Chávez, no vacilarán en su táctica de utilizarlo con la pretensión cumplir la tarea que de nuevo les ha encomendado el imperio yanqui contra la Revolución Bolivariana; también esta contienda se distingue porque se contará con la participación primaria y directa de la militancia total del PSUV para designar a sus candidatos, siéndose consecuentes con el binomio del compromiso y consagración entre el Líder Comandante y el Pueblo Venezolano.
En esta circunstancia transcendental, para la escogencia de los candidatos psuvistas, tiene que servir para exigirnos el sentido de la responsabilidad militante, primeramente para quienes nos toca escoger, asumiendo así plenamente la responsabilidad y la confianza encomendada por el Comandante a las bases, entendiendo que nace en cada uno de nosotros, la obligación de hacer un estudio concienzudo y general de l@s autopostulad@s; estos hombres y estas mujeres que se propusieron por única y voluntad propia, tienen que ser capaces de entender la responsabilidad, que les tocará asumir una vez elect@s, de allí que los electores, como parte de la contraloría política, nos toca la ineludible obligación de indagar para saber, amen del examen de conocimiento dispuesto por el Camarada Presidente, de los autopostulad@s, qué hacen y qué piensan; con quién andan y con quién han andado; qué ideas pregonan para ser convertidas en leyes que permitan lograr éxito en la profundización del Socialismo; cuáles son sus grados de autocrítica, desprendimiento y compromiso colectivo; cómo están en el ego del primero yo, después el mío y luego, si alcanza, para los otros; hasta dónde alcanzan en la humildad, el reconocimiento de errores, asumiendo las consecuencias de sus actos y la disponibilidad de enmendar; dónde llega en su capacidad política y la tolerancia de escuchar las críticas? En fin, a qué distancia se encuentran de la moral que expone y practica el Presidente Chávez?
En torno a l@s AUTOPOSTULAD@S, tomando en cuenta el alto número de participantes, con el innegable derecho asistido, se presenta una gran responsabilidad parra fortalecer fórmulas internas en sintonía de la izquierda revolucionaria y lograr los objetivos histórico-políticos en la Asamblea Nacional, alejándose del protagonismo mal entendido y peor aplicado, que se llena de egos personalistas, ambiciones para sembrar la división de esfuerzos en la dispersión de votos; se debe insistir en evitar que se entronen intereses ajenos en conciencia, mente y sentimiento en el Proceso Revolucionario, por ello, tenemos que serles sumamente exigentes en la responsabilidad política presente y futura de cada uno y una de est@s autopostulad@s, porque ell@s deben estar en condiciones para ser los primer@s en saber, el tamaño del compromiso que está en juego, ya que no estaremos en un concurso para medir buenas voluntades de quienes “pregonen resistencia” a los cacareados maletines llenos de $; se trata de la necesaria escogencia de mujeres y hombres que, a pesar de las inocultables adversidades devenidas de conductas antirrevolucionarias, fuera y dentro del Proceso, tengan también un liderazgo suficientemente capaz de entusiasmar, organizar y movilizar a la militancia del PSUV., para los actos de votación en los comicios internos del PSUV., así como a la chavista para el domingo 26 de Septiembre, como garantía de derrotar la perjudicial ABSTENCIÓN que en los últimos procesos electorales, se ha convertido en la principal causa de baja del caudal de votos del chavismo.
Patrulla “La Voz Comunal”
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