Y ahora sigue el Vaticano

Ya se rompieron las relaciones con la neocolonia de Colombia, -si señor corrector, en minúsculas,- la pobre niña mimada del Libertador ya no es una republica, es una colonia, una enorme base militar yanky. Ya no merece ser llamada Republica.

El gobierno saliente y el entrante son solo unos títeres, unas marionetas de estados unidos. Unos entreguistas, unos vende patria, unos cipayos, unos obedientes sirvientes de los intereses del tío sam.

Estos hijos de santander, traidores a Bolívar y a la Patria grande, -si en mayúsculas,- Patria Grande, el sueño de integración y unión, que fue destruido por los traidores santafecinos. Esos hijos de santander digo por no decir hijos de puta, -sin insultar a las mujeres de la vida publica,- que han mantenido en el atraso, en la miseria a más de la mitad de la población, ayudados por una iglesia católica casada con la oligarquía, defensora de los ricos, tal como aquí. Estos miserables digo han entregado a la pobre Colombia a los gringos, y están hoy cumpliendo ordenes del departamento de estado contra nuestro país.

Hoy nuestra patria defiende los ideales de ese grande hombre llamado Simón Bolívar, hoy desde nuestro suelo se defiende y continua con la lucha del libertador. Eso al sionismo internacional, a las transnacionales, a los banqueros globales, a los ricos y poderosos les molesta, les incomoda, les daña sus negocios y su hegemonía.

Conviene clausurar la embajada de Colombia en Venezuela, y ya de paso romper relaciones con el vaticano, un estado minúsculo que no nos proporciona nada más que problemas y obispos, cardenales y curas pedófilos. Ya es hora de dejar de gastar ingentes cantidades de dinero en una delegación diplomática en el vaticano, y de gastar en la nunciatura.

Ya es hora de anular el acuerdo por de más leonino e inconstitucional con el vaticano. Basta de mantener a unos zánganos que no trabajan, no producen, no colaboran con el crecimiento de la nación y que están alienando a la gente con sus cuentos de camino.

Hay que expropiar los colegios católicos, el estado los subvenciona, les da dinero y ellos cobran mensualidades exorbitantes. La educación debe ser laica, gratuita y obligatoria. Hay que hacer que los curas estén lejos de los niños. Es mejor prevenir que lamentar.

Hoy en día el enemigo yanqui tiene un cómplice, digamos que tiene varios; en Perú esta uno, en Panamá otro, en Costa Rica otra. Estemos claros la economía gringa necesita la riqueza de su patio trasero, y no se van a estar quietos hasta tratar de alcanzarla. Tristemente el vaticano esta del lado de los gringos. La iglesia sabe que el tío sam defiende la riqueza, la oligarquía, la opulencia. Reconozcámoslo no hay obispo, cardenal, monseñor, etc, flaco, pobre y desnutrido. Todos están bien comidos y mejor bebidos. La pompa y boato en la que viven no la quieren abandonar.

Ya basta de pagar a unos zánganos por un oficio innecesario. Que Roma pague a los curas sus salarios, hay que sacar las manos de los ensotanados de nuestros impuestos, que trabajen, que los mantengan los católicos practicantes, pero no el estado.

Mantener relaciones diplomáticas con el vaticano no tiene ni razón ni sentido. No produce nada de beneficio para el país, solo gastos y perdida de tiempo. Hay que romper relaciones ya mismo con ese estado parásito.

PATRIA SOCIALISMO O MUERTE

ESTAMOS VENCIENDO

cmaglione@cantv.net







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Carlo Maglione


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